Análisis de Animal Crossing New Leaf. Alcalde de animales

Análisis de Animal Crossing New Leaf. Alcalde de animales
Facebook Twitter Flipboard E-mail

Con una nueva filosofía de juego pero el mismo encanto de siempre, Animal Crossing da el salto a Nintendo 3DS con un videojuego de los que marcan época. Un título asombrosamente divertido que se ha convertido por méritos propios en uno de los grandes lanzamientos del año y, por descontado, un auténtico imprescindible en el catálogo de la portátil. Más grande, variado y entretenido que nunca, ¿te lo vas a perder?

Desde su nacimiento hace más de una década ha sido una de las sagas más populares y queridas por los aficionados de Nintendo, que han encontrado en Animal Crossing la excusa perfecta para desconectar del mundo real, para disfrutar de una vida virtual paralela en un entrañable y colorista mundo de ensueño poblado por simpáticos animales a los que es imposible no coger cariño. ¿Por qué entonces nos ha sorprendido tanto la última entrega de esta serie? Para no andarnos con rodeos, porque es simplemente genial.

Una descomunal muestra de talento creativo por parte del equipo encargado de su desarrollo, que aun manteniendo intacta la esencia jugable de la serie Animal Crossing, ha logrado sorprendernos con un juego más divertido, variado y complejo si cabe, en el que ahora más que nunca tendremos total libertad para diseñar ese mundo virtual en el que perdernos durante horas y horas sin otra preocupación más allá de pasarlo bien. De disfrutar como un niño. Y el resultado, insistimos, es impresionante; hasta el punto de estar indudablemente ante uno de los mejores programas de Nintendo 3DS y, por descontado, un firme candidato a juego del año.

Bienvenido a su nuevo hogar, alcalde
Pasar de ser un simple ciudadano a convertirse en el alcalde de todo un pueblo ya supone de por sí un cambio más que notable con respecto a la visto con anterioridad en la serie Animal Crossing, siendo esta lógicamente una de las novedades más llamativas del fantástico New Leaf. ¡Pero no la única! Y es que lo nuevo de la Gran N ha sabido crecer y potenciar sus virtudes de manera exponencial sin perder por ello ese espíritu entrañable y simpaticón, casi de juego para niños, que siempre le ha caracterizado. Lo que nos deja con un producto mucho más variado y completo, pero no por ello más complicado. Al contrario. Es todavía más divertido, fácil de jugar y adictivo de lo que podríais imaginar. Y la razón es bien sencilla.

Si antes disfrutábamos como niños decorando el interior de nuestro hogar mientras nos peleábamos con el avaro Tom Nook por pagar sus disparatadas facturas, New Leaf va un pasito más allá, proponiéndonos esto mismo pero desde una perspectiva totalmente distinta: la de un alcalde que debe velar por el buen funcionamiento de la aldea, y no únicamente por su bienestar propio –no como otros, ejem-. Algo que lograremos básicamente de tres maneras distintas.

Por un lado, están las ordenanzas municipales, que son las que nos darán poder para modificar ciertos hábitos de conducta en nuestro pueblo. ¿Somos de los que disfrutamos de la partida por las noches? Hagamos que las tiendas cierren mucho más tarde para no perdernos ni un solo detalle del juego. ¿Qué nos va más eso de madrugar? Pues ordenemos a nuestros habitantes que se levanten un poquito más temprano. Las opciones en este punto no son muy elevadas, aunque sí lo suficientemente variadas entre sí como para transmitir de verdad cierta sensación de poder sobre los habitantes de la aldea. Algo que, sin embargo, se intensificará mucho más con las obras públicas.

Desde el despacho de la alcaldía, nuestra secretaria Canela nos dará acceso a las opciones relacionadas con este oficio. También será nuestra asesora.
Desde el despacho de la alcaldía, nuestra secretaria Canela nos dará acceso a las opciones relacionadas con este oficio. También será nuestra asesora.

Construcciones que podremos distribuir por el pueblo como nos venga en gana, ciñéndonos exclusivamente a aspectos puramente estéticos. Una farola por aquí, un banco por allá, una bonita fuente al lado de esta casa, un puente adicional para agilizar el paso de una orilla del río a otra… las opciones son verdaderamente elevadas, con una importante variedad de estructuras con las que vamos a poder crear el pueblo de nuestros sueños con gran libertad, logrando además que este sea un lugar completamente distinto al de nuestros amigos. ¡Y esto es genial! Porque no hay nada mejor que perderse en las locas aldeas creadas por otros usuarios con gran talento creativo, que con su ingenio dan una buena muestra del enorme potencial que se esconde tras esta faceta de Animal Crossing: New Leaf. Eso, y claro está, fardar uno mismo de su propio pueblo. ¡Que para eso le hemos dado vida con tanto esfuerzo!

