Análisis de Prison Break

Análisis de Prison Break
Facebook Twitter Flipboard E-mail

La primera, y única buena, temporada de Prison Break ya tiene videojuego, y los chicos de Zootfly han sido los encargados de su desarrollo. El veredicto de este prometedor proyecto difícilmente podría ser más lamentable: Nada que rescatar de este juego de dudoso gusto.

Los videojuegos basados en series o películas tienen una tradicional, y mayoritariamente merecida, mala fama dada la escasa calidad de los productos que hemos recibido en los últimos años. Si alguien pensaba que Prison Break podía revertir esta situación se dará cuenta de que estaba equivocado con sólo unos minutos a los mandos del videojuego.

Los chicos de Zootfly, responsable del vídeo tecnológico de Cazafantasmas que tanto revuelo causó en su momento, demuestran con este título que los videojuegos Next-Gen todavía les quedan algo grandes. Nada hay de memorable o, siquiera, interesante en este olvidable Fox River virtual, aparte de una aburridísima campaña individual y un torpe homenaje a la primera temporada de la exitosa serie de televisión.

No es que los Dominic Purcell o Wentworth Miller (en pantalla) de carne y hueso sean precisamente grandes actores, pero parecen Robert de Niro y Marlon Brando al lado de sus inexpresivos alter-egos virtuales.
No es que los Dominic Purcell o Wentworth Miller (en pantalla) de carne y hueso sean precisamente grandes actores, pero parecen Robert de Niro y Marlon Brando al lado de sus inexpresivos alter-egos virtuales.

Conspiración Fallida
En Prison Break seremos Tom Paxton, un agente de la ley infiltrado en la prisión de Fox River que tiene como principal objetivo ponerse en contacto y espiar a Scofield, el verdadero protagonista de la serie. A partir de la secuencia inicial ya nos daremos cuenta de que la ágil narrativa por la que se caracterizaba la primera temporada de la serie de televisión brilla por su ausencia en el videojuego.

Los personajes están, sí, y algunas situaciones se repiten, sin embargo nada tiene chispa y la campaña individual, única oferta jugable salvo un triste remedo de Club de la Lucha, se desarrolla durante poco más de seis horas en la más absoluta de las monotonías. Habla con este preso, haz ese favor a uno de los funcionarios de prisiones, peléate con aquel, roba esto otro…

Decir que la narrativa de Prison Break es poco satisfactoria sería un eufemismo, y es que el videojuego no se esfuerza lo más mínimo en dotar de interés, variedad o el más mínimo atractivo a su propuesta de Modo Historia.

Si a esto sumamos la manifiesta pobreza de la que hacen gala todas las dinámicas jugables lo que tenemos entre manos es Prison Break, un juego que se divide en combates cuerpo a cuerpo y sigilo y que no logra levantar el vuelo en ninguna de las dos facetas.

El título trata de erigir una falsa sensación de libertad en los módulos de celdas y en los patios de la prisión, sin embargo con sólo unos minutos nos damos cuenta de que sólo se puede hacer una o dos cosas a lo sumo en cada sección, con lo cual este libre albedrío es poco menos que caricaturesco.

El intento de dotar de cierta vida a los corredores de la prisión ha sido un fracaso total. La falta de interacción con el resto de reclusos es una constante.
El intento de dotar de cierta vida a los corredores de la prisión ha sido un fracaso total. La falta de interacción con el resto de reclusos es una constante.

Infiltración, Paliza, Repite…
No tendríamos ningún problema con la linealidad del juego de Prison Break si viniera acompañada de un buen combate o de unas fases de infiltración de una calidad, al menos, aceptable. Cuando la infiltración en un recinto de calderas para robar un pequeño alijo de droga se reduce a evitar a un barrendero y a un guardia que cada 15 segundos tira de su petaca de Whisky, nos damos cuenta de que el desafío no va a estar a la altura de lo que esperábamos.

¿Que somos descubiertos? Volvemos a empezar desde el principio. ¿Que nos apetece probar otras vías de superar estos niveles de sigilo? No tendremos opción. Sólo hay una forma de superar cada situación que nos propone el videojuego, y es que el título no nos deja salirnos lo más mínimo de su encorsetadísimo diseño de escenarios.

Hay tres niveles de dificultad en Prison Break, pero ninguno de ellos acaba afectando realmente a nuestra experiencia de juego más allá del daño que podamos recibir en los combates, puesto que ni tan siquiera parecen incrementar la agudeza visual de los incompetentes guardias de la prisión. Cuando entremos a combatir contra algún oponente sólo tendremos tres opciones, golpear fuerte, golpear suave o bloquear: Si las accionamos en el orden correcto no tendremos problema alguno para superar los diferentes enfrentamientos, especialmente si buscamos los puntos débiles de la sonrojante inteligencia artificial: ¿Ejemplo? Éstos son fácilmente explotables como, por ejemplo, tumbar a un enemigo y buscar siempre su espalda mientras se levanta trabajosamente para poder volverle a tumbar una vez detrás de otra.

La técnica del ensayo-error es la única viable en Prison Break. Sólo hay una forma de superar cada nivel, y si somos descubiertos volveremos al principio. Habrá que memorizar cada sección como única forma de superarlas.
La técnica del ensayo-error es la única viable en Prison Break. Sólo hay una forma de superar cada nivel, y si somos descubiertos volveremos al principio. Habrá que memorizar cada sección como única forma de superarlas.

Si jugablemente Prison Break es un videojuego, digamos, poco recomendable; gráficamente el título parece no haber sacado partido alguno de la Next-Gen, pareciendo a menudo un juego de PlayStation 2 o la primera Xbox sólo que con una resolución HD.

No queremos hacer leña del árbol caído así que únicamente comentaremos que entre lo positivo se encuentra un modelado de rostros aceptable y una iluminación meramente apropiada, y que en lo negativo el reciclaje de modelados es abusivo, las texturas son lamentables y las animaciones de una pobreza abrumadora. Por si fuera poco el juego tiene graves problemas en términos de bugs y fallos de diversa índole.

Por lo que respecta al sonido poco que comentar. La música es reiterativa y poco inspirada, y el juego llega a nuestro país en versión original con la única traducción de sus subtítulos. Al menos podemos escuchar a los actores originales de la serie que han prestado sus voces para el trabajo.

Pésimo

No recomendado

Prison Break

Por: El equipo de 3DJuegos
No recomendado

Lamentable adaptación de la serie Prison Break a los videojuegos que no tiene un solo elemento de redención. No encontrará el jugador ni interés por la historia, ni un apartado gráfico a la altura, ni tan siquiera aspectos jugables que le motiven de alguna forma. Lo peor que se puede decir de él es que los fans de la serie serán los más decepcionados por él.

Comprar Prison Break
Jugadores: 1
Idioma: Manual en español, textos en español y voces en inglés
Duración:
Comentarios cerrados
VÍDEO AVANCE

14.006 visualizaciones

Ya HEMOS JUGADO a HELLBLADE 2, el GRAN EXCLUSIVO de XBOX en 2024 - NUEVO GAMEPLAY

En 3DJuegos ya hemos tenido oportunidad de probar Senua's Saga: Hellblade 2 de primera mano durante casi una hora en nuestra visita a las oficinas de Ninja Theory. Te contamos nuestras impresiones.