Autor de grandes éxitos de la literatura como La Caza del Octubre Rojo, Juego de Patriotas o Peligro Inminente, el prolífico autor Tom Clancy ha fallecido a los 66 años de edad. Pero tras de sí deja un legado difícil de olvidar no ya solo para la industria del libro, sino también para cualquier aficionado al mundo del cine y, especialmente, el de los videojuegos, donde se ha labrado una reputación admirable con sagas tan emblemáticas como Splinter Cell o Rainbow Six.
Oscuras conspiraciones políticas, espías, traidores, tensos conflictos militares, patriotas, la guerra nuclear… desde que en 1984 sorprendiera al mundo con su primer gran best-seller, La Caza del Octubre Rojo, Tom Clancy se ha convertido en uno de los grandes referentes de la literatura política con tintes militares gracias, principalmente, a las historias de ficción protagonizadas por el analista de la CIA Jack Ryan, al que hemos seguido incansablemente durante casi 30 años… hasta ahora.
Y es que tras una carrera literaria plagada de éxitos, con obras tan recordadas como Peligro Inminente, Juego de Patriotas o Deuda de Honor, Tom Clancy ha fallecido a los 66 años de edad en un hospital de Baltimore, su ciudad natal, llevándose consigo esa gran pasión con la que escribió tantísimas novelas de su ya característico género del tecno-suspense. Un estilo literario en el que combinó con gran maestría la tradición propia de las historias de espías, inicialmente basadas en el contexto de la Guerra Fría, con un exagerado nivel de realismo al hacer referencia a cuestiones técnicas, políticas y estrategias militares que, aún a día de hoy, continúa sorprendiendo.
Más teniendo en cuenta que algunas de sus historias, por fantasiosas que parecieran, terminaron siendo superadas por la realidad. Y el mejor ejemplo de ello lo tenemos con el atentado de las Torres Gemelas de Nueva York en septiembre de 2001, que de un modo u otro recuerda a lo leído en la novela Deuda de Honor, publicada en 1995.
Pero Tom Clancy también ha estado muy presente en el mundo del cine y la televisión, con adaptaciones de algunas de sus obras más reverenciadas, entre las que destaca sobre todo la magnífica La Caza del Octubre Rojo, impecable tanto a nivel de reparto como en lo que se refiere a su banda sonora; Juego de Patriotas con un Harrison Ford como principal reclamo, Peligro Inminente, La Suma de todos los miedos… y todas ellas grandes éxitos. Porque allá donde fuera, el sello Tom Clancy era sinónimo de calidad y espectáculo. Y esto es algo que se traslada perfectamente al mundo de los videojuegos, donde el autor también ha tenido una gran presencia.
Por eso, en un momento de duelo como este, en 3DJuegos hemos decidido homenajear al autor como mejor sabemos: recordando su obra para que nadie olvide el sello Tom Clancy. Una marca de calidad con la que hemos convivido durante casi 30 años.
Del libro al videojuego
Aunque son las historias que ha creado para Ubisoft las que más renombre han cosechado debido a su enorme calidad, sería injusto afrontar este especial sin hablar también de todos aquellos videojuegos inspirados directamente en la obra literaria del autor. Que no son pocos precisamente, como ya anticipamos hace unos meses en nuestro especial Juegos de "Libro".
Porque ya a finales de los ochenta la obra de Clancy empezaba a adaptarse a un mercado joven como era el de los videojuegos, con títulos para todos los gustos. Dos ejemplos de ello lo encontramos en los simuladores de submarinos basados en La Caza del Octubre Rojo y Tormenta Roja, lanzados en 1987 y 1988 respectivamente, que destacaron tanto por la cantidad de opciones de juego que brindaban, como por la importancia que otorgaban a la narración de la historia, incluyendo por supuesto montones de cinemáticas –de las de aquella época- y mensajes de texto.