Y no exageramos al hablar de esfuerzo, puesto que el tercer factor clave en el oficio de alcalde se encuentra, precisamente, en el dinero. En las ingentes cantidades de bayas que debemos destinar para sufragar la construcción de todas estas estructuras; a las que debemos sumar, lógicamente, los gastos derivados de nuestro propio hogar, que de nuevo habrá que decorar con el mismo gusto y estilo con el que llevamos haciéndolo durante más de una década. En este sentido, conviene destacar que todos los habitantes del pueblo pueden contribuir con sus bayas para pagar estas obras públicas, pero ya sea por falta de medios o una inefable pillería, sus aportaciones serán tan nimias que todo el peso de los gastos recaerá sobre nosotros, o cualquiera de los tres jugadores más que pueden convivir en una misma aldea (aunque solo el primero será alcalde).

La mayoría de obras públicas pueden ser destruidas para erigir nuevas construcciones en su lugar.
La mayoría de obras públicas pueden ser destruidas para erigir nuevas construcciones en su lugar.

Buscando bayas… hasta debajo de las piedras
Entre la hipoteca de la casa, las obras públicas y la compra de muebles está claro que en New Leaf vamos a necesitar una auténtica barbaridad de bayas para costear todos estos gastos. Pero tranquilos. Todo es posible… y no necesariamente metiendo la mano en la caja... Como ya es habitual en la serie, con sencillas acciones tales como recoger fruta, pescar, cazar bichos o buscar fósiles, vamos a tener una constante fuente de ingresos que contribuirá muchísimo a satisfacer la mayoría de nuestros deseos. Pero también podemos sacarnos un dinerillo extra ayudando a los simpáticos habitantes de nuestro pueblo, que por un trabajo bien hecho nos recompensarán con algún que otro objeto de valor que podemos vender en las tiendas, o poner en subasta para que cualquiera –vecino o amigo- lo compre al precio que establezcamos.

Obviamente, el juego de Nintendo tampoco se olvida de su faceta puramente coleccionista, invitándonos a llenar el Museo del pueblo con una enorme variedad de peces, insectos, fósiles y obras de arte que no van a tener durante al menos un año explorando a fondo cada palmo de terreno de la aldea. ¿Aburrido? ¡Para nada! Y es que aunque parecía imposible, este nuevo Animal Crossing resulta todavía más divertido y adictivo que sus antecesores, hasta tal punto, que en todo momento sentiremos la necesidad de echar una partidita para buscar un par de fósiles, ojear el Súper Mercado por si hay algún mueble de interés, o para enviar aunque sea alguna carta a los vecinos simplemente por alegrarles el día.

Detalle que puede sonar a tontería, pero que ya os garantizamos despertará en vosotros tal grado de satisfacción, que a veces resultará imposible no sonreír ante el encanto que desprenden todos y cada uno de los habitantes del juego, que ahora reaccionan a nuestras acciones de forma mucho más realista que nunca. Piropearnos, dar saltos de alegría, marcharse tarareando una bonita canción mientras una sonrisa cubre su rostro… ¿se puede ser más adorable?

Trabajo y vacaciones con los amigos
Con los bolsillos repletos de bayas, Animal Crossing: New Leaf también pone a nuestra disposición una amplísima variedad de objetos decorativos, herramientas de trabajo y ropa con los que satisfacer nuestros deseos más materialistas. Y para ello, se ha creado una zona comercial fuera de los dominios de la aldea, en la que vamos a encontrar tiendas de zapatos, flores, ropa, muebles e incluso una discoteca en la que echarse unos bailes con los amigos. Las opciones son elevadísimas, y nunca nos cansaremos de pasear por esta vistosa calle, en la que cada día habrá ofertas de todo tipo que no deberíamos dejar escapar.

Pero es que además, lo nuevo de Nintendo también trae consigo las mayores opciones de personalización vistas hasta el momento en la franquicia, permitiéndonos no solo escoger el tipo de puerta, buzón, tejado o fachada exterior de nuestro hogar; sino también crear nuestra propia línea de moda para la ropa, o diseñar patrones visuales que posteriormente usaremos en muebles y otros elementos decorativos. ¿Os parece poco?

