Los juegos de aventuras de acción y exploración cada vez tienen más presencia. Omega Force nos muestra su particular visión de este tipo de aventuras con su nueva producción: Toukiden 2, la continuación del célebre Toukiden. Análisis.
No fue uno de los juegos más conocidos en su momento, pero para mí la primera parte de Toukiden, el original, fue una de las mejores producciones de todas las destinadas a PS Vita. Esta especie de clon de la excepcional franquicia Monster Hunter de Capcom consiguió reunir en una misma aventura multitud de elementos interesantes y bien plasmados, siendo uno de los juegos más llamativos dentro de su género… insisto, en mi opinión.
Lo que pasa es que no fue el juego más exitoso del universo desde la perspectiva comercial, por lo que muchos teníamos dudas sobre si íbamos a disfrutar de una segunda parte. Afortunadamente, tanto Omega Force como Tecmo Koei se han animado a brindarnos Toukiden 2, título que en esta ocasión aparece tanto para PS4 como para PC y PS Vita. Y para todos aquellos que os lo estéis preguntando, sí, el título goza de la función Cross Save entre las ediciones de PS4 y la portátil.
En esta ocasión se ha elaborado una historia muy japonesa, de esas en las que se deja entrever que detrás de ella se encuentra un estudio nipón. La historia tiene además bastante interés y, sin ser la mejor jamás plasmada en un juego de esta guisa, se sigue con gusto. Todo tiene lugar un par de años después de lo ocurrido en Toukiden Kiwami, la reedición del original que apareció hace ya un tiempo tanto en PS Vita como también en PS4.
Nuevamente los Oni, es decir, los demonios de turno supondrán una seria amenaza para la raza humana y nos tocará librarnos de ellos. Ahí entrarán nuevamente en juego los denominados Slayers, los cazademonios que llevan siglos realizando tal función y que en esta ocasión dejan de estar “ocultos” a los ojos de la humanidad para destapar todo su potencial sin compromiso alguno. Nosotros asumimos el papel de uno de ellos, que por razones que de primeras no sabremos bien (es necesario profundizar en la trama para ir conociendo los detalles al respecto) da un salto dimensional para ir a parar a una época distinta. Un tipo que tiene que ir viajando a diferentes épocas (denominadas con diferentes nombres como Honor, Guerra, etc.) para ir dando caza a distintas amenazas.
Como siempre podemos crear a nuestro personaje como más nos guste, pudiendo escoger entre multitud de aspectos como su sexo, nombre, tono de voz, color de la piel, arma inicial y demás elementos. Un editor de personajes que me ha parecido bastante completo y muy similar al dispuesto en otras sagas similares.
Cazademonios de profesión
Nuestra primera parada es Mahoroba. ¿Maho… qué? Mahoroba es el nombre que recibe la aldea principal que alberga la aventura. Un lugar bastante amplio y custodiado por un templo realmente precioso en el que podemos realizar las tareas básicas de “mantenimiento” de nuestro personaje así como entrar en contacto con numerosos personajes, algunos de ellos bastante curiosos como esa especie de robot llamado Tokitsugu. Un lugar ideal para ir mejorando nuestro equipo conforme avanzamos, comprando los objetos que más nos interesen y, por supuesto, aceptando las misiones que más nos apetezca ir cumpliendo.
Una de las principales cualidades que en mi opinión presenta el título es precisamente la amplia gama de labores y tareas que es necesario ir realizando. Al más puro estilo Monster Hunter, debemos ir aceptando aquellas que más nos vayan interesando y prepararnos debidamente antes de aventurarnos en cada una de ellas ya que, si bien las primeras son bastante sencillas y actúan a modo de tutoriales, más tarde las cosas van complicándose paulatinamente. Eso sí, algunas de ellas pueden repetirse más de la cuenta, pero también es verdad que es algo que suele suceder en otros títulos de semejantes características.
Precisamente y como ya os he adelantado, para todos aquellos que no disfrutaran ni del Toukiden original ni de la posterior remasterización Kiwami, el sistema de juego resulta bastante similar (aunque no idéntico, ojo) al establecido en la citada franquicia de Capcom. De esta forma debemos ir cumpliendo multitud de tareas distintas de manera progresiva, limpiando las zonas de aquellos monstruos que merodeen por ellas.
Existe una cantidad tremenda de estos seres, los cuales debemos despachar para, posteriormente, purificar, una acción que nos permite ir obteniendo de vez en cuando las llamadas Mitamas: las almas de los soldados y guerreros que se encuentran encerradas en el interior de algunas bestias. Y el papel que desempeñan dichas Mitamas es bastante importante.
Gracias a un ritual es posible ir conectando dichas almas a nuestras armas, así como a nuestras armaduras y a la llamada God Hand de la cual os hablaré en un momento porque supone una de las mayores novedades del juego. ¿Y para qué sirve esto? Pues para desatar su potencial e imbuir a dicho arsenal de poderes y atributos especiales. Mayor potencia de ataque, capacidad defensiva o velocidad son algunas de las ventajas que podemos obtener, así como una todavía más llamativa: la capacidad de invocar a monstruos para que peleen a nuestro lado.
