No son demasiados los títulos que están llegando últimamente vinculados al clásico género de los Action RPG de esencia nipona. GUST pretende rellenar dicho hueco con Nights of Azure 2: Bride of the New Moon, continuación directa del notable Nights of Azure. Análisis.
A pesar de tratarse de un Action RPG bastante estimable pese a sus grandes particularidades, Nights of Azure pasó sin pena ni gloria en Occidente… algo que posiblemente vaya a suceder una vez más con la continuación que aparecerá en breve y a la que ya hemos podido jugar en profundidad. ¿Y por qué le vaticino un destino tan poco halagüeño? Pues hombre, porque coincidir en el día del lanzamiento (el 27 de este mes) con videojuegos como Super Mario Odyssey, Wolfenstein 2: The New Colossus o Assassin´s Creed: Origins (entre otros juegos) no me parece que sea el mejor slot para un título tan nicho como es Nights of Azure 2: Bride of the New Moon.
Esta aventura nos sitúa en el continente europeo hacia finales del siglo XIX. Un momento en el que reina el caos y la desesperación debido a la sangre azul… que no tiene nada que ver con la monarquía. Para nada. Después de lo sucedido en la primera parte de este título y que no os voy a desvelar, por culpa precisamente de la citada sangre azul (que convierte en monstruos a quien tiene la desgracia de entrar en contacto con ella), el mundo en el que transcurre la aventura ha sido copado por todo tipo de criaturas infernales. Y dichos monstruos están comandados por la temible Moon Queen. Para contrarrestar todo esto la organización Curia, que lleva años salvaguardando la paz de nuestro mundo, teje un plan muy sencillo: ofrecer a la vida de Liliana, la llamada Bride of Time (esposa del tiempo), como sacrificio para dicha reina maléfica.
El problema de todo esto es que Liliana es la amiga de la infancia de la gran protagonista de esta aventura, la valerosa Aluche, quien salvaguardará a su amiga incluso sacrificando su propia existencia… lo cual sucede durante los primeros minutos (no es ningún spoiler, os lo prometo), convirtiéndose en un ser completamente diferente mitad humana mitad demonio. Una trama muy japonesa (con todas las particularidades que todos los que disfrutamos de este tipo de obras conocemos de sobra) que, además, va cobrando cada vez más cuerpo y complejidad a medida que van desfilando otros nuevos personajes importantes. No es la mejor narrativa jamás ideada, en absoluto, pero es curiosa.
Batallas en equipo
Lejos de asumir un papel secundario, tanto Liliana como el resto de protagonistas que van sumándose a la aventura (casi todos ellos féminas como la exuberante Ruenheid, Camilla Alucard, etc.) sirven a de apoyo para Aluche, especialmente durante las batallas.
Justamente y como buen juego de su idiosincrasia los enfrentamientos adquieren una importancia muy destacada. Dichos combates tienen lugar en tiempo real y sin ser los más excitantes que he podido disfrutar dentro de su género, tienen su gracia y además gozan de varias innovaciones en relación a los vividos en la primera parte de esta saga. Lo más llamativo es la importancia que adquieren los Lilies, es decir, los acompañantes de la protagonista que pelean junto a ella y que son controlados por la CPU. Siempre vamos acompañados de un Lily, si bien también es posible echar mano de un par de Servans, o lo que es lo mismo, aliados demoníacos muy curiosos y útiles en pleno combate. Sin embargo y a pesar de que los Lillies actúan de manera autónoma, también es posible darles ciertas órdenes (que quedan enmarcadas en la cruceta digital) para que concentren sus ataques en un enemigo concreto, para actúen libremente, etc. Pero hay más.
