Análisis de Burnout Paradise Remastered. El clásico de conducción arcade que apostó por los mundos abiertos

Análisis de Burnout Paradise Remastered. El clásico de conducción arcade que apostó por los mundos abiertos
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Un clásico de la velocidad arcade que se adapta con éxito a Nintendo Switch. Las furiosas carreras de Burnout Paradise Remastered nos demuestran más de 10 años después la trascendencia de este clásico de Criterion Games que redefinió la forma de entender los juegos de conducción arcade. Y ahora, lo tienes en formato portátil.

Poder jugar a un clásico de la velocidad arcade como Burnout Paradise en una consola portátil es una auténtica delicia. Quién nos lo iba a decir hace unos años, ¿verdad? Y sin embargo aquí lo tenemos, perfectamente adaptado a Nintendo Switch, dispuesto a hacer feliz a los apasionados a los juegos de carreras con sus persecuciones a velocidades de vértigo, sus aparatosos takedown, y toda una ciudad para explorar libremente al ritmo de una gran banda sonora. Hay mucha nostalgia de por medio, que no por nada hablamos de una de las entregas mejor valoradas de la saga Burnout, pero al margen de los recuerdos y nuestras vivencias personales con el original, este regreso a Paradise City me ha hecho apreciar más si cabe el clásico de Criterion Games. Es tan divertido, frenético y, aún hoy en día, por momentos espectacular, que cuesta resistirse a esa locura sobre ruedas a la que nos invita a participar. Más todavía, como digo, gracias a un modo portátil que no prescinde de una de las características más valiosas de este arcade: los 60fps.

Es un gustazo correr libremente por las calles de Paradise City con tal fluidez sin que ello suponga sacrificar su gran puesta en escena, aunque a veces la resolución dinámica puede dejarnos -por unos instantes- con algunas imágenes faltas de detalle. Poca cosa para un clásico de la velocidad arcade que mantiene el tipo tras más de una década gracias a esa puesta al día de la que ya te hablamos en nuestro análisis de Burnout Paradise Remastered en PC, Xbox One y PS4. ¿Lo jugaste en su momento? Volver a él te hará valorar más si cabe no ya solo sus furiosas carreras y aparatosos accidentes, sino especialmente, lo valiente de una propuesta de juego que sentó las bases de la conducción arcade en un mundo abierto. Fue un adelantado a su tiempo, el pionero; de ahí que si esta es tu primera vez con Burnout Paradise también sabrás apreciar sus muchas virtudes. Cierto es que hay detalles a los que el paso del tiempo les ha pasado mayor factura; elementos de juego que han evolucionado y se han refinado hasta el extremo en videjuegos más recientes, pero la grandeza de este título de Criterion Games es que a pesar de todo, sigue dando guerra; continúa siendo una obra que divierte y atrapa como pocos juegos consiguen.

Furia en la carretera… en modo portátil

La apuesta de Burnout Paradise por un mundo abierto no se limita exclusivamente a darte libertad para que vayas de aquí para allá en busca de carreras y otros desafíos. Todo, repito, todo en este videojuego de Criterion Games se ha diseñado para que el jugador decida qué camino sigue; cómo afronta los retos que le plantea. Lo diré de otra forma. En las carreras lo único fijo es el punto de salida y la línea de meta, el resto es cosa tuya, por lo que puedes seguir la ruta que prefieras; tomar los atajos que te dé la gana e incluso sobreponerte a cualquier error pilotando como un loco a través de calles, parques o incluso el interior de algunos edificios. Todo vale con tal de ser el primero en unas carreras que siguen resultando tan divertidas como antaño, en parte gracias a esos ya míticos takedown, el sacar de la pista a un contrario, que te recompensan con nitro extra.

El clásico de conducción arcade que apostó por los mundos abiertos


Hay más de 100 coches a desbloquear, incluidas motos y vehículos legendarios. Ganar carreras te hará ascender y con ello, podrás acceder a cada vez más vehículos.
Hay más de 100 coches a desbloquear, incluidas motos y vehículos legendarios. Ganar carreras te hará ascender y con ello, podrás acceder a cada vez más vehículos.

Esto es Burnout así que lo suyo es hacer el loco; pilotar de forma temeraria para conseguir bonificadores de puntos y ese preciado nitro que te dará el impulso necesario para sobrepasar a los rivales. Conducir en dirección contraria, esquivando el tráfico, o bien usando rampas para volar y derribar carteles publicitarios debe convertirse para ti en una rutina imprescindible para superar los retos más difíciles. Y es por eso que Burnout Paradise, tantos años después, continúa siendo tan divertido. Es una experiencia salvaje que aún es capaz de brindarte momentos francamente espectaculares. Obviamente ha sido superado por juegos más recientes, que en el notable MotorStorm Apocalypse corrías a toda velocidad mientras un tornado se llevaba todo por delante, pero te garantizo que vas a disfrutar y te va a sorprender de forma admirable.

