Exitazos como Oblivion, Fallout o Skyrim han dejado huella entre muchos usuarios... y también entre la inmensa mayoría de las compañías desarrolladoras de software. Y eso incluye a los estudios más pequeños, como Spiders, equipo que nos traerá un RPG que estará marcado por las obras que os acabamos de mencionar.
La presente generación de consolas y PC nos ha dejado muchos títulos sobresalientes. Y algunos de ellos pertenecen al género de los RPG, un estilo de juego que ha dado un salto de calidad impresionante a lo largo de los últimos años. Y es que han sido muchas las producciones de este estilo que han sentado las bases a seguir para el resto de juegos similares. La excepcional trilogía de Mass Effect, el sobresaliente The Elder Scrolls: Skyrim, el magnífico The Witcher 2: Assassins of Kings o la saga Fallouthan marcado, entre otros títulos más que nos dejamos en el tintero, el camino a seguir para las producciones venideras. Y gracias a todos ellos, la calidad que se ha conseguido alcanzar en este tipo de juegos ha sido muy plausible.
Siguiendo esta estela vamos a encontrarnos con una nueva producción ideada por el estudio independiente Spiders, que llevará por nombre Bound by Flame. Esta producción nos sumergirá en un mundo fantástico de tamañas proporciones en el que tendremos que asumir el control de un guerrero dotado de un poder (o maldición, según se mire) muy especial.
De esta forma, el protagonista de esta historia tendrá que convivir con un demonio interior. Y precisamente esta característica será la que va a diferenciar Bound by Flame del resto de juegos similares, ya que tendrá una importancia capital en el desarrollo de toda la aventura, afectando a múltiples áreas que pasamos a comentaros.
Pelea y decide
Para empezar, a lo largo de todo el juego será posible hacer uso del gran poder que poseerá este inusitado compañero de viaje. De esta forma y cuando la situación lo requiera, será posible echar mano de la fuerza extra que nos proporcionará este ser para someter a los rivales que se pongan por delante de nuestro personaje principal. Y no hablamos de tipos corrientes precisamente, ya que la inmensa mayoría de los adversarios que tratarán de hacernos picadillo serán esqueletos, goblins y monstruos de ultratumba de las más diversas formas que podáis imaginar. Sin duda, tendremos que blandir la espada con sabiduría para conseguir doblegar a todos sin requerir de la fuerza extra del demonio.
¿Y por qué negarnos a usar dicho poder? Os preguntaréis. Pues por una sencilla pero decisiva razón: cuanto más lo utilicemos, más iremos cayendo en su dominio global, lo que afectará de manera palpable al protagonista.
Por lo tanto, cuanto más recurramos al "camino fácil", por así decirlo, menos humanidad irá teniendo el protagonista. Hasta tal punto será así, que a medida que avance la historia será posible ir advirtiendo el cambio sensible de la apariencia del mismo, que irá despojándose de su aspecto humano para ir transformándose en un demonio... justo lo que habitará en su interior.
Pero esto sólo sucederá si así lo deseamos, ya que el título nos brindará una gran capacidad de decisión en este aspecto. Sí, porque podremos negarnos si así lo determinamos en cada caso, pudiendo combatir usando únicamente las habilidades como guerrero de nuestro personaje, las cuales no serán moco de pavo precisamente. Y es que la destreza que exhibirá en el dominio de múltiples armas será muy notable, pudiendo además disfrutar de un sistema de combate muy completo.
Las batallas sucederán en tiempo real, como marcan los cánones establecidos por esta corriente de RPGs contemporáneos... concepto que se aleja cada vez más de los registrado en los juegos de rol más tradicionales, casi todos ellos JRPG como Final Fantasy, Tales, Dragon Quest y muchos otros más. Y durante las peleas podremos efectuar una buena gama de golpes, combos y movimientos defensivos, así como utilizar una generosa cantidad de objetos y magias.
