Tras su paso por el videojuego, Alucard debuta como protagonista en Lords of Shadow II con la expansión Revelations. Un añadido que, pese a su título, no aporta grandes cosas a efectos narrativos pero que por fortuna elimina de un plumazo las secciones de sigilo del original. Nuevas habilidades, escenarios inéditos y un puñado de escenas de acción para este DLC.
Pocos videojuegos han dividido más a prensa y aficionados en los últimos tiempos que Lords of Shadow II, la por ahora última entrega de la serie Castlevania. La irregularidad de su propuesta es poco menos que indiscutible, sin embargo la importancia de los elementos que no estaban a la altura resultó muy distinta en función de quién los juzgara, pasando su consideración entre una gran variedad de opiniones en un espectro entre videojuego brillante y propuesta aburrida y poco trascendente.
Mercury Steam, sin embargo, sí ha sido consciente de las críticas y en este primer gran contenido descargable para el videojuego nos brinda una ecuación algo más afinada en cuanto a su fórmula general. Se eliminan, por ejemplo, las tediosas secciones de sigilo, uno de los "fichajes" más importantes del título en su momento y también uno de sus mayores fracasos, y el conjunto gana en algunos sentidos aunque vuelve a atestiguar la falta de consistencia del original en otros.
Una Nueva Revelación
A nivel argumental cuesta mucho hablar de Revelations sin explicar elementos que "destripen" casi por completo al propio Lords of Shadow II, de modo que vamos a pasar por alto todo lo que tiene que ver con el guión. Advertiremos únicamente que para entender el DLC es fundamental haber terminado el videojuego al que se suma, y dejaremos claro una vez más que su protagonista es un Alucard que nos explicará sus secretos y para el que conocemos algunos hechos que transcurrirán interrelacionados con lo que vimos en su momento.
No entraremos en estériles polémicas sobre si este add-on debió haber salido a la venta de forma independiente, o si debió formar parte del conjunto del producto en su lanzamiento original, puesto que como es habitual preferimos centrarnos en lo jugable. Y en eso, lo que nos va a brindar este contenido digital con el que nos podemos hacer por 5,99 euros, es una prolongación que interesará a quienes disfrutaran del original, ofreciéndoles un nuevo punto de vista.
El protagonista escogido en esta ocasión tiene algunas particularidades. Por ejemplo su estilo de combate es muy diferente a lo que vimos en el original, con un ritmo muy diferente para las escenas de acción y un planteamiento de rango más cercano que se aleja notablemente del látigo y el resto de complementos que disfrutamos antaño. Estos enfrentamientos siguen siendo, como entonces, el punto fuerte de la propuesta, lamentablemente aquí dada la corta duración de la expansión su presencia es muy limitada y dejará en nosotros cierta sensación de insatisfacción. Son luchas intensas y bien cuidadas, pero también escasas en número.
El total de la campaña que disfrutamos en esta ocasión, que podemos superar aproximadamente en un par de horas, vuelve a estar salpicado de rompecabezas y puzles. Desaparecidas ya las secciones de sigilo, lo que vamos a ver se polariza mucho más entre combates y el combo exploración-acertijos. Nuestros poderes tienen especial importancia en estas partes puesto que algunos de ellos, como el de revertir el tiempo, son de empleo obligado para sortear algunas situaciones. Algunos son algo frustrantes por la ya conocida escasa tolerancia de Mercury Steam a aportar vías alternativas en este sentido, lo que se traduce en que o hacemos las cosas al modo Revelations o no hay disyuntiva posible en nuestras manos. Son sencillos desafíos, no particularmente inspirados, salvo uno, y se sortean con facilidad.
Por lo que respecta a los elementos relacionados con la faceta de valores de producción, Revelations exhibe una vez más el mismo nivel de excelencia que en esta parte sí exhibió Lords of Shadow II. La parte artística es la más cuidada, sin duda, y los nuevos escenarios son buena muestra de ello, lástima que no se vea acompañado por nuevos e imaginativos diseños para los enemigos a los que deberemos plantar cara. En lo tocante al audio, la música vuelve a rayar a nivel extraordinario, y la escasa presencia de voces en versión original está bien resuelta, con el lanzamiento desembarcando en nuestro país con la única traducción de sus textos.
No tenemos nada en contra de los DLCs que no son particularmente cortos, como es el caso, sin embargo no podemos evitar la sensación de que al final nada de lo que ofrece este añadido acaba estando suficientemente desarrollado. Parece que en algunos momentos calienta motores y está a punto de despegar, pero en ninguno de sus compases termina por levantar el vuelo. Su intención de engordar el guión de Lords of Shadow II, que no fue la parte que más nos gustó precisamente, es meritoria, y si bien en ocasiones consigue mantener nuestro interés, esto sólo sucede en momentos muy puntuales.
Con alguna que otra cresta de la ola, pero la sensación general de que no ha aprovechado al 100% sus posibilidades, Revelations es un añadido que no le viene mal a Lords of Shadow II a la hora de alargar su vida útil si en su momento nos gustó su propuesta. A pesar de que pule algunos elementos, la desaparición del prescindible sigilo era más que necesaria, lo cierto es que agradará casi únicamente a los que fueron capaces de pasar por alto los puntos negativos del original.
- Un nuevo personaje protagonista.
- Aunque haya poco combate, sigue siendo lo mejor de la experiencia.
- Reciclaje abusivo de enemigos.
- A pesar del intento no aporta demasiado.
