El mundo de los portátiles está lejos de ser poco innovador. Aunque a veces parezca que no hay lugar para el diseño vanguardista, existen ideas tan extravagantes como la de crear un portátil diseñado para disfrutar con refrigeración líquida. No, no me he equivocado al usar "bestia" para describir al protagonista de este artículo, el Erazer Beast X40, una auténtica joya del mundo de la tecnología portátil que he tenido el placer de probar durante un mes.
Es posible que a primera vista penséis "este PC no tiene nada especial", pero quiero destacar que la compañía alemana ha decidido apostar por un estilo clásico y sin alardes (justo como me gusta), con un teclado mecánico que es un placer para los oídos. Eso sí, no hablamos de un producto barato, nada menos que 3.799 euros. No obstante, si buscáis lo más top del mercado y un portátil gaming que os dure años, esta bestia es la indicada.
Mis impresiones sobre el Erazer Beast X40
Un portátil elegante con un teclado mecánico
Cuando os digo que los bávaros apuestan por la sobriedad, lo digo con fundamento. El Erazer Beast X40 presume de un chasis sencillo que combina plástico y aluminio, y además tiene una textura antideslizante en la sección del teclado que es muy agradable al tacto; ideal para aquellos que pasamos horas tecleando o jugando. A esto se une un teclado mecánico Cherry MX de perfil bajo con una sensación al tacto simplemente sensacional y un sonido un poco alto, pero agradable.
Erazer Beast X40 Intel Core i9-13900HX/32GB/2TB SSD/RTX 4090/17"
¿Os acordáis del sonido clásico de los teclados de hace 20 años? Pues es exactamente ese sonido. He leído algunas quejas de usuarios sobre este tipo de teclados, pero durante el tiempo que lo he estado usando, no he tenido ningún problema. De hecho, suelo jugar con un teclado externo conectado, pero con el Erazer he hecho justo lo contrario. El recorrido de las teclas es bueno y la sensación es justo lo que esperaba. Eso sí, no esperéis que sea igual que un teclado independiente. Pero para que os hagáis una idea, es mejor que mi teclado personal Logitech Pro X TKL.
En cuanto al diseño, el resto del PC es exactamente lo que uno esperaría de un dispositivo premium. Sin embargo, hay que darles crédito a los alemanes por dos cosas: un diseño del panel táctil muy interesante y bueno, y una disposición inteligente de los conectores de entrada. En primer lugar, el pad táctil es grande, pero lo más destacado es que en sus esquinas superiores derecha e izquierda hay dos pequeños puntos que se iluminan. El punto derecho desactiva la mitad del pad, y el izquierdo lo apaga completamente. No os preocupéis por si estas dos funciones se activan por sorpresa; no son muy sensibles, lo cual agradezco, y necesitan de cierto tiempo para activarse.
En segundo lugar, la distribución de las entradas en un PC como este (con nada menos que dos puertos USB 3.2, un USB 3.2 de segunda generación, Thunderbolt 4, ranura para tarjeta SD, jack de audio 3.5, salida de vídeo HDMI 2.1, conector de alimentación, puerto Ethernet) es súper importante. En la parte trasera, apartados del resto, tenemos el último trío mencionado, dejando las seis conexiones restantes a ambos lados del portátil y permitiendo unas ranuras de aire más pronunciadas.
Pantalla vibrante, pero sin HDR
Un dispositivo de gama alta como este necesitaba una pantalla igualmente buena y grande. Estamos hablando de un portátil con nada menos que 38 centímetros de esquina a esquina y más de dos kilos y medio de peso. Gracias a este tamaño tan generoso, el equipo alemán ha podido incluir un panel IPS de nada menos que 17 pulgadas, con una resolución WQXGA o 2.560x1.600 y una frecuencia de actualización de 240 Hz. Lo curioso es que la pantalla tiene un formato de 16:10, a medio camino entre los formatos más clásicos de 16:9 de 17,5 pulgadas y los más modernos de 18 pulgadas.
En este caso, estamos ante una pantalla con una densidad de píxeles elevada, de nada menos que 177,5 ppp, suficiente para obtener el máximo rendimiento en juegos y contenido multimedia. Sin embargo, presenta ciertos "problemas" como una reproducción de los negros bastante pobre debido a su bajo contraste. Esto genera imágenes un poco más grisáceas en secuencias nocturnas, lo que puede molestar a más de un jugador. Yo mismo me incluyo.
