Como temática para el segundo artículo exclusivo de Assassin’s Creed 2 hemos escogido como tema a su protagonista, Ezio. Descubre con 3DJuegos todo lo que necesitas saber sobre el (anti)héroe que protagonizará la secuela. Conoce su relación con Desmond, la etimología de su nombre, las mejoras con las que podrá contar y las armas inéditas de las que disfrutará.
Ezio y Altair. Altair y Ezio… Los dos nombres fundamentales que la saga Assassin’s Creed nos ha dejado por el momento se unen al de Desmond, el eje conductor de toda la saga. En esta ocasión el protagonista absoluto es el florentino asesino de la secuela, y a su figura dedicamos este artículo.
Charlamos en exclusiva con Sebastien Puel, producer de Ubisoft para Assassin’s Creed II, para conocer todo lo que necesitas saber sobre el nuevo gran nombre que nos deja la franquicia. ¿Cuáles son sus armas favoritas?, ¿Cómo podemos mejorar sus habilidades?, ¿Cómo ganaremos dinero y en qué lo gastaremos? ¿Qué relación tienen entre sí las tres cabezas principales de la saga –Ezio, Altair, Desmond-?
Estirpe Mortal
Altair fue un personaje memorable por su carisma, por su intrincada historia y por vivir en un contexto histórico de una calidad y personalidad indudables. Ezio, por su parte, tiene que luchar por hacerse un hueco en el corazón de los aficionados, y empleará sus destrezas con las armas y la incomparable ambientación renacentista del nuevo capítulo de la franquicia para conseguirlo.
Sin embargo una vez más, y como ya hemos comentado, Desmond Miles será el personaje que ensamble toda la jugabilidad de la aventura. “La saga Assassin’s Creed es la historia de Desmond Miles, y como tal la segunda parte comienza justo donde la primera lo dejó”. Ubisoft, consciente de las quejas de ciertos aficionados sobre la falta de ritmo de las partes protagonizadas por nuestro alter-ego futurista, ha decidido exprimir sus posibilidades para la secuela, sustituyendo su corte de exploración y conversaciones por uno mucho más atrevido y aventurero. “Esta vez habrá mucha más acción en las secuencias que tienen lugar durante el presente”.
La nueva herramienta para viajar en el tiempo mediante nuestros recuerdos genéticos será el Animus 2.0, la remozada base de datos que manejaremos en Assassin’s Creed II. Su funcionamiento ha cambiado mucho con respecto al Animus del juego original, y es que ahora no sólo servirá para escoger cuándo y dónde aparecemos en la campaña, sino que también será una extraordinaria forma de conocer detalles históricos y culturales de una época tan rica como la escogida. Por ahora los creadores han sido muy secretistas con nosotros sobre lo que dará de sí, “de momento esto es todo lo que podemos contaros sobre él. Tendréis que jugar al juego para descubrir por qué es Animus 2.0 una versión mejorada del primero”.
Pero volvamos a Ezio, y es que bajo su nombre se esconde una línea etimológica muy marcada entre lo que supondrán todos los protagonistas de las series Assassin’s Creed. “La decisión del nombre del nuevo protagonista continúa la tradición de llamar a nuestros héroes con iconos de águilas”. Ezio se deriva de la palabra Aietos y Aetius, que significan águila en griego y latín, y en la época era un nombre habitual como homenaje a un famoso general romano del siglo quinto que derrotó a los devastadores hunos comandados por Atila. De igual modo las similitudes entre Altair –pájaro de presa- y Ezio –águila- van mucho más allá de la mera nomenclatura, y es que desde Ubisoft se confiesa incluso que el diseño de su capuchón va en ambos casos destinado a homenajear al de estas majestuosas aves.
Ezio: Retrato de un Asesino
Assassin’s Creed II se prolonga durante 30 años en los que viviremos los momentos más importantes de nuestro protagonista. Comenzaremos nuestra andadura en 1476 con un jovencísimo Ezio de apenas 17 años, y concluiremos el Modo Historia en los comienzos del siglo XVI.
