Análisis de Code Name S.T.E.A.M.. ADN estratégico

Análisis de Code Name S.T.E.A.M.. ADN estratégico
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ADN de Intelligent Systems, alma de regeneración y cuerpo con estilo "steampunk". Así es Code Name: S.T.E.A.M. el nuevo juego de estrategia táctica que han estado preparando los autores de clásicos como Fire Emblem durante los últimos años. Ha llegado el turno de conocer el alcance de esta propuesta a vapor y exclusiva para Nintendo 3DS.

Desde que vimos Code Name: S.T.E.A.M. por primera vez nuestra sensación fue la de tener ante nosotros un videojuego rompedor con respecto a la trayectoria que había seguido Intelligent Systems. Los creadores de joyas como Fire Emblem y Advance Wars iban a atreverse con la perspectiva en tercera persona e iban a apostar por esa estética que tan de moda se puso hace unos años en la industria del videojuego: "steampunk".

Sin embargo, una vez a los mandos, es fácil sentir el ADN de las anteriores producciones de esta compañía. En realidad, no hay tantas cosas que hayan cambiado. Puede que ahora nos movamos en escenarios en 3D, pero la estructura en tableros cuadriculados tan típica de sus juegos sigue existiendo, respetando turnos, límite de avance y por supuesto la presencia de distintos personajes dentro de un grupo de guerreros que además podemos configurar.

La forma de trabajar de estos nipones en el género de la estrategia y la táctica siempre ha sido formidable, con partidas que podían convertirse en maratonianas alcanzada cierta parte de la aventura. Esto no cambia ahora, y nos agrada, porque bajo una nueva IP recibimos las señas de identidad de una de las subsidiarias más valiosas de Nintendo. Talento incontestable para una posible nueva franquicia, dependiendo por supuesto del éxito que alcance en las tiendas. Por nuestra parte, el éxito se mide en las horas de diversión que nos ha dado, y no han sido pocas…


Otra de aliens

Unos alienígenas han invadido La Tierra y secuestrado a la mismísima reina de Inglaterra. Bajo este pretexto nace la campaña del videojuego. No os hace falta saber mucho más, salvo que las siglas S.T.E.A.M. corresponden a nuestro grupo de actuación, un conjunto de soldados de élite que se encarga de la situación. La historia es un mero acompañante. Os resultará curioso que el mismísimo Abraham Lincoln sea el líder de nuestro grupo, pero poco más…

Aunque no lo parezca, aquí también hay una cuadrícula, representada en el suelo de una forma muy sutil. Calcula bien tus pasos, porque no podrás moverte hasta el infinito. Dependes de la fuerza del vapor.
Aunque no lo parezca, aquí también hay una cuadrícula, representada en el suelo de una forma muy sutil. Calcula bien tus pasos, porque no podrás moverte hasta el infinito. Dependes de la fuerza del vapor.


Lo verdaderamente importante son las 25-30 horas que dura y que cada uno de los capítulos se divide por secciones. Gracias a ello las partidas no se hacen demasiado largas. Si acaso lo hacen, siempre existe la oportunidad de guardar partida en cualquier instante. Es algo muy positivo que la obra esté tan bien adaptada a un entorno portátil como el de Nintendo 3DS.

También lo es que a medida que progresemos vayamos aprendiendo nuevas cosas. Primero conociendo que cada alienígena tiene un punto débil, luego que nuevos integrantes pueden unirse al grupo, y más tarde que los personajes disponen de habilidades específicas. Es un código de identidad en Intelligent Systems: el avance que nunca se vuelve demasiado pesado. En particular, nos ha gustado que los tutoriales sean a modo de monitores que podemos visitar o no dentro de cada decorado.

Code Name: S.T.E.A.M. es un videojuego pausado, pero en su justa medida

Si os pasa como a nosotros, la primera partida será abrupta, sin saber muy bien lo que hacer (y probablemente os fulminen pensando que hay algo mal en el juego). No obstante, todo cambia muy rápido. Obviamente, no es para todo el mundo, o al menos no para esos momentos en los que necesitamos más acción. Code Name: S.T.E.A.M. es un videojuego pausado, pero en su justa medida. Cabe destacar en este sentido que hace poco se lanzó una actualización para que la espera en el movimiento de la CPU no se hiciese tan pesado.