Las sensaciones al volante también son muy buenas, con una conducción de alta intensidad que se ha adaptado muy bien a Nintendo Switch, aún a pesar de la ausencia de gatillos analógicos. Con una gigantesca ciudad por la que moverse libremente, otro de los aspectos de juego que peor han llevado el paso de los años tiene que ver con la ausencia de un viaje rápido que habría ayudado a eliminar tiempos muertos durante la partida. Pilotar es genial, sí, pero cuando tienes que recorrer media ciudad para cambiar de coche… bueno, ya no es tan divertido. Todo ello pese a que hay varios garajes repartidos por Paradise City, pero como digo, al final se puede volver un tanto tedioso. Hay más. Esta versión de Nintendo Switch también queda algo deslucida en las carreras nocturnas, con una por momentos alarmante falta de visibilidad que resta atractivo a unos desafíos que debían ser justo lo contrario, un gran espectáculo. Puedes cambiar la configuración de las carreras para competir de día o en atardeceres, pero claro, no tendría que ser así.

Algunas carreras consisten en sobrevivir a los ataques de los rivales, que tratarán por todos los medios de destrozar tu vehículo.
Algunas carreras consisten en sobrevivir a los ataques de los rivales, que tratarán por todos los medios de destrozar tu vehículo.

Por todo lo demás Burnout Paradise Remastered es un juego de carreras que ha aguantado bien el peso de la historia. Su legado aún se deja notar en muchos otros videojuegos de velocidad que han sabido evolucionar y refinar su fórmula de juego, superando al maestro; razón por la que en algunos aspectos el clásico de Criterion Games se siente algo anticuado. Sigue siendo un videojuego recomendable, porque no todos los días puedes disfrutar de un clásico como este en la palma de tus manos, pero aquí entran en juego algunos otros aspectos que pueden determinar en mayor o menor grado tu apuesta por él. El principal es el precio; se vende como novedad cuando es una remasterización que puedes comprar a un precio muy inferior en el resto de plataformas. Y luego está el modo portátil, que si bien se siente satisfactorio, adolece de cierta falta de nitidez en la imagen que puede llegar a cansar la vista tras largas sesiones de juego.

El clásico de conducción arcade que apostó por los mundos abiertos

Continúa siendo una obra que divierte y atrapa como pocos juegos consiguen

En modo portátil la acción se muestra a una resolución de 720p y 60fps, conservando un buen nivel de detalle en vehículos y circuitos; pero las carreras son tan frenéticas que a veces puede ser algo difícil seguir la acción si hay cambios bruscos en la imagen. Por otro lado, y esto es algo que depende enteramente de vosotros, la remasterización viene acompañada de un buen puñado de coches y motos adicionales correspondientes a los DLC que recibió la entrega original, con varios coches legendarios que son extremadamente rápidos. ¿El problema? Si recurres a ellos desde el principio, te resultará muy fácil superar con éxito todos los desafíos que se pongan por delante, así que tendrás que hacer un esfuerzo por mantenerte lo más fiel posible a las reglas del juego original.

Bueno

Sin sello
El clásico de conducción arcade que apostó por los mundos abiertos

Burnout Paradise: Remastered

Por: El equipo de 3DJuegos
Sin sello

Nadie podrá arrebatarle el mérito a Burnout Paradise de ser un pionero con su apuesta por las carreras arcade en un mundo abierto. El clásico de Criterion Games sentó las bases de una forma de entender la velocidad extrema que aún hoy en día perdura, y aunque la experiencia de juego se ha quedado algo anticuada, sus furiosas carreras y los aparatosos takedown siguen siendo una excusa inmejorable para disfrutar del videojuego más todavía en formato portátil.

Comprar Burnout Paradise: Remastered
  • Su conducción arcade. Las sensaciones al volante siguen siendo fantásticas
  • La libertad de acción; carreras que puedes resolver siguiendo tus propias rutas
  • Gran banda sonora con un variado repertorio de canciones que te animan a competir
  • 60fps en dock y modo portátil. La fluidez es extrema.
  • Más de 10 años después, se ha quedado anticuado en algunas opciones y desafíos
  • Las carreras nocturnas adolecen de falta de visibilidad
Jugadores: 1-8
Idioma: Textos en español y voces en español
Duración: 25-35 horas (Campaña + DLC)
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