Se dirigió a los aficionados que lo piden: “Mirad cuanta gente quiere esto, muy poca. Y apelan con lo de siempre: `¿No queréis dinero?´”.
Chris Pranger, ahora mismo exempleado de Nintendo en su división de localización para Norteamérica, ha anunciado a través de Twitter su despido de la compañía nipona por unas vehementes declaraciones en un podcast de Part Time Gamers.
“Como algunos de vosotros ya habréis oído, sí, fui despedido ayer. Sí, en definitiva fue culpa mía y no, no me lo esperaba”, declaraba visiblemente afectado en Twitter, antes de emitir una carta a través de su Facebook. “Esta semana fui despedido después de una intervención bastante estúpida por mi parte en un podcast que, al final, me ha costado mucho más de lo que jamás hubiera imaginado”.
Pero, ¿cuál fue exactamente el tema de la polémica? Criticó la posición de Nintendo a la hora de traer a occidente algunos grandes videojuegos que han triunfado en Japón y que él considera difíciles de rentabilizar en términos de traducción y distribución, y también atacó a los aficionados que piden traer proyectos de este tipo sin valorar si merece la pena. “Diré sólo lo clásico, lo que dicen los fans cuando no se trae a occidente algo que desean. `¿Por qué odiáis el dinero? ¿Por qué odiáis el dinero, Nintendo?´ No, no odiamos el dinero. Pero no puedes hacer todo”, comentó imitando con voces agudas y paródicas a aficionados, y acordándose de casos de videojuegos que tuvieron su lanzamiento en Europa y Norteamérica en duda como, por ejemplo, el brillante Xenoblade Chronicles, que incluso él mismo cuestiona: “Mira incluso algo como Xenoblade Chronicles, es un juego que la gente adoraba... pero dentro de un grupo muy pequeño. Lo tuvimos en Norteamérica de casualidad, porque alguien en Nintendo Europa dijo: `vale, traduzcámoslo. Alguien asumirá los costes en algún lugar porque seguro que no recupera la inversión por lo grande que es…´ Ya sabes, cientos de horas de voces traducidas. Mucho dinero que se fue en eso. No es un juego del que obtengas lo suficiente como para justificar ese gasto”.
“Por ese motivo no puedes hacer todo lo que se te pase por la cabeza. Y a la gente no le gusta descubrir que su mercado es más pequeño de lo que debería como para justificar los costes de todo lo que se quiere hacer”.