¿Recordáis que hace poco os estuve hablando de Underworld? Pues siguiendo con la temática de vampiros, hoy me he acordado de Van Helsing. Esta película de 2004 combinaba fantasía y terror para presentarnos al famoso cazador, figura que ya habíamos podido ver en otras cintas como Drácula. Aquí se le daba una visión mucho más espectacular y plagada de acción, la cual hacía que fuera bastante llamativa para, por aquel entonces, una niña como yo. Sin embargo, me he sentido muy triste cuando he querido buscarla en alguna plataforma de streaming y he visto que no estaba en ninguna parte, (no al menos como parte de las suscripciones). Era una película fantástica con muchas virtudes de las que hoy me apetece hablar.
¿Quién es Van Helsing?
Van Helsing es un personaje ficticio que aparece en la famosa novela de Bram Stoker, Drácula. Es un cazador de vampiros encarnado en la película de 1993 por Anthony Hopkins. Sin embargo, en esta versión, nos encontramos con un protagonista mucho más joven, atlético y con un pasado mucho más desarrollado, aunque también vinculado al vampiro, al que da vida Hugh Jackman.
Así, este cazador se dedica a ir tras los distintos monstruos, (algunos conocidos como Jekyll), hasta que es enviado a Rumanía para ayudar a la familia Valerius, la cual está siendo aniquilada en su intento por matar a Drácula. Ya solo quedan dos, Ana y Velkan, pero si no consiguen cumplir su cometido, su familia no podrá descansar en el cielo, siendo necesario que este intervenga para conseguir derrotar al vampiro y a sus secuaces.
Van Helsing es una mezcla de los famosos monstruos de Hollywood. Podemos encontrar a Dŕacula, a Jekyll, pero también una trama que tiene que ver con la creación del monstruo de Frankstein. Así, encontramos toda clase de elementos fantásticos, que no solo tienen que ver con los chupa-sangre y, sobre todo, mucha espectacularidad a la hora de enfrentar a los enemigos. Jackman encarna al típico protagonista capaz de hacer toda clase de acrobacias, fuerte y competente, siendo acompañado también por un personaje secundario que funciona como alivio cómico y por Ana, Kate Beckinsale, a la que vimos precisamente en Underworld. Al reparto se suma Richard Roxburgh como el conde, aportando su característico toque personal al papel.
Una mezcla de elementos fantásticos
En esencia, Van Helsing es una película pensada para el público familiar que, por mucho que tenga una temática de terror, se nutre de la acción y la fantasía. No es una cinta especialmente violenta o sangrienta, no más de lo necesario. Dura un poco más de 2 horas y nos presenta un poco de todo: humor, acción, misterio, terror, romance...Lo cierto es que la cinta estaba pensada para ser el inicio de una serie de películas, pero las malas críticas hicieron que se quedara en tan solo la primera parte. Recaudó cerca de 300 millones de dólares en taquilla.
Y es cierto que, más a día de hoy, tiene detalles que denotan el paso del tiempo como, por ejemplo, los efectos especiales. Las tres vampiras son muy famosas, pero todas las escenas en las que están transformadas o incluso los momentos de los hombres lobo se notan bastante artificiales. Como puntos positivos, creo que recoge muy bien la esencia de los monstruos clásicos, Jackman es un buen protagonista, y hay momentos tensos bastante interesantes. Además, algunas piezas de la banda sonora como "Journey to Transilvania" merecen mucho la pena también.
Cabe destacar que esta cinta tiene un parecido bastante cercano con La Momia y no es casualidad. Su director, Stephen Sommers, ideó esta historia después de terminar con la segunda entrega de la saga protagonizada por Brendan Fraser, pero parece que no consiguió encontrar la misma esencia que triunfó con la anterior.
Con todo ello, ya sea porque la vi de pequeña y no era muy exigente o porque el tiempo la ha guardado con un poco más de cariño, lo cierto es que he sentido mucha pena al no encontrarla por ninguna parte. Está claro que no todas las películas de fantasía pueden ser El Señor de los Anillos, pero está era bastante entretenida y mantenía esa moda vampírica que hubo a finales de la década de los noventa y comienzos de los 2000 de una forma diferente.
Recuerdo algunas escenas, como la introductoria del molino en blanco y negro, bastante potentes. Las transformaciones en lobo, la parte del baile de máscaras o la revelación del misterio principal sobre la memoria de Van Helsing eran momentos que funcionaban bien. A lo mejor es momento de darle una oportunidad, aunque tendremos que esperar un poco para ver si la encontramos disponible dentro de los modelos de suscripción actuales.
Ver 24 comentarios