Take-Two acaba de presentar sus resultados fiscales. Es ambiciosa con el próximo año.
Los dos grandes puntales de Take-Two, empresa matriz de Rockstar y 2K, para el próximo año fiscal: Red Dead Redemption 2 y "el nuevo videojuego de una de las más grandes franquicias de 2K", del que no han ofrecido nombre pero todo parece indicar que se trata del esperadísimo Borderlands 3. En todo caso, Take-Two es muy ambiciosa con el próximo año, y espera registrar sendos récords en ventas netas y beneficios, situando en 2.500 millones de de dólares el primero y unos 700 millones de dólares en el segundo.
Para situarnos, el anterior año fiscal se cerró con 1.780 millones de dólares en ventas netas, mientras que los beneficios han ascendido en un 331,4 millones, un 26 y un 27% en comparación con el año anterior. El objetivo no es otro que duplicar los beneficios en el próximo año fiscal. Al respecto del recién estrenado año fiscal, se espera que los resultados bajen: la estrategia pasa por seguir aprovechando el éxito de Grand Theft Auto 5, los DLC de Mafia 3 y los siempre rentables lanzamientos de NBA 2K18 y WWE 2K18.
El mandamás de Take-Two, Strauss Zelnick, no ha querido ser claro con el nombre del "nuevo videojuego", pero todo parece apuntar a Gearbox. Borderlands 3 lleva varios años en desarrollo. Aunque no se ha hecho un anuncio oficial por parte de 2K, su director, Randy Pitchford, no dudó en anunciar el inicio de su desarrollo en enero de 2015. No sería extraño que fuese una de las principales novedades del inminente E3 2017.