Sin embargo esta progresión de edad que, sin duda, enriquecerá muy mucho la experiencia del videojuego no es la única mejora, y es que uno de los aspectos más polémicos de la primera parte, el combate, recibirá el lavado de cara en el que tanto se está insistiendo desde el equipo de desarrollo.
“Queríamos añadir variedad en Assassin’s Creed II y eso es lo que hicimos”. Las armas del videojuego podrán ser separadas en cinco tipos: Espadas, dagas, mazas y martillos, hachas y espadas de dos manos y las cuchillas ocultas. “Cada tipo de arma tiene sus propias animaciones únicas, y habrá un número enorme de movimientos en total”.
Para la segunda parte, además, se ha optado por una especie de sistema de piedra-papel-tijera similar al de los videojuegos de estrategia, y que servirá para que no sucedan situaciones que devengan en lo repetitivo como en la primera parte en la que podíamos bloquear todos los ataques con un simple botón y con la misma arma. Así pues las espadas y las hachas a dos manos del enemigo, por ejemplo, no podrán ser superadas con una espada normal o con una daga y viceversa. “El usuario necesita ser muy ágil al alternar cada tipo de arma y cambiar las tácticas contra los rivales. Esto nos obligará a combatir de una forma muy inteligente”.
Este no es, sin embargo, el único foco de Ubisoft en lo que se refiere a dotar de diversidad al combate, y es que se pretende que la progresión del personaje sea también un pilar de este propósito de cambio. “Ezio aprenderá muchas habilidades durante el videojuego, y lo hará por sí mismo o con la ayuda de las tres facciones que encontraremos en el juego”.
De este modo podremos aprender cosas como mejoras para escalar más rápido por las paredes, o cómo camuflarnos mejor entre la multitud para hacer de nuestros asesinatos algo más silencioso y efectivo de ejecutar. “Muchas de las mejoras tienen que ver con el sistema de combate, y sin nombrar todos los nuevos movimientos posibles, si es importante destacar que el protagonista podrá ser un maestro de una gran cantidad de armas inéditas como las picas, hachas o martillos de guerra”.
No obstante el avance de Ezio para ser mejor asesino no viene únicamente de este aprendizaje de habilidades, sino también de un progresivo aumento y perfeccionamiento de su arsenal de combate. Así las mejoras de las armas llegan hasta tal punto que en sus niveles más altos pueden ser modificaciones completas del propio accesorio que lo hagan prácticamente irreconocible. ¿Ejemplo? La última actualización de la daga oculta en nuestra toga la convierte en la pistola que pudimos ver en uno de los primeros tráilers cinemáticos del videojuego. “Esta pistola sólo permite cargar una bala en cada ocasión, así que el jugador deberá usarla de forma estratégica. Los jugadores podrán comprar la munición en algunas tiendas de las ciudades”.
Y es que el comercio, como se viene insistiendo desde el anuncio del videojuego, es uno de los elementos primordiales del título. “Los ingresos de dinero llegarán de diferentes formas y también de completar misiones, ya sean principales o secundarias”.
En Assassin’s Creed II, además, se enfatiza la exploración haciendo que podamos obtener suculentos beneficios de dar con cofres con dinero, o también de robarles los bolsillos a gente que encontremos entre la multitud. Podremos gastar los florines que ingresemos en las tiendas comprando nuevas armas y elementos con los que ser más resistentes a los daños, o también comprar muebles, pinturas o mejorar la villa de Ezio, el lugar donde residiremos. No obstante el más novedoso de los elementos en los que gastar el dinero es el de contratar los servicios de las tres facciones que abordamos en el primer artículo especial sobre el videojuego –ladrones, cortesanas y mercenarios-. Gracias a ellos será más fácil eludir, distraer o incluso derrotar a los enemigos.