También se ha incrementado ostensiblemente el número de habitantes con los que nos cruzaremos durante la partida, con el regreso de personajes clave como Ladino, Gulliver o Alcalifa por citar tan solo algunos de ellos, que volverán a ayudarnos –a su manera- para que nuestra estancia en el universo Animal Crossing sea lo más divertida posible. ¿Qué queréis más? Pues ahí tenéis también la exótica isla tropical, regentada por el recién jubilado alcalde Tortimer, en la que nos toparemos con un montón de peces, frutas, bichos y objetos exclusivos bajo el cálido sol veraniego que la bañará durante todo el año. Pero es que además, este es también el escenario de juego que da cobijo a una importante variedad de disparatadas pruebas de habilidad –pesca, caza de bichos, jugar al escondite…-, que podremos disfrutar en solitario o junto a tres amigos más gracias a la vertiente multijugador del programa.

Nadar y bucear es otra de las novedades del juego. Ahora será posible encontrar nuevas clases de peces en las profundidades marinas.
Nadar y bucear es otra de las novedades del juego. Ahora será posible encontrar nuevas clases de peces en las profundidades marinas.

¿La recompensa? Medallas especiales que podremos usar como moneda de cambio para adquirir los exóticos objetos que se venden en este paraíso terrenal. Eso y, por supuesto, la satisfacción que da el hecho de disfrutar de Animal Crossing junto a tres amigos más. Porque, no lo olvidemos, este es ante todo un videojuego social, un título que invita a compartir experiencias junto a otros usuarios, aunque tan solo sea para pasear juntos por el pueblo. Pero está claro que hay más cosas que hacer, como intercambiar regalos, tomar ideas para mejorar la decoración de una casa, o recolectar aquellas frutas no autóctonas para que más adelante también puedan crecer en tu pueblo –basta con plantarlas y regarlas-.

En este sentido, Nintendo ha insertado ciertas mejoras que le han sentado muy bien a la experiencia online de Animal Crossing, que se muestra sólida en lo tecnológico, sin problemas de latencia en la conexión ni nada por el estilo. También se agradece muchísimo la presencia de taquillas en la estación de tren, en la que vamos a poder almacenar un montonazo de objetos en nuestros viajes, pudiendo recuperarlos posteriormente en nuestra aldea. Igualmente, conviene destacar que a diferencia de lo visto anteriormente en la serie, durante estas partidas multijugador los vecinos de cada pueblo seguirán paseándose por la aldea como si nada, en vez de esconderse en sus casas como vivimos con anterioridad.

New Leaf también se aprovecha de algunas de las características especiales de Nintendo 3DS, como el Streetpass, para permitir que las casas de todos aquellos jugadores con los que nos crucemos por la calle aparezcan en una gran plaza, que podremos visitar en todo momento para cotillear nuevos estilos de decoración y, llegado el caso, comprar incluso algunos de estos muebles a un precio superior al de mercado, eso sí.

Al marcar a otro jugador como “Mejor Amigo”, podremos enviarle cartas y regalos sin necesidad de estar los dos conectados en el mismo pueblo.
Al marcar a otro jugador como “Mejor Amigo”, podremos enviarle cartas y regalos sin necesidad de estar los dos conectados en el mismo pueblo.

Por último, la Casa de los Sueños es otra de las grandes novedades del juego y, también, una de sus funciones más interesantes. ¿De qué se trata? Pues como su propio nombre indica, es un lugar en el que podremos echarnos a dormir para viajar a los pueblos de jugadores de todo el mundo, que podremos explorar libremente sin que ninguna de nuestras acciones tenga repercusiones reales sobre este entorno. No en vano estamos dentro de un sueño, por lo que por mucho que talemos los árboles de una aldea o recojamos objetos en la misma, nada de esto habrá ocurrido cuando despertemos. Bueno, o casi. Porque nuestros vecinos sí nos hablarán de extraños visitantes que aparecen en sus sueños… cada vez que otro jugador visita nuestra aldea. ¿Para qué sirve entonces esta opción? Pues para explorar otras aldeas, para descubrir qué hacen jugadores a los que de otro modo difícilmente conocerías al no estar en tu círculo de amistades.

Como punto negativo a esta experiencia online, no nos gusta que no se pueda usar el chat por voz para comunicarse con otros usuarios, estando obligados a usar el teclado de la pantalla táctil para tal efecto.

