La emblemática serie Phantasy Star se estrena en PSP con la esencia clásica como abanderado principal y un éxito de ventas en territorio japonés sin discusión. Adéntrate solo o acompañado en multitud de misiones en un amenazado sistema Gurhal.
Debemos remontarnos al año 1987 para ver el nacimiento de una saga tan emblemática y exitosa para SEGA como memorable para los jugadores. Una Master System de 8 bits que jamás acabó de despegar fue la plataforma elegida para abrazar el primer Phantasy Star que disfrutarían los jugadores, un cartucho que poseía aún una novedosa batería de salvado para guardar nuestros progresos y que nos ofrecía un RPG enfocado a la tecnología y a la ciencia ficción en partes iguales. Tras este primer juego se sucederían tres entregas más para dar por finalizada la serie principal en 1993 en Megadrive.
Después aparecerían varios spin-offs como Phantasy Star Gaiden y Adventure para GameGear o las aventuras subtituladas Text Adventures originales de Meganet (un modem para Megadrive en Japón) y su correspondiente recopilatorio poco después en Mega CD. Pero sin duda las subseries más conocidas y que la mayoría de los jugadores conocen son PS Online y PS Universe. Ambas series son parecidas, aunque su principal diferencia radica en que la primera tiene un mayor marcado componente online que el segundo. Este Phantasy Star Portable pertenece a la subserie Universe, es decir, soporta multijugador pero se apoya principalmente en el modo para un jugador, además de estar enfocado al RPG de acción y al hack 'n' slash en su mayor vertiente.
Por lo tanto este PS Portable bebe tanto de PS Universe como de su expansión PS Universe: Ambition of the Illuminus, de hecho se le puede encuadrar a medio camino de estos y un heredero tanto en aspecto jugable como de enfoque argumental. La gente del Sonic Team está detrás de este juego, aunque su programación corre a cargo de Alfa Systems, que aunque la mayoría de sus proyectos han desembarcado en PC cierto es que para consolas desarrolla casi en exclusiva para las de Sony, como ya lo vimos en Tales of the World: Radiant Mythology del que este PS Portable hereda la interfaz y parte de su mecánica.
Clasicismo portátil
Casi un año hemos tenido que esperar los occidentales a que SEGA se decidiera a traernos este juego que fue uno de los títulos más vendidos de PSP en Japón el pasado año. La parte argumentativa del título no es su fuerte, aunque en la serie tampoco ha sido una seña de identidad. En esta ocasión encarnamos a un joven soldado que junto a un nuevo modelo de CAST llamada Vivienne, debemos descubrir el por qué de los actos terroristas en las colonias llevados a cabo por una extraña mujer de la que se desprende busca una nueva fuente de energía capaz de variar el rumbo de la Galaxia.
Al comienzo del juego podemos crear a nuestro personaje siguiendo multitud de variantes, desde la elección del sexo, la raza entre humanos, Newmans, Beast o CAST (especie de robot con sentimientos). También podemos cambiar la cara del personaje, el tipo de pelo, la piel, la proporción del cuerpo o incluso el tipo de voz. Del mismo modo tenemos la posibilidad de elegir una especialización entre Hunter, Ranger o Force, pudiendo cambiar de clase entre misiones y añadiéndose nuevas mientras vayamos avanzando.
Una primera impresión del juego puede decepcionar, ya que funciona básicamente por menús para movernos entre misiones. Es decir no existe un mundo central por donde manejar a nuestro personaje, sino que la base de operaciones o los distintos planetas funcionan como una aventura conversacional, por menús, como ya lo hacía Tales of the World. Por lo tanto para ir a la sala de operaciones, a nuestra habitación o a la tienda, sólo debemos mover un cursor por pantalla e iremos automáticamente. Esto mismo pasa para movernos por las estancias de las bases, donde a modo de mapa debemos mover una mirilla para seleccionar sobre la pantalla los personajes con quienes hablar y que son representados por iconos.
