Tras años de silencio vuelve una de las series de estrategia en tiempo real más recordadas por los aficionados; tras años de tregua, volvemos a los campos de batalla de la Segunda Guerra Mundial para derrotar a los enemigos con pura táctica militar. En el análisis de Sudden Strike 4 para PC y PS4 os contamos todo lo que ofrece esta obra de Kalypso Media.
Caen las bombas, los cadáveres se amontonan a tu alrededor, y cada vez son menos los hombres a los que puedes recurrir para tomar, sea como sea, la colina fortificada que está en manos de los enemigos. ¡Hace falta cabeza!, tácticas militares, y en eso Sudden Strike 4 demuestra ser un gran videojuego de estrategia en tiempo real. No vale el todos contra todos ni cargar directamente contra el ejército contrario. Cada unidad cuenta, cada soldado, vehículo y bala es un bien preciado al que debes sacar el máximo provecho si quieres alcanzar la victoria. Esto es la guerra, una muy desafiante, en la que una y otra vez movilizarás a tus tropas buscando siempre el modo de sorprender a rivales implacables. Es lo que más me gusta de este título que tras años de ausencia trae de vuelta una de las grandes series de estrategia bélica, ¡sin muchas novedades!, sí, pero haciendo lo que mejor sabe: divertir.
Al menos la mayor parte del tiempo pues ciertos problemas con la inteligencia artificial, especialmente la de los aliados, enturbia la experiencia de juego. Tus tropas son, con demasiada regularidad, peleles que no saben muy bien cómo actuar en un juego donde los errores salen caros. No hay gestión de recursos, ni opción de construir bases y adiestrar nuevas tropas, así que una batalla perdida puede suponer el final de la guerra. Tus unidades son las que son, y con ellas y los escasos refuerzos que puedan venir en contadas ocasiones, debes lidiar con la toma de un pueblo, la defensa de un puente, la conquista de búnkeres o la completa aniquilación de los enemigos. Por eso el que los carros blindados queden bloqueados en mitad de un puente, o que los sanitarios no sean capaces de ayudar a sus compañeros cuando piden a gritos un médico, genera cierta sensación de frustración que termina alejando a este título de los más grandes.
Doctrinas en tiempos de guerra
Aprecio mucho el buen diseño de las cerca de 20 misiones que conforman las tres campañas militares protagonizadas por aliados, soviéticos y alemanes, tanto por la épica que se alcanza en momentos puntuales de la partida como, especialmente, por su forma de hacerte valorar la vida de las tropas... y sus recursos. Lo decía antes. Sudden Strike 4 no es un juego de segundas oportunidades; perder un batallón de soldados por culpa de una mala planificación puede suponer el fin, pero también dejar sin combustible a los tanques o desaprovechar tontamente su munición. Por eso debes actuar con cautela; medir cada paso que das para evitar las emboscadas o las muchas trampas que los enemigos dejarán dispersas por el campo de batalla. Y aunque suene a obviedad, es vital que las tropas cuenten con una visión clara del escenario de guerra.
Te atacarán desde todas las posiciones, con bombas que caen del cielo o fuego de ametralladora que surgirá de entre las zonas boscosas, y el único modo de lidiar con ello es detectar a los enemigos para golpear primero. ¿Por qué os cuento esto? Básicamente por los tanques, que tienen una línea de visión limitada, requiriendo del apoyo de la infantería para controlar una mayor extensión de terreno. Si van solos serán blanco fácil aun cuando uno de sus pilotos usa la escotilla para otear el horizonte, pues un disparo certero puede acabar con este oficial mermando la capacidad de respuesta del blindado. Me encanta. Adoro el realismo con el que se han reflejado las destrezas de las distintas unidades de combate bajo nuestro mando, ¡que son cerca de cien!, aunque echo en falta más información técnica sobre todas ellas, pues no dejan claro cuáles son sus ventajas, sus puntos débiles, capacidad de acción, etc.
Es un juego de muchos contrastes
Parece un detalle menor pero en un videojuego que prima tanto el buen aprovechamiento de las tropas, puede convertirse en un problema cuando apuestas por el nivel de dificultad más elevado. Al final todo es práctica, combatiendo aprendes, pero los compases iniciales pueden tornarse cuesta arriba para los menos experimentados en la estrategia bélica. Tampoco me gusta que los soldados no puedan usar a los tanques como punto de cobertura. La infantería se puede ocultar entre la maleza, o adentrarse en trincheras, edificios y búnkeres para atacar a los enemigos con mayor seguridad, pero no así avanzar pegados a un blindado, usándolos como escudo. Me sorprende, para mal, teniendo en cuenta que sí pueden subirse arriba de los tanques para viajar a mayor velocidad por el campo de batalla.
