Blizzard está comprometida en hacer un competitivo acorde al de sus juegos pretéritos.
Hoy mismo se ha lanzado Overwatch al mercado. El nuevo videojuego de Blizzard, como en tantos otros lanzamientos actuales, contará con descargas adicionales si el usuario desease acceder a nuevo contenido, pero las microtransacciones no pasarán de elementos estéticos para sus protagonistas. Dicho de otra forma: no cambiarán las dinámicas de juego ni favorecerán a los jugadores que gasten más que lo invertido en el propio producto.
Lo único que se venden son cajas, elementos aleatorios que se regalan por cada nivel conseguido que incluye cinco ítems para los personajes. Dichos accesorios pueden ser nuevos aspectos, grafitis o frases. ¿Quieres conseguir nuevas cajas sin tener que subir de nivel? Fácil: puedes acceder a dos por 1,99 euros, cinco por 4,99 euros, once por 9,99 euros, 24 por 19,99 euros y por último 50 cajas por 39,99 euros.
Se ha sabido que el modo competitivo del juego llegará en una fecha por determinar a lo largo de las próximas semanas, pero parece que el concepto está lejos del temido y calamitoso Pay-to-win. Overwatch ya está disponible: se puede jugar en PC, PlayStation 4 y Xbox One.