Antes que los aficionados a los RPG y la a serie decidan no seguir con la lectura comentarles que este aspecto queda como secundario, ya que las misiones en sí se desarrollan como se nos tiene acostumbrado, estando en unas buenas 3D y con un nivel de detalle amplio, aunque pecan de cierto vacío de elementos que por otra parte ayudan a la transición rápida entre estancias.
Combates masivos
Nuestra Base de operaciones de los Guardianes se compone del “panel de misiones”, lugar donde aceptar las misiones -sean libres o especiales- que nos permiten el avance de la historia; “la tienda” para comprar objetos o mejorar nuestro equipamiento; “el cuartel general” reservado para las misiones principales y sus correspondientes informaciones relevantes; el acceso a “los viajes interplanetarios” para cambiar a otros planetas y realizar allí misiones; o ”nuestra habitación”, lugar que nos ofrece multitud de alternativas a reseñar. Este último lugar puede funcionar como almacén para guardar objetos, como vestidor para cambiarnos de ropa, para consultar información sobre las misiones, un diario de nuestros pasos, una guía del juego, un glosario y nuestras estadísticas.
El combate es un punto positivo a destacar sustentado a la vez en una buena disposición de los botones. Podemos realizar ataques básicos que no consumen puntos de fotones o ataques técnicos que sí lo consumen. También podemos usar armas secundarias en consonancia con el botón R y cambiar las mismas gracias a un inteligente menú accesible con el botón círculo. Desde este menú podemos equiparnos con las armas que nosotros hayamos preparado en las distintas ranuras, pudiendo equipar en una misma ranura dos armas que precisen de sólo una mano. También desde aquí tenemos el atajo para usar los distintos objetos como los de curación.
El modo historia principal enfocado a un jugador no tiene excesiva profundidad argumentativa, de hecho puede considerarse como un largo tutorial para subir de nivel a nuestro personaje y encontrar objetos en las distintas misiones. Estas misiones se dividirán entre principales o libres. Las primeras se irán activando en el momento oportuno conforme vayamos superando las libres. Por otra parte estas misiones libres nos permiten tener un equipo de hasta 3 personajes acompañantes, mientras que las principales requieren un equipo específico.
El modo multijugador nos permite invitar por modo ad hoc a otros 3 amigos para jugar misiones libres o principales, parecido al modo historia pero con algunas limitaciones para favorecer ese componente multijugador. Podemos saltar de un modo a otro sin salir de la partida y pasar los distintos niveles conseguidos de un modo a otro. Comentar que este modo multijugador funciona a la perfección para dos jugadores, pero cuando se suman más jugadores la tasa de frames baja considerablemente.
Visualmente el juego cumple sobradamente y llega a sorprender en ciertos puntos, aunque la ausencia de un mundo central para ir de misión en misión pueda justificar cierto ahorro técnico, sobre todo en las cargas. Los escenarios, enemigos y personajes cuentan con unas buenas 3D, aunque los escenarios se hacen excesivamente vacíos y repetitivos. También se ha optado por un gran número de viñetas conversacionales en un completo inglés, tanto en voces como en texto, un punto negativo importante a considerar, más aun tratándose de este género. Por otra parte la disposición de los botones es adecuada y funciona francamente bien en combate proporcionándonos enormes variantes, pero este hecho cae descompensado por la poca elaboración de la IA de nuestros aliados.
Phantasy Star Portable recoge el testigo de las dos anteriores versiones en las que se basa para ofrecer una experiencia portátil con enormes posibilidades, sobre todo en su vertiente multijugador. El apartado gráfico luce a buen nivel y el comportamiento en los combates es notable, pero contiene otros puntos reprochables como una IA poco elaborada, un modo historia con poco peso y la no traducción del juego a nuestro idioma. Todo lo clásico de una fantástica saga en esencia portátil, aunque mejorable en ciertos puntos.
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