Mientras buscaba entretenimiento en internet me encontré con la retransmisión en directo de League of Legends más surrealista que he visto en los ya más de diez años que llevo disfrutando del juego de Riot Games. Una pantalla con más de una docena de memes y un tipo con una careta de Nunu no muy conseguida que estaba jugando tres o cuatro partidas a la vez. En todas ellas seguía la misma "estrategia". Todo lo que hacía era correr por la mid lane hasta estrellarse con la torreta rival para morir sin parar. En uno de los espacios de la pantalla, había un mensaje claro: "Cuentas baneadas: 1.690". Al principio ni siquiera me lo creí, aunque es algo real y que lleva ocurriendo al menos un año y medio.
¿El streamer más infame de la historia de League of Legends?
Orgulloso de perder a propósito y forzar a los jugadores a abandonar las partidas en la fase de selección de campeón, lo de este "creador de contenido" se ha convertido en un imperio del terror. Aunque es imposible saber el número de veces que ha sido baneado de League of Legends, no hay grandes motivos para desconfiar de ese contador que indica un total de 1.690 sanciones. En unas tres horas de 'streaming' fue castigado al menos cuatro veces (recordemos que lleva un año y medio con esta actitud) y no se planteó bajar el ritmo. Cada vez que bloquean una de sus cuentas, solo debe iniciar sesión en otra y continuar con su estrategia. Su trabajo, básicamente, es monetizar el troleo de partidas a través de las retransmisiones en directo.
Por lo que he podido saber, Riot Games es perfectamente consciente de la situación. Uno de los problemas con respecto a este usuario es que dispone de lo que aparentemente es un surtido ilimitado de cuentas que se reparten en todos los rangos del juego. Al mismo tiempo que está jugando 'Disco Nunu' en una partida de los rangos clasificatorios más bajos de League of Legends puede estar 'inteando' en el más alto de todos (Challenger). Entre sus patrocinadores, de hecho, está un servicio dedicado a la compraventa de cuentas de League of Legends. Aparentemente, este sería uno de los métodos por los que es capaz de responder de forma inmediata a todas las restricciones aplicadas por la desarrolladora.
Además de memes, coloca en pantalla sus "mejores inteos".
Riot Games no sabe qué hacer para evitar la situación. En buena medida esto se debe a que no existe una forma real de evitar que una persona juegue a League of Legends. Uno podría pensar en baneos asociados a la dirección IP del individuo o a los números de serie de su hardware. Sin embargo, estas restricciones no son efectivas. Incluso si los desarrolladores lo hubieran intentando, existen multitud de métodos para escapar al castigo. En este sentido, las posibles acciones caen de la mano de las plataformas de retransmisión en directo. Si no le permitiesen emitir el contenido, perdería cualquier incentivo para perseverar en su actitud.
Además de arruinar la experiencia de otros usuarios. La forma de obtener tantas cuentas también es un problema. En el mejor de los casos son cuentas que han llegado a nivel 30 (el mínimo para jugar clasificatorias) por medio del uso de bots. También es muy probable que utilice credenciales robadas a otros usuarios. En este sentido, también supone un problema de seguridad para el juego. Cabe destacar, eso sí, que Riot Games ha puesto en manos de los jugadores mecanismos de seguridad como la verificación en dos pasos que evitan este tipo de problemas.
Un empleado de Riot Games aseguró que todo lo que podían hacer era seguir baneándolo cada vez que lo detectaban. Multitud de usuarios se han topado con él en partidas clasificatorias. Nuestro único consejo es que salgáis corriendo si os encontráis en una fase de selección de campeón a alguien que asegura que va a ‘intear’ y que añade un enlace a su streaming. Aunque abandonar en 'champ select' es algo estomagante al hacernos perder tiempo, siempre es mejor que someternos a la experiencia que ofrece este "creador de contenido".
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