Responsable de la banda sonora de Halo y gran parte de la de Destiny, fue despedido hace tan solo unos meses.
La disputa legal entre Bungie y su antiguo compositor, Marty O’Donnell, se saldó hace unas semanas a favor del creador de la banda sonora de Halo y gran parte de la de Destiny, que al ser despedido de manera improcedente tendría que recibir cerca de 100.000 dólares por trabajo no remunerado. La cosa no acaba ahí.
Una nueva orden judicial obliga a Bungie a devolver al músico las acciones de la compañía que le fueron arrebatadas sin causa justificada, ya que el estudio tras Destiny tan solo podría hacerse con ellas si Marty O’Donnell hubiera renunciado a su puesto de manera voluntaria o, claro, las hubiese vendido.
Desde Bungie trataron de justificar esta acción indicando que en caso de que O’Donnell recuperase las acciones, su presencia en las reuniones de la compañía sería "molesta", lo que no parece haber servido para que el juzgado cambie de opinión.