Desarrollo no lineal
Como os comentábamos anteriormente, esta capacidad de decisión de utilizar o no a nuestro amigo tendrá un alcance extremo en la aventura, yendo más allá de la ventaja que pueda proporcionarnos en las batallas o del aspecto que pueda llegar a presentar el personaje principal. Sí, porque en función de esto podremos intervenir en unos capítulos u otros, abriéndose ramas argumentales bien diferenciadas.
O lo que es lo mismo, que aunque la historia principal transcurrirá de forma inalterable, esta característica será la que determine en gran medida el devenir de las misiones secundarias. Los desarrolladores están asegurándose de que este factor determine en gran medida e influya de forma decisiva en las rutas que sigamos a medida que avancemos en el mundo de Bound by Flame, por lo que estaremos ante una aventura no lineal que presentará un grado de rejugabilidad muy elevado. Además las decisiones que vayamos tomando también tendrán una relevancia extrema en la parte final del juego, ya que podremos presenciar varios de ellos distintos.
Pero es que habrá más. Como en casi todas las aventuras actuales, a medida que progresemos iremos conociendo a diversos personajes secundarios. Y algunos de estos NPCs se unirán a nuestra causa, pudiendo establecer una relación con ellos... que, nuevamente, quedará muy marcada por las veces que recurramos a nuestro invitado interior. El comportamiento de unos y otros variará bastante en función de este hecho, añadiendo así una capa de profundidad adicional a una aventura que tiene visos de ser muy interesante en ese apartado en particular.
Tampoco queremos olvidarnos de la personalización de nuestro protagonista, que será bastante llamativa. De entrada y como suele ser costumbre en este tipo de títulos, podremos crear a nuestro protagonista como más nos convenga gracias al editor correspondiente, pudiendo establecer su sexo, rasgos físicos principales, etc. Pero lo más importante es que, más tarde, también podremos equiparle con aquellos útiles, armaduras, armas y objetos que creamos oportunos, así como mejorar las habilidades especiales y mágicas a través de un árbol de aptitudes que constará (en principio, al menos) de tres áreas diferentes: Luchador, Pyromancer y Shadowmancer. Y estos atributos le permitirán desencadenar ataques bien diferenciados.
Gran ambientación
Como muchos ya sabéis, esta producción iba a aterrizar en PS3, Xbox 360 y PC a finales de este año pero, hace tiempo, sus creadores decidieron posponer dicho lanzamiento para mejorar la calidad gráfica del título y, de paso, convertir el mismo a PS4.
Este cambio nos parece un acierto ya que está permitiendo a los desarrolladores invertir más recursos y tiempo en actualizar su motor gráfico, el cual se verá beneficiado de un nuevo sistema de iluminación, un motor de físicas más potente así como revisar parte de la carga poligonal de cada entorno.
Lo que no va a cambiar es la línea artística que ya ha dejado entrever esta producción desde sus orígenes. De esta forma nos sumergiremos en un mundo de pura fantasía y de corte medieval, donde la magia y las criaturas sobrenaturales serán tan habituales como las espadas y las pócimas curativas. El mundo que acogerá la aventura será de un tamaño muy extenso, pudiendo atravesar una pléyade de entornos bien construidos y representados como bosques, templos abandonados, mazmorras y muchas otras localizaciones más. Y por eso mismo siempre podremos echar un ojo al mapa que aparecerá en imagen, el cual nos marcará tanto nuestra posición como la de los objetivos principales a cumplir y zonas de interés.
Pero lo que más nos ha llamado la atención de todo el juego en materia gráfica ha sido la disposición y aspecto que presentarán los monstruos a los que tendremos que enfrentarnos. La enorme variedad de bestias que camparán a sus anchas gozarán de un aspecto bastante intimidante, siendo difícil describir a todos ellos dada su singular apariencia.
Por todo esto pensamos que esta producción puede abrirse paso en el competido y atractivo género de los juegos de rol, el cual ya tiene en ciernes auténticos candidatos a best-sellers como The Witcher 3: Wild Hunt, Deep Down, Dragon Age: Inquisition y tantos otros. Esperemos que lo consiga.