Aunque en Zelda: Tears of the Kingdom podemos evitar combatir contra muchos enemigos (y de hecho es recomendable en ocasiones) en otras no nos queda más remedio que tener que vérnoslas contra algunos mostrencos para llegar a dónde nos dirigimos o para completar algún desafío o Templo de los Sabios. Normalmente los combates son peliagudos, pero no se pueden comparar con los que tenemos que disputar contra los Centaleones, los enemigos más duros de todo el juego. En esta guía os hablo de una misión secundaria que nos pondrá a prueba contra uno de ellos, y os explico cómo superarla.
Misión secundaria: El arma más potente
Si estamos cerca de la posta de Akkala Este, en la parte más al noroeste de la misma encontraremos a una guerrera que está practicando sus estocadas. Es Chaiba, y si vamos equipados con un arma fusionada le llamará la atención la curiosa configuración de nuestras herramientas de combate.
Dice que está interesada en construir un arma invencible, y que para ello le gustaría saber si es posible fusionar alguna con partes de un centaleón. De hecho, nos indica que hay uno bastante cerca de donde estamos, en la entrada del Desfiladero del viento, al este de donde hablamos con Chaiba.
Si ponemos rumbo a dicha posición, no deberíamos tener dificultades en atisbar a uno de estos poderosos enemigos entre los árboles que marcan la entrada al desfiladero. Es uno normal por la misión que se nos plantea, pero no os confiéis, ya sabéis lo duros y agresivos que son estos seres, y todo combate contra ellos pondrá a prueba nuestras habilidades como espadachines.
Combate contra el Centaleón
Aconsejaría empezar el combate cuerpo a cuerpo, porque los ataques a distancia que realiza con su arco y flechas son realmente poderosos, y en el cuerpo a cuerpo puede ser algo más sencillo, y no digamos directo, el intentar acabar con él. Realmente, los movimientos del centaleón son muy telegrafiables; si tiene su arma alzada en alto es que hará un tajo vertical -hay que esquivar lateralmente-, y si la sostiene ladeada es que va a hacernos un tajo horizontal -hay que esquivar con una voltereta hacia atrás.
Incluso en el nivel más básico, sus ataques pueden quitarnos una buena cantidad de corazones, y su resistencia a nuestros ataques es prodigiosa. En consecuencia, para este combate os hará falta ir bien pertrechados de comida y elixires que otorguen defensa o daño adicional (según vuestro estilo de juego) y tener armas con fusiones poderosas (cuernos de gólems sargentos como mínimo o de enemigos de nivel negro o plateado). Tampoco viene mal el haber mejorado nuestras armaduras con la ayuda de las hadas hasta el nivel 2 o 3 para que recibamos menos daño.
Cuando caiga, lo que debemos hacer es volver con Chaiba, fusionar uno de los cuernos que aparecen como botines por haberlo derrotado y equiparla. La guerrera se quedará muy impresionada no sólo por la hazaña que supone haber derrotado a un centaleón sino por el hecho de que es posible emplear partes del monstruo para mejorar nuestras armas. Eso sí, la recompensa es algo tibia, sólo 50 rupias, pero al menos hemos conseguido un arma con una fusión potente nueva.
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