La Warner no ha llegado a donde está por ser estúpidos precisamente. En la misma semana estrenan la película y el videojuego de Watchmen, una de las franquicias más importantes y deseadas de la primera mitad del 2009. Si el largometraje será o no bueno todavía está por ver, pero el videojuego es un Hack and Slash muy competente que hará las delicias de los aficionados al género.
Parece increíble que un cómic tan aparentemente atípico como el de Watchmen, del maestro Alan Moore, esté recibiendo tanta atención en los últimos meses. La estela de éxito creada por productos recientes como Sin City, 300 o V de Vendetta ha sido demasiado importante como para que los grandes estudios dejen pasar un fenómeno en pleno boom de repercusión.
Las aventuras del Jon Osterman, Rorschach, Búho Nocturno o Moloch tienen su lugar en el entretenimiento interactivo de nueva generación, y lo hacen gracias a la serie de videojuegos descargables Watchmen que debuta con The End is Nigh. Un videojuego que puede entretener o aburrir a partes iguales en función de nuestra sintonía con el género de los Hack and Slash, variedad a la que el título pertenece indefectiblemente.
El Final Está Cerca
En el primer videojuego de Watchmen encarnaremos a Rorschach y a Búho Nocturno en su cruzada contra el crimen, mucho antes de los eventos que acaecen en la novela gráfica. Acompañaremos a estos dos atípicos superhéroes en un periplo de seis capítulos que nos llevará poco más de tres horas terminar con éxito, y en el que recorreremos diferentes escenarios investigando una mítica prisión estadounidense, además de la clásica zona del puerto y un área nocturna.
Contra todo pronóstico en un videojuego basado en el trabajo de Alan Moore el argumento es lo de menos, y es que si para el escritor británico la historia era lo más importante de sus novelas gráficas, en este título nos encontramos con un machacabotones de la vieja escuela que nos deja un reconocible aroma a otros títulos emblemáticos del género como Streets of Rage, por ejemplo.
El guión, como decimos, es un mero pretexto con el que hilar los diferentes capítulos, pero también es cierto que los personajes harán gala de una incesante verborrea que parece poco apropiada para el género, pero que funciona sorprendentemente bien en el contexto del título.
No obstante el aspecto que de verdad nos hace avanzar y progresar dentro del mundo de The End is Nigh es el del desbloqueo de habilidades. Al comenzar el videojuego con uno u otro protagonista apenas tendremos disponibles los clásicos golpeos ligero y fuerte con los que arremeter contra los enemigos, sin embargo superando los combates iremos liberando maniobras para esquivar –en caso de Rorschach- o para bloquear –en caso de Búho Nocturno- a parte de los controles de agarrar o realizar espectaculares y sangrientos combos que enriquecerán la experiencia.
Por otra parte además de la barra de salud –que se regenera sola- en la parte inferior izquierda del interfaz contaremos con el medidor de furia, gracias al cual liberaremos los ataques especiales de los personajes. Aquí, una vez más, hay diferencias entre ambos personajes puesto que con ella Rorschach, por ejemplo, puede embestir, mientras que Búho Nocturno puede lanzar una granada. En general las diferencias entre los dos héroes no son particularmente notorias, pero el usuario experimentado sabrá valorar detalles curiosos como la predilección por recoger las armas de los enemigos por parte de Rorschach o la habitual técnica de evitarlas y optar por sus propios gadgets de Búho Nocturno.
El videojuego tiene su mayor virtud jugable precisamente en la capacidad de ofrecer dos experiencias algo opuestas en función del personaje, además de estimular la posibilidad de inclinarse por un cooperativo. Éste será únicamente a pantalla dividida, sin posibilidad de emplearlo a través de Internet, pero funciona sorprendentemente bien con su sección vertical de la imagen y gracias a sus escenarios y combates especialmente preparados para este tipo de experiencia.
Gráficamente Notable
Watchmen The End is Nigh es fácilmente uno de los videojuegos más avanzados en lo visual que hemos visto desde los formatos descargables para PlayStation 3, Xbox 360 y Pc. Su cuidadísimo aspecto tridimensional es el idóneo para un juego de estas características, y la espectacular disposición de su cámara es todo un acierto que no sólo dota de espectacularidad a los combates, sino que también se revela francamente práctica y muy poco problemática.
El modelado de los personajes es brillante con unos resultados, especialmente en los protagonistas, muy poderosos. Los enemigos, por el contrario, son algo más reiterativos y acusan severos problemas de reciclaje y falta de detalle, pero el conjunto es potente. En cuanto a las animaciones sí que es fácil percibir más problemas; hay a menudo irregularidades en el encadenado de los movimientos, y algunas acciones especiales son francamente defectuosas.
Los escenarios, por otro lado, son también de un aspecto muy cuidado, con el estilo lúgubre y oscuro que éstos destilaban en el cómic. El trabajo de iluminación es impresionante, y contribuye a crear la atmósfera Watchmen que tan bien recoge el título.
Sin embargo lo que más destaca de la presentación visual del videojuego es el empleo de la estética directamente recogida del cómic para las cinemáticas. Éstas, con aspecto de viñetas y “bocadillos” para el texto, nos narran de forma inmejorable los hechos que van a acaecer; una forma prodigiosa de presentar cada nivel a idéntica imagen y semejanza de la novela gráfica.
El aspecto sonoro está tan cuidado como el visual. La banda sonora es algo escasa pero inspirada y adecuada, y el videojuego llega con textos en español pero voces en inglés aunque tiene como contraprestación positiva el trabajo en el doblaje de los actores de la película poniendo las voces a los personajes del videojuego.
The End is Nigh ocupa cerca de giga y medio y cuesta 17.99 euros o 1.600 Microsoft Points si lo adquirimos para Xbox 360. En la edición para PlayStation 3 el título incluye 12 Trofeos -7 de bronce, 4 de plata y 1 de oro-, mientras que en la de la consola de Microsoft ofrece 200 puntos para el GamerScore del usuario.
The End is Nigh es un buen comienzo para la saga Watchmen en los videojuegos, aunque de cara al futuro hay que exigirle más. Un plus en variedad e inteligencia de los enemigos se antoja necesario, y la presencia de puzzles o rompecabezas para dotar de variedad a la experiencia necesita de un trabajo más profundo. El título queda, sin embargo, como un agradable, pero breve, Hack and Slash con el que pasar un rato ameno aporreando los botones.
