Elon Musk es un nombre que, por distintos motivos, siempre aparece ligado a la actualidad tecnológica. En los últimos días, el propietario de firmas como Tesla, SpaceX y Twitter (ahora conocida como X Corp) acaparó varios titulares tras un cambio estético producido en su red social. Sin embargo, en esta ocasión la noticia es bien distinta, ya que Musk podría enfrentarse a una nueva demanda que se sumaría a todas las que ha acumulado en los últimos días. Pero, bajo su punto de vista, el trato que está recibiendo roza el acoso.
Según señala el portal Ars Technica en una reciente publicación, Musk se niega a declarar en la investigación sobre la compra de acciones de Twitter. Antes de cerrar la adquisición de la red social, el multimillonario compró una participación del 9% de la plataforma. Sin embargo, en contra de lo que indica la legislación estadounidense, Musk excedió el plazo de 10 días que poseen los inversores para reconocer que han adquirido acciones. Y, por ello, la Comisión del Mercado de Valores (SEC) estadounidense considera que Musk provocó que se vendieran acciones a precios artificialmente bajos.
Elon Musk asegura que la SEC le está acosando
Así, la SEC citó hasta en dos ocasiones a Musk para comparecer sobre sus acciones antes de comprar la compañía. Como recoge la información de Ars Technica, el multimillonario no tuvo problema a la hora de acudir a estas llamadas, pero desde entonces se ha negado a cooperar al considerar que el trato comienza a ser abusivo. Por ello, después de comprometerse a comparecer el pasado 15 de septiembre, los miembros de la SEC se sorprendieron con la ausencia de Musk. Y este, como ya es costumbre, demostró ser tajante a la hora de compartir su pensamiento.
Según su criterio, Musk considera que se necesita una “revisión exhaustiva” de estas agencias, un aspecto al que hay que sumar una comisión que “tome medidas contra aquellos individuos que han abusado de su poder regulador en beneficio personal y político”. Así Musk considera que la SEC está utilizando su poder de citación para “acosarlo”, un aspecto que la entidad considera fuera de lugar, ya que creen que “ninguna de sus objeciones tiene validez legal” y, por consiguiente, no tiene ninguna excusa justificable para “su incumplimiento de la citación de la SEC”. Así, que Musk alegue que no puede personarse en San Francisco a declarar porque no reside allí, para la organización es una excusa para eludir sus responsabilidades.
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