Uno de los aspectos que más me gusta de Sudden Strike 4 es que permite configurar con cierta libertad las destrezas de tu ejército. En las misiones no puedes escoger con qué tropas saltas al campo de batalla, pero sí elegir entre tres comandantes históricos por cada ejército para ganar ciertas ventajas tácticas como una mayor cantidad de explosivos por parte de los soldados de infantería, blindados con sacos de arena para protegerse mejor del fuego enemigo, mayor potencia de ataque para la aviación, etc. Durante el transcurso de las batallas, cumpliendo ciertas tareas como emboscar a los enemigos, atacar por la retaguardia o sanar sin descanso a los heridos, obtendremos medallas de valor que al final de la misión, podrán canjearse por mejoras enmarcadas en el novedoso sistema de doctrinas que introduce este episodio de la saga. Me gusta, porque te da cierta libertad para personalizar tu batallón, pero no queda bien explicado qué acciones debes acometer, y en qué grado, para obtener estos preciados puntos.
Sudden Strike 4 es un juego de muchos contrastes. Hace las cosas bien, te mete de lleno en su acción y te hace disfrutar con emoción de sus combates estratégicos, pero a su vez presenta algunos fallos con los que cuesta convivir. Me alucina la recreación de algunas batallas históricas, como Stalingrado, porque de verdad te sientes en mitad de ese infierno de balas y explosiones. Además el videojuego saca buen partido a la tecnología actual, permitiéndote crear escenas memorables como una emboscada en mitad de la calle, con los extremos cortados por tanques que has derribado para que nadie pueda escapar con vida del lugar. El uso de minas, la importancia de los vehículos de apoyo, la opción de construir puentes flotantes, la demolición de edificios... es fácil quedar encantado con la intensa acción de este título de Kalypso Media, al que sin embargo le falta algo más de profundidad jugable, y una mejor inteligencia artificial, para alcanzar el nivel de otros videojuegos del estilo.
Ciertos problemas de IA enturbian la experiencia de juego
Los mapas, si bien están recreados con mucho gusto, son en ocasiones demasiado pequeños, restando importancia a la exploración. El sistema de daños, igualmente, no ha evolucionado mucho con respecto a lo que ya conocíamos: se pueden dañar las cadenas de los tanques, o detonarlos con un disparo certero en su depósito, pero sabe a poco. Y lo peor es el multijugador. Hay pocos escenarios en los que combatir, demasiados pocos, con un sistema de juego algo distinto al de la campaña, pues en estas batallas 4 vs 4 se apremia a conquistar puertos y zonas estratégicas para recibir suministros con los que avasallar a los ejércitos contrarios. La idea es buena pero la ejecución no tanto, lo que termina por restarle encanto al videojuego.
En este punto es importante hablar también de la versión de PS4, pues creo que se ha realizado un buen trabajo a la hora de adaptar la acción de Sudden Strike 4 al DualShock. El control de las unidades, el fácil acceso a sus habilidades especiales (granadas, minas, etc.), la gestión de grupos... con un poco de práctica, pronto guiarás los pasos de tu ejército sin demasiados problemas, lo que tiene mérito. Este es un título que además permite pausar la acción en cualquier momento, dándote así más tiempo para organizar las tropas antes de iniciar el asalto a las posiciones enemigas. En lo técnico, el videojuego de Kite Games también cumple con lo esperado en ambas plataformas: el diseño de escenarios y tropas está muy bien, más en PC claro, con una excelente puesta en escena que se ve favorecida por la espectacularidad con la que los vehículos estallan en pedazos dejando tras de sí columnas de fuego y humo. Es impresionante ver cómo los restos se esparcen por el campo de batalla, o cómo los cadáveres vuelan al caer las bombas a su alrededor. No es un título que en imágenes luzca especialmente atractivo, pero cuando se desata la acción la cosa cambia mucho. A destacar que el videojuego ha sido traducido y doblado al español.
Sudden Strike 4 es un buen juego de estrategia en tiempo real que sabe cómo emocionar con algunas de sus espectaculares batallas históricas. La intensidad de los combates y la necesidad de aprovechar al máximo los recursos a nuestro alcance lo convierten en una compra interesante para cualquier aficionado al género en PC o PS4, donde el videojuego se adapta bien con un buen sistema de control. Lástima que su irregular inteligencia artificial y multijugador falto de contenidos le hagan perder cierto encanto.
Comprar Sudden Strike 4- Tres campañas que recrean grandes batallas históricas
- Acción intensa, batallas emocionantes, que requieren de mucha estrategia
- El sistema de doctrinas y la necesidad de aprovechar las habilidades de las tropas
- Multijugador escaso de contenidos
- Pobre inteligencia artificial. Puede resultar frustrante
- Las diferencias entre unidades a veces no están muy claras
