El creador de Wasteland cree que debería ser algo común en la industria.
El padre del clásico Wasteland, Brian Fargo, ha declarado que los equipos de desarrollo que usan a los usuarios para financiar sus proyectos, como es el caso de Double Fine con su nueva aventura, o el mismo equipo de Fargo con Wasteland 2, deberían aportar parte de sus beneficios para que otros estudios con menos renombre tengan las mismas oportunidades de trabajo.
Según el creativo, los desarrolladores que consigan dinero a través de KickStarter deberían donar al menos un 5% de los beneficios finales del juego a otros equipos que se encuentren, en ese momento, pidiendo dinero para financiar sus proyectos.
"Una vez el proyecto haya sido creado y generado beneficios, deberíamos devolver una parte a la comunidad de desarrolladores para que puedan hacer realidad sus sueños", ha explicado Fargo. "A esto lo llamaría 'Kick it Forward' y sería el primero en llevarlo a cabo".
"Imaginad el potencial de otro Minecraft en KickStarter que produzca millones de dólares en beneficios que podrían ser redirigidos a otros desarrolladores. Esto ayudaría a que este modelo creciera aún mucho más", asegura. Por eso, espera que otros equipos "lo tengan en cuenta y se unan" a su causa.
Tras el éxito obtenido por Double Fine, que fueron capaces de recaudar más de tres millones de dólares, el equipo de Brian Fargo ha conseguido en un par de días casi un millón y medio de dólares, lo que ya ha rebasado la marca que establecieron para desarrollar Wasteland 2.