Los videojuegos en formato digital continúan asombrando y ofreciendo fórmulas imposibles en cualquier otro modelo. Dyad es precisamente eso. Con un estilo psicodélico y una jugabilidad divertidísima, este lanzamiento de carreras y "puzles" se convierte en una propuesta única y asombrosa.
Los chicos de Right Square Bracket Left han recogido referencias tan potentes como Rez o Tempest para componer un título con enorme personalidad propia. Dyad es uno de los brillantes ejemplos de esto mismo, con un planteamiento intrigante y metas muy distintas para un lanzamiento que basa su fuerza en su sentido del ritmo.
Ha tardado en llegar al Store de PlayStation Network en nuestro continente, puesto que ya llevaba cierto tiempo en el continente americano, sin embargo ahora los aficionados europeos podrán disfrutar de este potente título. Confuso desde su mera observación, pero apasionante en las distancias cortas, con sólo un par de botones somos capaces de disfrutar como niños.
Mundos Asombrosos
En el juego que nos ocupa tenemos que recorrer gigantescos túneles esquivando a través de su superficie tubular a enemigos y recogiendo los diferentes bonus que se nos ofrecen. El universo de Dyad se construye en base a ser un shooter aparentemente clásico, sin embargo la fórmula está muy lejos de ser tan básica. A partir de ahí controlamos toda la experiencia de juego con el stick y dos botones, algo que parece incluso demasiado simple pero que en realidad ofrece un sinfín de posibilidades. De hecho superar la campaña no requiere demasiado esfuerzo, pero… ¿y lograr la puntuación perfecta? Eso ya es harina de otro costal.
Y es que en realidad todo va tan rápido en el juego que resulta difícil de verdad obtener puntuaciones perfectas, pero veremos como al final de cada partida con la pantalla de calificaciones nos va picando el gusanillo y queremos ir poco a poco mejorando nuestras valoraciones hasta alcanzar porcentajes escandalosamente altos.
Todos los entornos cilíndricos de Dyad son muy sencillos de recorrer, y todo resulta tan fácil como pulsar el botón X para interactuar con todo lo que se cruce en nuestro camino mientras esquivamos o nos acerquemos a los diferentes elementos en base a lo que se nos pida. Así, en función de si actuamos en enemigos o en otros objetos los resultados serán distintos, y además cada uno de los niveles tiene unos puntos básicos que van cambiando y que exigen objetivos diferentes.
Por si fuera poco todo ello construye una experiencia audiovisual que va mucho más allá de lo estético, y que entronca con videojuegos de corte rítmico. Es una verdadera delicia ver cómo todo cobra el tempo que el juego desea, y va aumentando su velocidad conforme se disparan las referencias visuales y la banda sonora de corte electrónico. Todo construye una unidad que representa perfectamente si estamos haciendo las cosas bien o mal con un gran feedback sobre el usuario, y que siempre resulta una puesta en escena tan fascinante como poco sutil. Y es que el fenomenal envoltorio visual del programa a menudo nos distraerá de lo que realmente debería importarnos: el control. Mención especial en este sentido estético para el último nivel, una auténtica delicia que, además, nos quita de encima los "encorsetamientos" para no limitar el disfrute… No damos más pistas.
Por otra parte debe quedar claro que nunca vamos a llegar a aburrirnos, principalmente porque como hemos dicho cada nivel introduce nuevas mecánicas y reglas a la fórmula. Un constante soplo de aire fresco. Es fácil disfrutar de Dyad a pesar de lo sencillo que resulta, y es que la curva de dificultad está tan bien gradrada que hace que en todo momento sintamos un ritmo en nuestro interior con el que es fácil dejarse llevar y sentir que casi nuestros dedos actúan por sí mismos. Por si fuera poco es un producto altamente rejugable, especialmente debido al constante desafío que pone el programa sobre el propio jugador. Superarse a sí mismo a lo largo de los 26 niveles es la gran meta de Dyad.
Es difícil encontrar en el Store de PlayStation Network un videojuego más llamativo y personal que Dyad desde el punto de vista estético. Se trata de un lanzamiento particularmente precioso, cargado de colores rotundos y con unos diseños genuinos e inclasificables. Una joyita audiovisual que, además, viene acompañada de una banda sonora fantástica de corte electrónico.
Indefinible y difícil de clasificar. Dyad es un juego descargable de lo más recomendable para cualquier fan de las experiencias distintas. Su propuesta es más que notable, a pesar de basarse en referencias conocidas, pero su fórmula resultan tan exacta y divertida que es difícil decirle que no.