Y tal fue el éxito de algunos de estos títulos, que Microprose no dudó en desarrollar una secuela para La Caza del Octubre Rojo, ampliando más si cabe sus opciones de juego; a la par que se creaba también un videojuego basado en el libro El Cardenal del Kremlin en 1990 para PC y Amiga, centrado por completo en la simulación militar.
El nacimiento de Red Storm Entertainment y Rainbow Six
Ante el imparable crecimiento de la industria del videojuego, y dado que los títulos con el sello Tom Clancy funcionaban muy bien en el mercado, el autor de Peligro Inminente decidió fundar en 1996 su propio estudio de desarrollo, que recibió el nombre de Red Storm Entertainment. Una marca de la que muy pronto empezarían a surgir una serie de grandes clásicos que aún a día de hoy conservan intacto su encanto.
Su primera obra, Tom Clancy’s Politika, es también la menos conocida de todas, puesto que este título de estrategia por turnos no obtuvo la repercusión mediática que esperaban. Sin embargo, este pequeño traspiés no supuso mayor problema para un estudio que muy pronto daría forma a la que es sin duda una de sus obras más emblemáticas: Rainbow Six.
El sucesor espiritual del clásico Hostage: Rescue Mission, publicado en NES en 1988, en el que la acción táctica cobraba un nuevo sentido de la mano de un escuadrón de agentes especiales, que a lo largo de los últimos años han protagonizado más de 15 videojuegos distintos. Algunos mejores que otros, eso está claro, pero todos ellos con un denominador común: táctica y combate en equipo. Una referencia prácticamente inamovible en la mayoría de estos títulos, que sin duda ha creado escuela.
Lo cierto es que las últimas entregas de la saga han apostado algo más por la acción, como muchas otras series del estilo; pero aun así continúa siendo una referencia, como lo demuestra el espectacular Rainbow Six: Vegas. Y esperamos que lo siga siendo con el ambicioso Rainbow Six: Patriots, que tras una impactante presentación inicial, ha caído tristemente en el olvido. Algo que esperamos varíe próximamente.
Rainbow Six destaca por…
- La obligatoriedad de planificar cada movimiento.
- El combate en equipo. Algo que no ha hecho más que mejorar con el juego online.
- Gran realismo en el uso de armas y el equipo de combate de nuestros agentes.
Ghost Recon. La guerra contra el terrorismo
El éxito de la serie Rainbow Six, inspirada en el libro de mismo nombre, dio alas suficientes al equipo de Red Storm Entertainment, que muy pronto, y a partir de ese momento, empezó a trabajar exclusivamente en sus propias historias. Y como resultado de ello, en 2001 nacía la no menos popular franquicia Ghost Recon. Una nueva serie de juegos de acción táctica protagonizada por un escuadrón de soldados de las fuerzas armadas, los Ghosts, envueltos en toda clase de conflictos político militares y de la lucha contra el terrorismo, que ya han protagonizado más de diez juegos.
Títulos en los que de nuevo la acción cooperativa cobraba un protagonismo hasta entonces muy poco explotado en el género, obligándonos a compenetrar todas nuestras acciones con las de los soldados aliados, cada uno especializado en un estilo de lucha distinta, para sobrevivir a los muchos peligros que nos aguardaban en el campo de batalla. Un estilo de juego que se ha mantenido más o menos inalterable a lo largo de los últimos años, aunque también en este punto la acción pura y dura ha terminado imponiéndose paulatinamente a los elementos tácticos. Huelga destacar en este punto que Ubisoft, propietaria de la licencia, prepara el salto de Ghost Recon al mundo del cine.
Ghost Recon destaca por…
- Su fiel recreación de los campos de batalla y el equipamiento militar.
- Cooperación, cooperación y cooperación. Los héroes solitarios no suelen ganar.
- La variedad de entornos conflictivos a los que nos ha transportado.
