Cada vez son más las apuestas que las diferentes compañías realizan dentro del género de los juegos Tower Defense, especialmente los estudios de desarrollo independientes. Y este es el caso de la nueva propuesta de Zen Studios, CastleStorm, título que combina dicha fórmula con otra muy conocida en la que intervienen unos pajaritos muy retorcidos…
Zen Studios es un equipo bastante popular dentro de la escena de juegos independientes. A ellos les debemos los extraordinarios simuladores de pinball FX Pinball y Zen Pinball (entre otros), títulos que han sabido cautivar a un amplio abanico de jugadores en diferentes formatos, iOS y otros dispositivos portátiles incluidos. Por eso mismo nos ha sorprendido tanto esta nueva propuesta, CastleStorm, ya que no se parece en absoluto a la experimentada en sus creaciones más recientes. Pero lo mejor de todo es que además de resultar refrescante, estamos ante una obra muy amena.
Invasión vikinga
CastleStorm nos sumerge en un mundo caricaturesco en plan dibujos animados que resulta sugerente de veras, lugar donde encarnamos el papel de Sir Gareth. Este auténtico caballero medieval debe hacer frente a un duro reto, que no es otro que hacerse con una preciosa gema de un poder brutal que se haya en manos de los locos vikingos, quienes amenazan la paz de dicho mundo. Está claro que el argumento es lo de menos en esta propuesta de juego tan simpaticona, pero por fortuna dicha sencillez argumental está apoyada por un extraordinario sentido del humor.
Pero esta simplicidad narrativa contrasta totalmente con su mecánica de juego, la cual nos ha parecido muy completa, atractiva y adictiva, siendo el gran reclamo de CastleStorm.
No es fácil encasillar y englobar a esta producción dentro de un género determinado. Y es que si bien en el fondo se trata de un juego de estrategia en tiempo real de estilo Tower Defense, el título posee un cúmulo de otros detalles y mecánicas de juego adicionales tan grande que desafían tal catalogación.
¿Angry Birds?
Pero vayamos por partes y desgranemos la jugabilidad poco a poco. De entrada nuestro cometido en cada uno de los niveles es defender nuestro castillo de los constantes ataques de los vikingos, algo básico en esta clase de juegos. Pero como nuestro ejército no es precisamente pacífico, también debemos de preocuparnos de atacar el cuartel general rival, pudiendo hacerlo de diversas formas.
Por un lado tenemos la opción de ir enviando a nuestras tropas (que son gestionadas en tiempo real) al campo de batalla. Con esto conseguimos ir liquidando a las fuerzas invasoras y, de paso, ganando terreno para acercarnos a la fortaleza rival. Y si hacemos bien las cosas, podemos capturar su bandera y superar la fase.
Pero existe otra manera bastante más contundente de alcanzar la victoria: usar la gran ballesta que se encuentra situada en nuestro castillo. De esta forma y al más puro estilo Angry Birds, podemos ir lanzando casi de todo (flechas, ovejas, manzanas explosivas, etc.) tanto a las tropas adversarias como a su propia fortaleza. Y si realizamos esto último debidamente, veremos cómo dicha construcción irá debilitándose hasta quedar totalmente derruida.
Y para añadir más leña al fuego, este DLC guarda otro as jugable bajo la manga: su toque beat´em up 2D. Y es que en ciertas ocasiones también podemos pasar a controlar a alguno de los personajes que se encuentran en el meollo de la batalla, enriqueciendo más si cabe una fórmula de juego ya de por sí muy variada. Puede que algún usuario encuentre esta jugabilidad demasiado abierta y hasta compleja, pero os aseguramos que, sorprendentemente, resulta muy accesible. Es más, si el título peca de algo es de resultar demasiado “blando”, con una dificultad más bien reducida. Ya veréis cómo superar la docena de niveles que componen el modo de juego principal no es tan complicado como pudiera parecer en un primer momento…
El sistema de control ha sido implementado con acierto, consiguiendo que las transiciones entre unas mecánicas de juego y otras sean muy suaves y fluidas. CastleStorm ha sido diseñado para ser disfrutado por cualquier tipo de jugador, de eso no hay duda, y eso se deja notar.
Pero hay mucho más detrás de esta producción. Por un lado es posible ir mejorando y potenciando nuestras tropas con el dinero que vamos consiguiendo: dragones, espadachines, auténticas bestias pardas, ogros y demás monstruos de fantasía pueden luchar a nuestro lado, gozando cada uno de ellos de sus propias características y poder. Y cuanto más poderosos son éstos, más recursos debemos invertir. También tenemos la posibilidad de diseñar nuestro propio castillo gracias a un sencillo editor, opción que se hace entretenida y que puede mantenernos ocupados durante horas.
Modalidades extra
Pero CastleStorm presenta una oferta de juego aún más completa que va más allá de su atractiva campaña principal. Y es que sus diferentes modos complementarios aumentan considerablemente la duración del título, pudiendo jugar también tanto en modo multijugador cooperativo como competitivo.
Por un lado el modo uno-contra-uno está bien integrado. Ya sea jugando en solitario como online o incluso en la misma consola (a pantalla partida), esta opción resulta vibrante y muy recomendable, siendo incluso más divertida que el propio modo de juego principal.
Pero si lo nuestro es cooperar en lugar de competir también disponemos de dos opciones más: Supervivencia, opción en la que debemos olvidarnos de asaltar la fortaleza rival, ya que debemos encargarnos de sobrevivir a las hordas rivales; y Supervivencia de Héroe, que es lo mismo pero controlando a sendos caballeros. Y por supuesto, a esto se añaden los inevitables Marcadores Online.
Esta gran oferta jugable se complementa con un apartado técnico más bien básico pero que ha sido dotado de mucha gracia y personalidad. La línea artística es muy interesante y nos ofrece diseños bastante inspirados para los personajes. También destaca tanto la física de todos los objetos que forman parte del juego, aspecto muy real y conseguido, y el elevado nivel de destrucción de los escenarios. Notable en su conjunto.
Zen Studios ha demostrado que, con talento, se puede llegar a conseguir cualquier cosa. Lejos de su hábitat natural –los juegos de pinball- este estudio ha perfilado un RTS muy ameno y denso en el sentido más amplio y positivo de la palabra. CastleStorm es un gran título.
Dejando de lado su gran especialidad, Zen Studios se ha embarcado en un título de estrategia en tiempo real muy bien "tirado", que reúne elementos propios de ese mismo género y de otros más para conformar una experiencia de juego que merece la pena disfrutar. Además su oferta de modalidades es muy completa y su mecánica de juego resulta accesible a todos los niveles.
