La irrupción de herramientas como ChatGPT o Midjourney ha provocado que este sector de la tecnología goce del actual alcance de popularidad que posee. Así, las posibilidades de los agentes de IA generativa congregan a diario a cientos de millones de usuarios que utilizan sus opciones para llevar a cabo todo tipo de acciones. Sin embargo, el crecimiento de la inteligencia artificial también ha provocado el aumento de un temor que, como recoge Bloomberg en una reciente noticia, ya es una realidad: el uso de la IA con fines militares.
En una reciente publicación, el portal norteamericano revela que Israel (más concretamente sus fuerzas aéreas) ha comenzado a utilizar esta tecnología para seleccionar objetivos para ataques aéreos y, al mismo tiempo, organizar la logística de guerra. De esta forma, los militares israelíes están sacando partido a un sistema basado en IA que analiza grandes cantidades de datos para, posteriormente, determinar qué objetivos seleccionar para ataques aéreos. Y esto, en esencia, implica que la IA ya empieza a ser crucial en terrenos tan peligrosos como los conflictos bélicos.
Las vidas humanas pueden estar en manos de la inteligencia artificial
Como era de esperar, otorgar a una IA el control de operaciones militares ha generado numerosos debates y controversias. Por ello, un oficial de las Fuerzas de Defensa de Israel abordó la situación con la intención de calmar la visión al respecto. Según reportó, estos sistemas están supervisados por seres humanos que examinan y aprueban tanto los objetivos como los planes de la IA. Sin embargo, la tecnología no está sujeta a ningún tipo de regulación estatal o internacional y, como ya sucedió en 2021, ya han provocado un conflicto previo a raíz de sus decisiones.
En estos momentos, Israel es una de las líderes mundiales en lo que a armas y sistemas autónomos se refiere. Con la inteligencia artificial, la región ubicada entre Europa y Asia ha confeccionado torretas capaces de rastrear objetivos con mayor precisión, una posibilidad a la que hay que sumar su capacidad de disparar gases lacrimógenos y balas con punta de esponja. Además, también han hecho especial hincapié en “drones suicidas autónomos”, un aspecto que demuestra el avance en lo que IA se refiere. Sin embargo, muchos temen una posible rebelión de la tecnología que, en resumidas cuentas, podría acabar con la humanidad tal y como la conocemos.
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