Sam Fisher, el asesino desde las sombras
Tan solo un año después, en 2002, el sello Tom Clancy dio vida a la que sin duda es una de las franquicias más respetadas y exitosas de la industria del videojuego: Splinter Cell. O lo que es lo mismo, la respuesta de Ubisoft a la serie Metal Gear Solid, a la que plantó cara como solo una historia de este autor podía hacer: con mucho realismo. Dándonos la oportunidad de resolver toda clase de conflictos político-militares alrededor del mundo en la piel de un rudo y letal agente especial, Sam Fisher, capaz de sortear todo obstáculo y enemigo posible sin ser detectado, y sin pegar ni un solo tiro.
Un estilo de juego de lo más apasionante que aun a día de hoy continúa sorprendiéndonos, como bien retratamos en el Memorias Retro que dedicamos a este clásico hace un tiempo. El realismo en el uso de armas y gadgets propios de un espía, el juego de luces y sombras, la libertad de acción que brindaba para sortear cada desafío jugable… con sus más y sus menos, la serie Splinter Cell siempre ha estado a la altura de las expectativas. Cierto es que tras el sublime Chaos Theory, la serie perdió parte de su encanto al dar mayor protagonismo a la acción. Pero tras el sobresaliente [/b]Blacklist[/b], no tenemos dudas de que a Sam Fisher todavía le quedan muchas aventuras por vivir.
Splinter Cell destaca por…
- La libertad de acción que nos brinda para resolver diferentes situaciones de riesgo.
- El uso de armas y gadgets propios de un espía.
- Aparte de su atrayente modo historia, también incluye un fantático multijugador.
La estrategia de EndWar y el combate aéreo de H.A.W.K.
No conformes con sus series de acción táctica y aventuras de infiltración, Ubisoft también decidió probar suerte con nuevas propuestas de juego bajo el sello Tom Clancy. La primera de ellas, EndWar, apostó por la estrategia en tiempo real –por turnos en consolas portátiles- en un contexto tan atractivo como el de la ficticia Tercera Guerra Mundial, recreada al más puro estilo de las obras del autor. Además, el programa incluía una serie de comandos de voz para controlar a las unidades bajo nuestro mando, lo que facilitaba mucho las cosas a los usuarios de consolas.
En la misma línea, en 2009, Ubisoft lanzaba el intenso arcade de combates aéreos H.A.W.K., que adaptaba con gran éxito el universo de ficción del popular Ghost Recon: Warfighter a un título de estas características. Algo que favoreció que poco tiempo después la compañía gala estrenara su secuela. Y no es para menos, dado que ambos títulos nos daban la oportunidad de combatir en una gran variedad de localizaciones distintas a bordo de cazas de combate tan destacados como el Eurofighter Typhoon, el F-22 Raptor, un FA-18E Super Hornet, o el F-14 D Super Tomcat por citar solo algunos de estos vehículos. No fueron obras cumbre, está claro, pero sí bastante disfrutables.
EndWar y H.A.W.X. destacan por...
- Dejaron claro que el universo Tom Clancy podía funcionar con cualquier género.
- La gran variedad de contenidos jugables de H.A.W.X. y su intensa acción.
- EndWar ofrece un interesante enfoque táctico y aprovecha bien los comandos de voz.
The Division, la despedida por todo lo alto
Antes de abandonarnos, Tom Clancy ha puesto su rúbrica al que sin duda es uno de los juegos más prometedores de los últimos años: el espectacular The Division. Una de las grandes sorpresas del pasado E3 de Los Ángeles, que aún a día de hoy continúa sorprendiendo por su despliegue gráfico, lo atractivo de su mundo post-apocalíptico y, claro está, sus llamativas opciones de juego propias de cualquier título de acción táctica, sumadas al potencial de los juegos de rol multijugador masivos en línea.
Un cóctel explosivo que no podía tener mejor pinta, para mayor gloria de un autor que a lo largo de estos últimos 30 años, nos ha regalado infinidad de historias que han funcionado a la perfección tanto en el mundo del libro, como en el cine y los videojuegos. Lo que dice mucho de un Tom Clancy, al que siempre recordaremos por su enorme contribución a la industria del entretenimiento en todas sus facetas posibles.