La guerra más cruel llega a consola para seguir sorprendiendo a aquellos jugadores que todavía no hayan podido disfrutar (y sufrir) con uno de los títulos más duros en cuanto a conflicto bélico y estrategia se refiere. Ahora con el añadido de The Little Ones. Los que más lo sufren. Los niños.
Ha pasado un año desde el lanzamiento de This War of Mine y la guerra, aunque no ha cambiado en crueldad, sí lo ha hecho en desafío. La versión que llega a consolas viene acompañado de la pequeña gran expansión The Little Ones, donde tendremos que hacernos cargo de cuidar a los niños durante el conflicto, mientras seguimos tratando de sobrevivir por cualquier método.
Si quieres saber el planteamiento de This War of Mine, puedes leer el análisis original, pues su concepto sigue vigente aquí, teniendo que ocuparnos de las necesidades básicas así como jugarnos la vida por la noche intentando conseguir nuevos recursos, víveres, medicamentos y materiales. Pero en The Little Ones, lo principal son los niños. A la aventura principal se le unen nuevas configuraciones donde podremos ser, por ejemplo, un padre y su hija tratando de sobrevivir en el ya clásico caserón.
Las necesidades serán las mismas, pero tener a un pequeño a nuestro cargo es una carga mayor. El principal objetivo será que su paso por este cruel conflicto sea lo más suave posible, sin causarles más trastornos, y para ello tendremos que hablar constantemente con ellos, responder a sus preguntas, alimentarlos, jugar y construirles nuevos juguetes, e incluso enseñarles diferentes tareas para que ayuden en nuestra supervivencia. Pero ante todo protegerlos.
La guerra de la adaptación
11 bit studios no se ha cortado a la hora de plantear toda situación posible. En los primeros momentos de nuestra supervivencia, tendremos que decidir si abandonar el refugio por la noche para conseguir recursos o quedarnos en casa protegiendo a nuestro hijo. Incluso cuando haya otras personas que se puedan hacer cargo de los más pequeños, cuando regresemos a casa tendremos que hacer frente a sus preguntas: ¿Por qué me has dejado sola?
Cualquier jugador familiarizado con This War of Mine sabe que el estudio polaco no se ha cortado a la hora de plasmar los horrores de la guerra y las situaciones que causa a la población civil. Tan sólo hace falta imaginar lo que pasaría si no logramos que el padre vuelva a casa tras la búsqueda de materiales para, prácticamente, cancelar nuestra partida y volver a intentarlo de nuevo.
Por el momento, This War of Mine: The Little Ones es un port de la versión actualizada de PC (que ya incluye traducción y demás mejoras) junto con la expansión de los niños y es exclusivo de PS4 y Xbox One. Muy probablemente llegará de vuelta a PC en forma de contenido descargable, pero mientras tanto el equipo ha querido centrarse en adaptar todo lo posible el control al mando de consola, con resultados que serán suficiente para algunos jugadores, pero pueden ser demasiado incómodos para otros, sobre todo si han jugado al título con teclado y ratón.
Es uno de los títulos más duros en cuanto a conflicto bélico y estrategia se refiere
Algunas acciones que antes realizábamos casi en forma de multitarea, como llevar a un personaje a una zona mientras damos órdenes a otra, aquí no se podrán realizar, ya que con el mando tendremos que dirigir a una persona en todo momento. Puede no resultar un problema en los días más tranquilos, pero en los más atareados, aquellos donde necesitamos sacar el máximo rendimiento a nuestros talleres, es posible que no tengamos suficiente tiempo durante el día.
Además, algunos movimientos son poco intuitivos, como el desplazar a nuestros personajes por distintas alturas, donde pueden quedarse subiendo y bajando escaleras hasta que marquemos la dirección de forma más precisa. Esto, en los momentos más tensos durante la noche, y en zonas en las que hay distintas alturas muy cerca, pueden jugarnos una mala pasada cuando tenemos que dirigirnos apresuradamente a la salida. Suerte que tenemos un botón que buscará la forma de salir más inmediata, pero si tenemos que ir en sigilo buscando caminos alternativos, puede ser bastante incómodo.
Para algunos jugadores, sobrevivir una vez puede ser suficiente, pero The Little Ones ofrece más posibilidades a la hora de empezar una nueva partida. Está el modo clásico al que se suman las historias de otros supervivientes si queremos vivir el conflicto junto a un hijo, por ejemplo, pero quizá el modo más interesante es que te permite editar todos los parámetros del juego. Este modo también está incluido en la versión de PC que ha ido actualizándose hasta cumplir con muchas de las demandas de los jugadores, tales como la traducción a nuestro idioma y la opción de crear nuestra propia historia. Podremos elegir el número de personajes con el que empezar la partida, pero además editar tanto su descripción, habilidad, retrato y modelado. A ello se le suma la personalización de todo el mapeado del juego, la cantidad de días que queremos que dure el conflicto e incluso la modificación del clima para que tarde más o menos en llegar el invierno, así como la dureza de la estación.
Había poco que pulir en This War of Mine, pero con el añadido de los niños pequeños y las nuevas opciones de personalización, 11 bit studios ha creado un juego aún más redondo. Su mayor pega sigue siendo la adaptación del control, que si bien es lógica podría ser mucho más intuitiva e incluso permitir la opción de desplazarnos por nuestro refugio con mayor facilidad y rapidez. Por lo demás, tanto si te perdiste el conflicto en su momento, como si buscas un nuevo desafío, The Little Ones merece la oportunidad. Pocas veces hemos podido vivir la guerra desde el punto de vista de quienes la sufren de una manera tan cruda como bien planteada.
This War of Mine sigue siendo el mismo gran juego ahora también para consola. El control se resiente un poco en comparación con teclado y ratón, pero los nuevos añadidos como los niños y las posibilidades de personalización de la partida son buenos argumentos para vivir de nuevo esta cruel guerra.
Comprar This War of Mine: The Little Ones- El nuevo añadido de los niños
- Nuevas opciones de personalización de las partidas
- El control adaptado podría haber sido más rápido y preciso
- Las historias personales podrían haber cobrado algo más de importancia