ADN estratégico


El funcionamiento es muy sencillo. El bando del jugador (grupo S.T.E.A.M.) y el de la CPU (alienígenas) se alternan en turnos, uno con el fin de llegar a la meta y otro con el objetivo de acabar con todos nosotros. Cada uno de nuestros personajes dispone de una barra de vapor que se consume con cada paso que damos sobre un escenario 3D pero que al mismo tiempo se divide por casillas de avance. Podemos avanzar o disparar, siempre tratando de gestionar bien esa fuente de energía que es el vapor.

¡Sorpresa, sorpresa...! A lo largo de la aventura tendremos variedad de situaciones, algo que favorece la sensación de progresión.
¡Sorpresa, sorpresa...! A lo largo de la aventura tendremos variedad de situaciones, algo que favorece la sensación de progresión.


Ahí radica el secreto del éxito. Podemos optar por disparar a los enemigos, escondernos detrás de alguno de los elementos del escenario, ir a recoger un engranaje que nos sirva para mejorar equipamiento, decidirnos mejor por ese ítem de vida que vemos a lo lejos o bien guardar el vapor suficiente por si podemos hacer un contraataque. Siempre estamos tomando decisiones, porque otra de las bondades del título es que no hay una forma prefijada para superar cada nivel.

Esto se hace más patente cuando nuestro cometido no consiste simplemente en ir desde un punto a otro, sino en escoltar a un NPC o enfrentarnos a un temible alienígena más grande de lo normal. El videojuego es a este respecto lo suficientemente variado. Podría haberlo sido más, pero no sería justo quejarse cuando tenemos tantos personajes a nuestra disposición. En particular, conoceremos 12 soldados que se irán uniendo a la tropa, cada uno con sus armas y especialidades, desde los rifles a los lanzagranadas, pasando por fusiles que lanzan dardos de curación.

ADN estratégico


No hay clases porque cada personaje es una clase en sí misma. Asalto, soporte, médico… están todas representadas. Y uno de los aspectos que más nos gustan es que cada unidad dispone de su propia habilidad especial. Son estos detalles los que hacen interesante una aventura táctico-estratégica. Lo mismo ocurre con el hecho de recoger monedas en el escenario, las cuales nos sirven para ir desbloqueando nuevos modelos de armas. El juego es más profundo de lo que aparenta, y eso es bueno, porque quiere decir que también resulta fácil de comprender.

Los escenarios disponen de diversas alturas, hay un personaje que en vez de disparar salta sobre los adversarios, tenemos barriles explosivos en algunas… Cada escenario está repleto de posibilidades. Por ello, es importante rotar la cámara, ya que no tenemos mapa. Esto podría considerarse algo negativo, y lo echaréis en falta muchas veces. No obstante, pronto os daréis cuenta de que es una decisión de diseño más que un error, siendo la incertidumbre que genera uno de los aspectos positivos del título.

Ya sólo por la campaña individual Code Name: S.T.E.A.M. es un juego potente, pero se agradece que incluya adicionalmente un multijugador

Lo que no nos ha gustado es la manera en que está integrada la pantalla táctil. El uso de la cámara en el panel inferior es muy poco preciso, con lo que terminaréis optando por la utilización de los botones frontales (A, B, X, Y). Todo lo demás es correcto, y de hecho es un juego que saca bastante partido de las funciones táctiles para alternar entre personajes o armas, así como finalizar cada turno.

¿Veis al personaje de la derecha? Es la mismísima Reina de Inglaterra, y deberemos protegerla en esta misión. Los objetivos cambiarán a veces, de forma que no todo consistirá en aniquilar a todo lo que se mueva.
¿Veis al personaje de la derecha? Es la mismísima Reina de Inglaterra, y deberemos protegerla en esta misión. Los objetivos cambiarán a veces, de forma que no todo consistirá en aniquilar a todo lo que se mueva.


