Dioses, psicópatas, asesinos, monstruos, o simplemente, mala gente. Hemos hecho frente a todo tipo de enemigos. Rivales que nos han puesto entre la espada y la pared, que nos han llevado al límite. Que han forzado la situación hasta el extremo de llegar a situaciones de vida o muerte. Y cuando han sido ellos quien han mordido el polvo, han logrado que demos saltos de alegría.
En el mundo de los videojuegos existen villanos tan carismáticos que, una vez que hemos acabado con ellos, no hemos podido evitar alegrarnos. Y hay enemigos tan difíciles de derrotar que cuando hemos conseguido derrotarlos, tras incontables partidas y mucho esfuerzo, nos hemos sentido como si hubiéramos coronado la cumbre del Everest.
Un buen guión, una buena interpretación, un buen diseño de nivel o una mecánica ingeniosa puede hacer de un enemigo del juego el auténtico protagonista. Hablamos de los Makarov, los Daud, Paga Min y Handsome Jack que han añadido un nivel extra de implicación emocional con nuestras aventuras. Y en algunas ocasiones esa implicación ha sido tan grande que tras sufrir todo tipo de desgracias, ataques, traiciones y jugarretas hemos contemplado la muerte de nuestras némesis con los brazos en alto entre exclamaciones de júbilo.
Repasamos las muertes de personajes de videojuego que más satisfacción nos han producido. ¿Están tus preferidas? ¿Hay alguna que te alegrara especialmente?
Assassin's Creed 2
Cuando la propuesta principal del juego es la de convertirse en asesino, para ayudar a pasar el mal trago moral, se hace necesario un objetivo realmente aborrecible. Alguien a quien todo el mundo quiera dar su merecido. Y Uberto Alberti era el hombre indicado para esa misión: el responsable de la muerte de los Auditore no merecía otra cosa.
Bayonetta
Father Rodin no solo es un “jefe” secreto del juego de Platinum Games, también es duro de pelar. O de desplumar, mejor dicho.No solo es resistente, también hace gala del ataque más letal del juego, uno de esos que cuando consigue conectar con tu personaje, le deja con un mínimo de vida. ¡Cómo disfrutamos viéndole caer!
Bioshock
El megalómano, genial y demente Andrew Ryan no sólo lanzará contra ti a toda la población de una misteriosa ciudad sumergida. También te estará comiendo la oreja con todo tipo de historietas durante la trama del juego. Silenciar su voz es una recompensa adicional a terminar este estupendo juego.
Call of Duty Modern Warfare 2
Si hacemos memoria, uno de los personajes que peor nos lo ha hecho pasar en los videojuegos es el Teniente General Shepherd. Cuando Soap acierta al blanco con su cuchillo al final del juego de Activision resulta difícil no alegrarse. ¡Las muertes de Ghost y a Roac no podían quedar impunes!
Dark Souls
Si abrirse paso por el escenario pesadillesco de Dark Souls ya es difícil, enfrentarse a sus “jefes” es ya un acto de valentía que requiere paciencia y valor. Pero dos “peor” que uno. Terminar con Ornstein y Smough es difícil, pero después acabar con ellos, grandes serán los ecos de nuestra hazaña.
Destiny
Tras nuestras cinco primeras horas en esta incursión en Destiny, nuestro guardián se merece la satisfacción de ver caer a Atheon, y las jugosas recompensas correspondientes. Según mejore nuestro nivel en el juego este tipo de victorias resultarán más sencillas, pero nunca olvidaremos aquellas primera victoria “casi a pelo”.
Final Fantasy X
No sabemos qué nos daba más rabia, si su personalidad o su terrible atuendo. En cualquier caso, acabar con Seymour nos alegró la partida en este viaje junto a Tidus y Yuna. Pero verle caer luego otras tres veces, en cada ocasión con un rediseño más estrafalario, ya resulta un combo de satisfacción.
God of War III
Kratos no es un personaje contenido que se diga. Pero en su batalla definitiva contra Zeus, El Fantasma de Esparta no se guarda nada. Y nosotros que nos alegramos. Porque después de pasar tanto tiempo de aquí para allás, como una marioneta calva de los dioses olímpicos, nada reconforta más que un buen deicidio.
Grand Theft Auto: San Andreas
De entre todas las locuras, actividades, retos y misiones secundarias del juego, pocos momentos de San Andreas producen tanta felicidad como la muerte del corrupto Agente Frank Tenpenny. Y además, con el plus de no tener que cargar con el peso moral de su asesinato. Y es que llegados a ese momento del juego, le teníamos ganas, ¿verdad?
Red Dead Redemption
Seguramente, ésta es la muerte más celebrada de la lista por jugadores. Después de hacer que te encariñes con el carismático John Marston durante todo el juego, Rockstar acaba con él de manera traicionera y sibilina. Que el hijo de Marston vengue su muerte tiroteando al responsable, Edgar Ross, es casi poética. Violentamente poética.
Sleeping Dogs
Terminar con Big Smile Lee tras una intensa pelea a puñetazo limpio, bajo la lluvia, y rodeado de llamas resulta de lo más gratificante. Si además consigues hacerlo convirtiéndole en carne picada gracias a las interacciones con el entorno, habrás conseguido la sangrienta guinda de este pastel. ¡Qué ganas le teníamos a este pájaro!
The Last of Us
Hay pocos personajes de videojuego que se merezcan tanto una muerte prematura como David en este juego post apocalíptico de Naughty Dog. Después de zurrar a Ellie como lo hace, cada golpe que la pequeña protagonista a la cabeza de David con el machete es una exclamación de victoria de los jugadores.
The Walking Dead Season 2
Vale, tal vez sí que hay una muerte más satisfactoria que la de David en The Last of Us: la de William Carver en el tercer episodio de la segunda temporada de este juego de zombis de Telltale. Una de esas muertes inolvidables, de las que curten el carácter y te marcan para siempre, ¿verdad Clementine?