Como ya he mencionado, no cuenta con HDR a pesar de tener un brillo máximo nada despreciable para un panel portátil de 417 cd/m2 (he encontrado paneles independientes con un valor menor en este aspecto). No obstante, a cambio de esta carencia, obtenemos un panel compatible con G-Sync de Nvidia.
El rendimiento del Erazer Beast X40
En cuanto al rendimiento, poco más se puede añadir que no sea excelente. Tenemos entre manos un PC con una NVIDIA RTX 4090, Intel Raptor Lake i9-13900HX y 32 GB de RAM DDR5; un auténtico monstruo. Pero aún así, quiero comentar algunos aspectos interesantes.
En términos de rendimiento bruto, para aquellos que estén interesados, el X40 no necesita DLSS para funcionar por encima de los 60 FPS en casi ningún juego. Recordad que estamos ante lo último de lo último, capaz de hacer frente incluso a Cyberpunk 2077 con Path Tracing. El RPG de CD Projekt, por ejemplo, alcanza los 90 FPS con Trazado de Rayos al máximo (para el Trazado de Rutas necesitamos DLSS en calidad si queremos llegar a los 60 FPS), Palworld al máximo llega a los 120 FPS, Assassin's Creed Valhalla disfruta de 140 FPS al máximo; y The Last of Us Parte 1, a pesar de sus problemas, supera los 100 FPS.
En juegos más exigentes como Alan Wake 2 y Cyberpunk 2077 con Path Tracing es otra historia, pero no por culpa del X40. El TDP de la RTX 4090, aunque alto (175 W), implica que la GPU puede llegar a cierto punto para sacarle todo el rendimiento posible. El survival horror de Remedy Entertainment necesita del DLSS para superar los 70 FPS, y lo mismo ocurre con el RPG. Podéis configurar ambas tecnologías en Calidad, y no tendréis problemas.
Aparte de esto, algo que era más que obvio teniendo en cuenta lo que teníamos entre manos, encontramos un interruptor MUX que evita que los gráficos integrados Intel Iris XE se antepongan a la GPU dedicada. Incluso está optimizado con el Advanced Optimus de Nvidia, que elimina la necesidad de reiniciar el sistema para cambiar entre las configuraciones de GPU. No es algo que muchos usuarios vayamos a aprovechar en el día a día, pero es cierto que son dos características muy útiles, especialmente para aquellos que quieran jugar con los gráficos integrados en juegos de bajo consumo sin tener que ver cómo la RTX 4090 devora la batería.
Refrigeración líquida, un extra que puedes ignorar
Quiero terminar con una sección dedicada a la refrigeración líquida mencionando una cosa: este extra es poco convencional, muy bueno, pero poco práctico. Hablamos de un kit de refrigeración adicional que se vende por 401 euros y que, sinceramente, no es una necesidad imperante. Según las pruebas realizadas, mejora el rendimiento en un 6%, ya que conseguimos disminuir las temperaturas de manera notable.
El kit se conecta en la parte trasera con dos anclajes preparados para ello, y nos permite reducir la temperatura entre 15 y 20 grados, llegando a alcanzar unos 74 grados en el procesador a pleno rendimiento. Eso sí, cabe destacar que si reducimos la temperatura del procesador, aunque no será tan significativo, la GPU se verá menos afectada y llegaremos a unos 60 grados para la RTX 4090.
Así es la conexión trasera con la salida y entrada de agua
Sin embargo, no es algo que el usuario medio vaya a llevar consigo por ahí. Es para el verdadero entusiasta que quiere la experiencia más avanzada. Y es que estamos hablando de un dispositivo de casi dos kilos adicionales, con su propio cableado, que crea un enjambre curioso de cables; y sin olvidarnos de su tamaño, con una altura de 16 centímetros (similar al de una fuente de alimentación).
¿Merece la pena el X40 de Erazer?
Cuando me encuentro con un PC como este siempre me pregunto, ¿realmente vale la pena? La "Bestia" no se llama así por capricho de Erazer, refleja fielmente lo que la compañía ha logrado con este PC. ¿Vale la pena? Sin duda, podría vivir con él de forma exclusiva, sin necesidad de una torre como la que tengo ahora, durante tres o cuatro años más, y quizás incluso me quede corto. Eso sí, hay que tener en cuenta que estamos hablando de un PC pesado, grande y no apto para todos los bolsillos. Está preparado para cualquier cosa, pero a pesar de eso, hay aspectos como la pantalla que no están del todo pulidos. Es un equipo fantástico, con muy pocos peros. Un PC que no dudaría en recomendar a nadie.
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