Sobre el terreno gráfico, nos encontramos ante un juego muy discreto. Cumple su cometido, pero no llega nunca a sorprender. Todo está modelado en tres dimensiones, pero el nivel de detalle nunca es elevado. Es funcional para un juego de estas características, aunque destaca el trabajo realizado sobre los personajes, con diseños cel-shading y animaciones muy correctas. Sobre el efecto estereoscópico, sinceramente, lo hemos tenido desactivado la mayor parte del tiempo porque no aportaba mucho a la experiencia.

El ambiente sonoro se encuentra también en un plano secundario, pero hay que entender que la música debe cumplir una función en juegos pausados como el que nos ocupa. Aún así, es digno de mención que adquiera tonos épicos en ocasiones y que cambie sus acordes cuando un enemigo nos ha avistado o se encuentra atacándonos. El drama de ver cómo nuestra barra de vida se reduce queda así perfectamente reflejado. Por supuesto, todo con voces en inglés, aunque muy correctamente subtituladas al español.

Turno para el multijugador

Ya sólo por la campaña individual Code Name: S.T.E.A.M. es un juego potente, pero se agradece que incluya adicionalmente un multijugador, tanto online como local, para un máximo de dos jugadores. "A vida o muerte" es la principal propuesta, un 1vs1 de toda la vida en el que sólo hay un condicionante: nuestro turno tiene siempre un límite de 60 segundos. En "Fiebre del oro" la dinámica es parecida, sólo que aquí gana el jugador que consiga el mayor número de medallas dentro del escenario establecido.

Si tenemos estos amiibos, podremos invocar sus personajes durante la partida. Lo único es que no podrán ser resucitados una vez caigan... ¿Os suena?
Si tenemos estos amiibos, podremos invocar sus personajes durante la partida. Lo único es que no podrán ser resucitados una vez caigan... ¿Os suena?


"ABE contra ABE" es la última propuesta, una más atípica al versar sobre el control de un enorme robot, situándonos en su cabina. Una batallas de mechas uno contra uno que sirve un poco para desconectar… En resumen, planteamientos básicos pero acertados, los cuales se añaden a la oportunidad de disputar torneos tanto públicos como privados. Lo importante es que se dan títulos dependiendo de la posición, así que veremos cómo funcionan una vez esté el videojuego a la venta.

Otros detalles a conocer son que mediante StreetPass podemos intercambiar puntuaciones sobre misiones (y así ganar medallas). También podemos utilizar los amiibos de Fire Emblem (Marth, Ike, Lucina o Daraen) para invocarlos en combate. Desde luego, no encajan en un mundo como el de Code Name: S.T.E.A.M., pero lo que nadie puede decir es que no sepan luchar bajo estas circunstancias. Han cambiado algunas cosas, pero el ADN táctico-estratégico de Intelligent Systems sigue presente, y eso es muy buena noticia.

Muy Bueno

Sin sello
ADN estratégico

Code Name: S.T.E.A.M.

Por: El equipo de 3DJuegos
Sin sello

Intelligent Systems reinterpreta su ADN táctico-estratégico bajo una nueva licencia. Code Name: S.T.E.A.M. es pasar la tradición de sus mayores producciones a una perspectiva en tercera persona bajo el estilo "steampunk". El resultado es un juego que reinventa las claves de clásicos como Fire Emblem desde un nuevo punto de vista y con su propia identidad, algo que no puede decirse todos los días. Por su buena duración, correcto desarrollo, alto disfrute e idoneidad a un marco portátil obliga a que tu siguiente turno sea el de hacerte con él.

Comprar Code Name: S.T.E.A.M.
  • Mantiene el ADN de Intelligent Systems, ahora bajo una nueva perspectiva
  • Cantidad de posibilidades de actuación en cada escenario. Versatilidad táctica
  • La duración es muy adecuada, por encima de las 20-25 horas
  • Ciertos episodios de monotonía a lo largo de la campaña
  • El multijugador es poco profundo, podría haber dado más de sí
Jugadores: 1-2
Idioma: Textos en español y voces en inglés
Duración: 20-30 horas (mínimo)
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