Microsoft asegura estar trabajando en esa posibilidad, aunque todavía no promete nada.
Ayer creó bastante polémica la noticia de que Xbox One vendrá sin cascos de serie en su embalaje puesto que Microsoft considera que el método de comunicación es Kinect. Hoy el Soporte de Xbox ha dado una buena noticia a través de su Twitter a quienes consideren el "headset" como algo imprescindible y no quieran comprar más accesorios.
"Estamos trabajando para desarrollar un adaptador para que los actuales cascos con cable puedan conectarse", declaró un vocal a las preguntas de los aficionados, que consultaban si los actuales headsets serían compatibles con la nueva consola. "Haremos públicos más detalles según se acerque el lanzamiento".