Si algo nos ha enseñado la serie 'Obi-Wan Kenobi', además de que en el espacio no se pueden rodear las vallas, es que los fans de Star Wars se merecen productos de calidad. 'Mandalorian' y 'Andor' son dos ejemplos de cómo salirse de la fórmula tradicional de aventura dentro de la Guerra de las Galaxias es lo que hace que esta saga siga vigente a día de hoy.
Y, aunque criticada, una de las obras que más cosas distintas intentó hacer en Star Wars no fue otra que el Episodio VIII: 'Los últimos Jedi'. La película dirigida por Rian Johnson fue criticada por el ala dura de los fans de la saga y enmendada en bastantes puntos por el noveno episodio, otra vez a cargo de J.J. Abrams.
Johnson se encuentra en estos momentos en plena promoción de 'Puñales por la espalda: el misterio de Glass Onion', la secuela de la primera entrega de whodunnits protagonizada por Daniel Craig, A.K.A. Benoit Blanc. Y en estos actos se le ha preguntado por esa polémica película.
En el medio anglosajón The Atlantic, a Johnson se le sacó el tema del final de la película, ese que nos muestra a un niño mirando al cielo con una escoba como si fuese una espada láser.
“En términos de la película de Star Wars que hice, traté de darle un gran final. Me encantan tanto los finales que incluso haciendo el capítulo de en medio de la trilogía, traté de darle uno. Un buen final que recontextualiza todo lo que vino antes y lo convierte en un objeto hermoso en sí mismo".
Después de esto, Johnson reflexionó sobre lo que significan las franquicias a día de hoy y su incapacidad de poner punto y final. Algo que considera que no le permite a las sagas usar todas las herramientas a su disposición.
"Un cierre es lo que hace que una película sea una película. Parece que cada vez hay menos de eso. Toda esta idea venenosa de crear una propiedad intelectual se ha filtrado por completo en la base de la narración. Todo el mundo está pensando: ¿Cómo seguimos ordeñando esto? Me encanta un final en el que quemas el barco vikingo en el mar”.
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