La vida en 3D
Si en lo jugable Animal Crossing: New Leaf es un videojuego asombrosamente divertido, si hablamos de su faceta tecnológica no podemos más que quitarnos el sombrero ante el trabajo realizado por Nintendo. No solo por la inmensa variedad y cantidad de objetos y personajes con los que nos toparemos, que ya forma parte de las señas de identidad de Animal Crossing. Pero es que ahora, aparte de todo eso también estamos ante un título técnicamente potente, que destaca por el gran modelado y nivel de detalle de los personajes y escenarios de juego por los que nos moveremos. Y es que como destacábamos anteriormente, ahora los habitantes de la aldea reaccionarán de una forma mucho más realista y adorable a todas nuestras acciones, con gestos que se quedarán grabados en nuestro recuerdo.

El poder diseñar nuestra propia ropa, la opción de tapizar de nuevo algunos muebles, e incluso el regalazo que supone encontrar infinidad de objetos y disfraces “made in Nintendo”, son tan solo algunos de los mucho detalles que nos han encandilado. A los que debemos sumar, por supuesto, el ciclo del día a la noche que ha sido recreado de una forma impecable, con unos muy mejorados efectos de luces; los cambios climatológicos y de estación en tiempo real, e incluso esos momentos de gran belleza plástica que encontraremos en las noches de primavera plagadas de luciérnagas, las intensas nevadas en invierno, la caída de hojas sobre un suelo cobrizo en otoño, e incluso alguna que otra noche con lluvia de estrellas de fondo.

En el museo se mostrarán los peces, fósiles, bichos y obras de arte que hayamos donado; pero también tendremos nuestra propia sala de exposiciones que diseñaremos desde cero.
En el museo se mostrarán los peces, fósiles, bichos y obras de arte que hayamos donado; pero también tendremos nuestra propia sala de exposiciones que diseñaremos desde cero.

Y no menos espectacular resulta también la banda sonora del juego, que una vez más ha vuelto a hechizarnos con unas melodías que amenizan perfectamente la acción En este caso, con una importante variedad de piezas musicales –cada hora suena una distinta-, que se suman a melodías especiales que escucharemos en la discoteca, de camino a la isla tropical, etc. Y por si todo esto no fuera suficiente, también resulta encomiable el esfuerzo de localización que trae consigo este mastodóntico programa, que incluye miles y miles de frases distintas adaptadas perfectamente al castellano, con expresiones, dichos y refranes puramente españoles que le sientan de mil maravillas. ¿Queréis más? Nintendo también ha tenido en cuenta las festividades de cada país, logrando que en Nochevieja podamos comernos las uvas virtuales junto a los habitantes de Animal Crossing.

Y son todos estos detalles, sumados al adorable diseño artístico del juego, los que hacen que disfrutar de Animal Crossing: New Leaf sea una experiencia tan divertida y gratificante. A veces puede dar la sensación que repetimos una y otra vez las mismas acciones, y es cierto; pero a su vez, son tantas las cosas por hacer, y estas resultan tan divertidas, que nada importa. Lo único que desearemos será volver a encender la consola para echar una partidita, aunque tan solo sea de un par de minutos. Algo posible gracias al inteligente diseño de la acción que plantea Nintendo, que en todo momento nos tentará con nuevas construcciones, objetos y minijuegos que nos harán jugar un ratillo más.

Magnífico

Recomendado
Alcalde de animales

Animal Crossing: New Leaf

Por: El equipo de 3DJuegos
Recomendado

Tan similar y a la vez tan distinto a lo que estábamos acostumbrados, Animal Crossing: New Leaf supone el ejemplo perfecto de lo que debería ser una buena secuela. Es más grande, variado y completo que sus antecesores; nos permite personalizar nuestra casa y sus alrededores como nunca antes lo habíamos hecho, y para colmo tiene un potente modo multijugador. Adictivo como pocos e increíblemente divertido, aquí hay juego para años.

Comprar Animal Crossing: New Leaf
Jugadores: 1-4
Idioma: Manual en español y textos en español
Duración:
Comentarios cerrados
VÍDEO ESPECIAL

12.876 visualizaciones

100 DETALLES OCULTOS de RED DEAD REDEMPTION 2

¿Qué detalles ocultos guarda Red Dead Redemption 2? En el video de hoy os presentamos más de 100 curiosidades distintas acerca de la aventura de Arthur Morgan y de John Marston que nos presentó Rockstar Games en 2018.