Intel sufre su primera pérdida anual desde 1986 y buscará revertir la situación sacrificando uno de sus productos menos populares

Pocas compañías han protagonizado tantas noticias negativas como Intel en los últimos meses. Por desgracia para los intereses tanto de los inversores como de los usuarios, no solo se confirmó que Intel pudo haber comprado NVIDIA por una cifra relativamente baja, sino que se ha visto cómo el recorrido de la compañía ha quedado marcado por noticias de lo más trágicas. Y, por ello, a muchos no les ha sorprendido que la firma haya reconocido que integrar la memoria RAM en los SoC de Lunar Lake haya sido un error.

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Como señala el portal TechSpot en una reciente publicación, Intel anunció que sus futuras arquitecturas (como pueden ser, por ejemplo, Panther Lake o Nova Lake) volverán al uso tradicional de módulos de RAM SODIMM, abandonando así la memoria integrada. De esta forma, a pesar de que incluir la memoria en el paquete de Lunar Lake redujo el consumo de energía en un 40% durante las transferencias de datos, llegó a limitar la capacidad de ampliación para los usuarios. Por ello, el paso de un "mercado de nicho" (según reveló el CEO Pat Gelsinger) a un sector más multitudinario a raíz de los PC con IA provocó la aparición de estos problemas.

Intel reportó su primera pérdida anual en los últimos 38 años

Para Intel, esta integración de memoria generó un impacto negativo en los márgenes de ganancia de Lunar Luke, una situación que contribuyó a las pérdidas significativas que reportó en el tercer trimestre de 2024. De hecho, dicha pérdida neta de poco más de 15.000 millones de euros marca un punto de inflexión en la compañía, ya que supone su primera pérdida anual desde 1986. Y, por ese motivo, Intel está considerando reducir e incluso abandonar el desarrollo de tarjetas gráficas para escritorio.

En el año 2022, Intel estrenó su primera línea de GPU y el mundo vio las capacidades de los modelos Ars Alchemist. Sin embargo, aspectos como los retrasos o la competencia tanto de AMD como de NVIDIA afectaron a su impacto en el mercado. Por ello, aunque la firma tiene la intención de estrenar la segunda generación de Arc Battlemage en 2024, es probable que el rendimiento y el éxito en el mercado determinen si continuarán con la serie. Y, así, la firma seguiría su nueva estrategia: menos variantes y productos más trabajados para optimizar tanto su desarrollo como su eficiencia.

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Imagen principal de Hector Reyes (Unsplash)