El mundo que acoge esta aventura es realmente amplio, pudiendo recorrer zonas y eras tan diferentes como atractivas
La cantidad de armas que es posible llegar a empuñar es considerable, desde lanzas a espadas largas, katanas, pistolas o mazas. En esta ocasión por cierto se han introducido dos tipos de armas nuevos e inéditos en pasadas entregas de la saga como son el látigo cadena (ideal para castigar a los enemigos con ataques muy rápidos y contundentes) y la espada corta y escudo, que ofrece un gran equilibrio entre ataque y defensa.
A este arsenal se añade un elemento nuevo que ya os he adelantado y que lleva por nombre God Hand. Gracias a este invento, que viene a ser una especie de brazo inmaterial, es posible tanto atraer a las bestias hasta nosotros como precipitarnos hasta ellas o incluso lanzarlas por los aires. Un elemento que añade todavía más posibilidades a unas batallas tremendamente interesantes ya de por sí, especialmente cuando nos toca librar las contiendas más importantes. Efectivamente, existen monstruos realmente poderosos que ponen a prueba nuestra capacidad, rivales a los que es necesario primeramente darles cera para que desvelan su estado o forma real, siendo también preciso descubrir sus puntos débiles para posteriormente atacarlos.
La citada God Hand no tiene utilidad únicamente durante las batallas. Otro de los pilares sobre los que se apoya la jugabilidad de esta aventura es la exploración. El mundo que acoge esta aventura es realmente amplio, pudiendo recorrer zonas y eras tan diferentes como atractivas, las cuales albergan objetos y materiales muy interesantes que podemos ir recopilando para crear armas y armaduras cada vez más poderosos, así como útiles diversos que siempre son bienvenidos. Y gracias a la God Hand podemos trepar por lugares poco accesibles con cierta holgura y desplazarnos con mayor libertad por los fondos.
También es muy aconsejable dialogar y entrar en contacto con todos aquellos personajes con quienes nos encontremos. Dichos diálogos están únicamente en inglés, siendo uno de los escasos inconvenientes que presenta esta producción, aunque también es verdad que a poco que os defendáis con dicho idioma no tendréis demasiados problemas para poder entender lo básico y avanzar en la aventura.
Por otra parte y como principal virtud, el título también nos permite disfrutar de la compañía de otros tres Slayers más. El modo cooperativo para cuatro jugadores tan característico de la serie regresa, convirtiéndose además en el principal reclamo de Toukiden 2. El desarrollo de dichas misiones cooperativas es bastante fluido y no he encontrado muchos problemas técnicos más allá de los típicos tirones ocasionales y lag puntuales, propiciando cacerías bastante más entretenidas que las normales. Además también es posible disfrutar de ciertos elementos de juego muy interesantes más allá de las batallas, como por ejemplo poder intercambiar objetos con jugadores de todo el mundo. Una función cooperativa muy sólida que, además, en PS Vita también es posible disfrutar en modo ad hoc.
Una jugabilidad que, en conjunto, resulta muy sólida y apetecible. Además es uno de esos títulos que si se quieren exprimir del todo puedan dar lugar a muchas horas de diversión.
También merece ser resaltada la gran ambientación que posee el título. Sin gozar de un motor gráfico especialmente potente (el hecho de ser un juego multiplataforma tiene sus desventajas en este sentido), lo cierto es que el trabajo realizado en el diseño tanto de los escenarios principales que alberga la aventura (como la propia Mahoroba) como, sobre todo, de los monstruos más feroces me ha parecido realmente notable. Tampoco desentonan las animaciones de los personajes, aunque un poco más de cuidado en las animaciones faciales (casi inexistentes) le hubiera venido bien.
El sonido se sitúa incluso por encima del apartado anterior. Y lo consigue gracias a una banda sonora muy convincente que nos regala composiciones trabajadas y bien interpretadas y un doblaje en japonés (ya sabéis, con subtítulos sólo en inglés) muy bueno. Un apartado que consigue ambientar adecuadamente cada partida… y el mundo en el que tiene lugar la aventura en general.
Esta continuación de Toukiden se convierte en una alternativa perfecta para todos aquellos que busquen un Monster Hunter tanto para PC como para las consolas de Sony. Y es que a pesar de que Toukiden 2 no llega a igualar la grandeza de la producción de Capcom, lo cierto es que resulta tremendamente amena y atractiva, ofreciéndonos cientos de demonios que exterminar, decenas de misiones que materializar, múltiples opciones de mejora de equipamiento y personajes bastante curiosos con los que dialogar. Una aventura recomendable por completo.
Comprar Toukiden 2- Muchas misiones que cumplir. Duración más que generosa
- Amplia gama de demonios de perseguir y cazar
- Posee función de Cross Save entre PS4 y Vita
- El sistema de mejora de armas resulta muy interesante
- Algunas misiones se repiten más de la cuenta
- Motor gráfico que cumple pero sin aspavientos
- Animaciones faciales casi inexistentes