Jugablemente le falta profundidad y algo de chispa, pero resulta entretenido
En función de las características de cada uno, que son bastante diferentes entre sí, nos otorgan un apoyo determinado durante las peleas de varias formas distintas. Por una parte, es posible efectuar una especie de ataque combinado llamado Double Chase que resulta muy dañino para los adversarios, acabando con la mayoría de ellos de un plumazo. Junto a esto están las Special Skills, unas habilidades especiales que poseen los Lillies y que se activan automáticamente bajo circunstancias muy específicas, como cuando estamos a punto de morir. Potenciar nuestro nivel ofensivo, regenerar la salud o crear un escudo protector alrededor de Aluche son algunos de los beneficios que es posible adquirir por medio de dichas habilidades pasivas.
Y por supuesto, luego están las propias aptitudes de la protagonista, que es capaz de efectuar una buena gama de ataques normales, combos, ataques especiales y maniobras defensivas. Un sistema bastante competente que, si bien es verdad que podría haber dado más de sí, no está mal. Una de las partes más importantes de esta aventura que, lógicamente, queda respaldada por varios elementos de juego adicionales.
La relación que podemos establecer tanto con nuestros aliados como con otros personajes (como los miembros de Curia) es bastante importante. Los diálogos conforman una parte destacada de la aventura, conversaciones que tienen lugar en japonés con subtítulos en inglés. En este caso no es fundamental tener un nivel muy elevado en dicho idioma para entenderlos y, a diferencia de lo que sucede con otros juegos similares, tampoco es necesario siquiera conocer qué nos cuentan para poder avanzar sin demasiados problemas, aunque por supuesto nos perderemos muchos detalles sobre la trama.
También podemos desplazarnos por los variados escenarios de Nights of azure 2, los cuales no presentan unas dimensiones demasiado amplias y son generalmente bastante lineales, un aspecto que si bien habrá usuarios a los que no les convenza, a mí no me supone inconveniente alguno. Y por último está todo lo relacionado con el aumento de las habilidades y la experiencia de Aluche, un elemento fundamental en cualquier juego de este estilo. Una jugabilidad para nada sorprendente y a la que quizá le falte algo más de profundidad en global y chispa pero que, en cualquier caso, resulta entretenida una vez te sumerges en el juego. Eso sí, a pesar de todo esto sigo pensando que la primera parte era un título algo más divertido, directo y absorbente, tened esto presente.
En cuanto a su parcela gráfica, se nota que estamos ante una producción “menor”, por así decirlo. Lo más destacado con diferencia es su llamativa línea estética, de clara esencia manganime, que nos ofrece personajes bastante estilizados y bien caracterizados. También merece ser destacada la gran diversidad de entornos diferentes que podemos visitar, así como lo bien representadas que están las numerosas secuencias de vídeo que se dejan ver a lo largo de la aventura. Todo lo demás es simplemente funcional (siendo generosos), desde las animaciones de los personajes a la apariencia que muestran las texturas que se dejan ver en los fondos.
Cabe apuntar que la gran diferencia que se percibe entre las versiones de PS4 y Nintendo Switch (que son las que he podido probar) tiene que ver con la resolución y la tasa de imágenes, donde sale mejor parada la consola de Sony. Pero vamos, dado el talante gráfico tan humilde que ostenta Nights of Azure 2, se me antoja como un detalle menor.
El sonido es claramente superior gracias al magnífico doblaje en japonés y a la notable banda sonora, aunque los efectos sonoros se quedan claramente por debajo y pierden protagonismo.
Este Action RPG ofrece una trama peculiar, una gran representación de personajes de apoyo y una ambientación más que llamativa. Sin embargo el sistema de combate, sin ser malo en absoluto, podría haber sido mejor explotado por los desarrolladores, a lo que se suma una inexistente capacidad de sorpresa. El resultado es un título entretenido pero sólo recomendable para los seguidores más hardcore del género, que sabrán apreciar las virtudes que ofrece esta obra de Gust por encima de sus defectos.
Comprar Nights of Azure 2: Bride of the New Moon- Gran elenco de personajes de apoyo secundarios
- Amplia cantidad de acciones especiales que aportan dinamismo a las batallas
- La ambientación sonora es realmente buena
- Técnicamente es bastante funcional
- El sistema de combate no está mal, pero le falta algo de profundidad
- No se encuentra a la misma altura que su predecesor
