Muchos enigmas por resolver y un sinfín de desafíos que pondrán a prueba nuestro ingenio. Te contamos la primera impresión que nos ha causado la esperada tercera entrega de la aventura gráfica realizada por Pendulo Studios.
Juegos de la talla de Igor: Objetivo Uikokahonia y Hollywood Monsters labraron una gran reputación al estudio español Pendulo Studios que poco después, sobre todo a nivel internacional, daría el campanazo con la excelente aventura gráfica Runaway: A Road Adventure (publicada en 2001). Seis años tuvimos que esperar para disfrutar de su secuela, El Sueño de la Tortuga, que mantuvo el gran nivel de calidad del original pero sin llegar a la excelencia de éste, lo que decepcionó a más de un seguidor de la serie.
A pocas semanas de su estreno en nuestro país, hemos tenido ocasión de disfrutar de los primeros capítulos del juego y las impresiones no podían ser más positivas. ¿Por qué? Principalmente por su argumento que ya de primeras resulta, aparte de muy atractivo, de lo más sorprendente por romper literalmente con lo esperado, es decir, partir de lo visto en el final de El Sueño de la Tortuga para sumergirnos de primeras en una situación para nada esperada: la aparente defunción de un Brian Basco condenado por homicidio e ingresado en una institución mental. ¿Sorprendido? Pues esto es solo el principio.
Llegan los refuerzos
Las dos anteriores entregas de Runaway se habían centrado exclusivamente en Brian Basco, pero esto es algo que cambia en A Twist of Fate. Y es que ahora la aventura nos permitirá controlar a otros personajes dependiendo del capítulo en el que nos encontremos, siendo la encargada de abrir la aventura la mismísima Gina Timmins, que iniciará la investigación en torno a la misteriosa muerte de Brian Basco.
A nivel jugable, huelga decir, el juego se mantiene intacto con respecto a lo visto anteriormente. Por tanto, volvemos a encontrarnos ante una aventura gráfica de corte clásico basada en el sistema point & click en la que deberemos investigar cada palmo del escenario en busca de objetos de toda clase que combinaremos entre sí y con otros elementos del entorno.
No podían faltar los variopintos personajes característicos de esta serie, aunque en esta ocasión, por lo visto hasta el momento, el tono del juego será más adulto de lo habitual, algo que nos ha encantado porque pese a ello no se han perdido esos diálogos hilarantes y alguna que otra situación francamente alocada. Para que os hagáis una idea, llegará un momento en el que tendréis que dialogar con enfermos mentales en un psiquiátrico, por lo que ya podéis imaginar la que os espera.
También hemos notado que los puzles a los que nos enfrentaremos han ganado en coherencia y lógica, si bien es cierto seguiremos encontrándonos con situaciones que resolveremos de forma… cómo decirlo… ¿original? Y no es algo malo, no nos entendáis mal, puesto que éste tipo de puzles tan rebuscados son parte del encanto y la gracia que ha caracterizado a esta serie.
Muy ligado a este punto, regresa uno de los aspectos más cuestionados de El Sueño de la Tortuga: el sistema de ayudas mediante el cual el simpático pero muy pesado Joshua nos daba pistas acerca de cómo debíamos solucionar nuestros problemas. Pero sí hemos notado, o esa es nuestra impresión, que ahora las pistas que nos va dando Joshua son mucho más enigmáticas que antes, no resultando tan evidente la solución. Pendulo también ha insertado una interesante opción que al activarla, nos mostrará todos los puntos de interés del escenario en el que nos encontremos, pudiendo luego dirigirnos directamente a los mismos para no andar “cazando píxeles” –pasear el puntero del ratón por cara rincón de la pantalla-.
La vuelta al mundo en…
Aunque a primera vista pueda parecer que el juego se mantiene idéntico a lo visto en El Sueño de la Tortuga, sólo bastan un par de minutos para darse cuenta que el motor gráfico ha sufrido un importante lavado de cara: personajes mejor modelados, entornos más detallados y definidos, animaciones más naturales, etc. La interfaz de usuario también ha variado ligeramente ganando en vistosidad, con detalles tan agradables como el poder ver en 3D todos los objetos que hayamos recogido durante la aventura cada vez que los examinemos en el inventario. La música también parece que se adapta mejor que nunca a las situaciones en las que nos veremos envueltos, resultando mucho más acertada que la del juego anterior. Al respecto, no hemos podido valorar el doblaje al castellano del juego –que ya ha sido completado, por cierto- ya que la versión con la que contamos sólo tenía los textos traducidos a nuestro idioma.
Poco más podemos añadir más allá de reafirmarnos en la idea de que Pendulo Studios parece haber aprendido de los errores cometidos en El Sueño de la Tortuga, lo que apunta a que a finales de marzo todos vamos a disfrutar de una grandísima aventura gráfica.