Persecuciones locas en un vehículo que se transforma prácticamente en cualquier cosa. La propuesta de Agent Intercept es de lo más llamativa, ¿pero también lo es su ejecución? Os lo cuento todo en este análisis.
Uno de los videojuegos de mi infancia fue Chase H.Q., un divertido arcade desarrollado por Taito allá por el 1988. En las descripciones podréis verlo como un juego de carreras, pero en realidad trata sobre perseguir a una serie de delincuentes, dentro de fases de pocos minutos, pero muy satisfactorios. Todo consistía en mover tu bólido sobre la carretera, abriéndote camino entre los obstáculos hasta llegar a un enfrentamiento final.
Agent Intercept rescata esa esencia. Es un juego muy diferente, pero a mí me ha recordado a este clásico de las recreativas. Su planteamiento, desde luego, es similar. Aquí también te pones a bordo de un vehículo en busca de malhechores, pero hay muchas diferencias. La principal es que esto se parece más a una película de James Bond, pero con personajes tan caricaturizados que podrían pertenecer a una serie de dibujos animados. El enfoque es también mucho más fantástico. Aquí no pilotamos un coche normal, sino el Ceptor, un invento de alta tecnología que se puede convertir en una lancha y hasta en un avión. Es una aventura de velocidad por tierra, mar y aire que nos propone niveles cortos pero interesantes, con la suficiente variedad como para aguantar las 4-5 horas que te puede durar. Un juego cortito, con diversión inmediata, no demasiadas pretensiones y por tanto un alcance limitado. Aun así, sigue leyendo, puesto que si añoras algo así puede que te estés perdiendo una buena opción de juego.
Un coche muy especial
La premisa de Agent Intercept es sencilla: eres un agente al mando del Ceptor, el vehículo transformable más avanzado, y debes acabar con la malvada organización CLAW, empeñada en hacerse con el control del mundo. Todo con sus respectivas intros y breves conversaciones de briefing antes de cada misión (voces en inglés y subtítulos en español). No te preocupes, es todo muy rápido, porque aquí lo que importa es coger cuanto antes el controlador.
El juego se divide en un total de tres capítulos, contando un total de 15 niveles que se superan en unos pocos minutos. ¿Y qué te encuentras por el camino? Pues como es evidente, muchos obstáculos. A veces son rampas que aprovechar, minas que evitar o elementos que disminuyen tu velocidad. Sin embargo, lo más habitual es que te encuentres con vehículos de CLAW armados hasta los dientes, y a los cuales deberás destruir con el disparo de misiles, metralletas y hasta láseres.
Importa mucho lo bien que manejas tu coche, con un derrape automático en las curvas y una importante característica de aceleración que te da un impulso recargable con el tiempo. Sin embargo, más fundamental aún es tener reflejos para recoger puntos sobre la pista, así como ítems con los que recargar tu arsenal vehicular. En eso consiste precisamente Agent Intercept, en estar muy pendiente de lo que ocurre en escena para sacar el máximo partido a cada fase. No es sencillo, aunque tampoco es un videojuego que te castigue con una dificultad elevada.
Y es que aunque la base me parece muy buena, creo que el ajuste jugable no está depurado. Me ha faltado un punto de dificultad, porque rara vez han acabado con mi barra de vida. Los jefes finales presentan cierta inventiva, pero ni siquiera en estos momentos he sentido un de desafío acorde. Lo dicho, hay niveles muy bien construidos, y que te ponen en situaciones límite, como ascender a través de un misil de largo alcance que va camino al espacio. Sin embargo, el juego se me ha hecho fácil, aparte de corto.
El juego se me ha hecho fácil, aparte de corto
En realidad, la dificultad viene por completar los objetivos de cada misión, que podrían consistir en obtener cierto número de puntos, aplacar determinadas unidades enemigas o acabar con el jefe final en un plazo de tiempo. El verdadero desafío está en esto, que por supuesto añade rejugabilidad al conjunto. Luego tenemos una serie de misiones secundarias que repiten escenarios, pero con distintas propuestas que sirven para añadir alguna que otra hora de juego, con lo cual el planteamiento no está nada mal…
Por último, el juego añade el modo caza de puntos, que plantea igualmente misiones conocidas, pero esta vez bajo tres perspectivas (con marcadores online incluidos). Batir récord consiste en conseguir el máximo de puntos, Diana propone una divertida propuesta basada en disparar a objetivos con mucha puntería y precisión, mientras que Contrarreloj nos plantea realizar un recorrido en la menor cantidad de tiempo, aprovechando los propulsores puestos sobre el asfalto. Muy interesantes todas estas opciones, porque suman más contenidos a la campaña principal.
En consecuencia, no se puede decir que Agent Intercept sea un mal juego. De hecho, sus valores de producción son decentes. Los gráficos tienen un aspecto cartoon muy cuidado y vistoso, mientras que las melodías se contagian del sentir de las típicas producciones detectivescas y policiacas. El rendimiento es muy bueno en Xbox Series, la plataforma que he probado, y realmente te invito a que lo juegues si como yo tenías ganas de probar algo así. No obstante, en la mayor parte de casos, deberás pensártelo mucho, porque no es un título que sobresalga sobre el resto.
Agent Intercept es un juego muy fugaz, con muy pocas horas de juego, pero aun así un planteamiento interesante, que me ha recordado a joyas como Chase H.Q. Desgraciadamente, le falta un mejor ajuste jugable, un mayor desafío y probablemente una propuesta globalmente más sólida. A pesar de ello, puede llegar a ser un título bastante entretenido, con buena rejugabilidad y una serie de propuestas que alargan parcialmente la propuesta. No te lo puedo recomendar, pero tampoco decirte que pases de largo, porque tiene cosas interesantes.
- Los niveles son variados, interesantes y con momentos que pueden llegar a ser emocionantes.
- Corta duración, pero con cierta rejugabilidad que puede alargar la experiencia.
- La dificultad de la campaña es baja, aunque los objetivos secundarios no lo son tanto.
- Buena cantidad de elementos opcionales, con misiones secundarias y retos online
- El apartado audiovisual es sólido, con una esencia cartoon que queda realmente bien.
