Sigilosos, inteligentes y letales. Los ninjas de Acquire llegan entre sombras a Wii para convertir a sus usuarios en auténticos expertos del arte ninjutsu. Actúa como un auténtico guerrero del Japón feudal estudiando a tu enemigo, fusionándote con la naturaleza y atacando en el momento preciso. Para el buen ninja, no hay acción sin reflexión.
Una espectacular presentación nos muestra los sueños que martirizan al señor del clan Goda. En sus tierras hay luchas, traiciones y secuestros , y para acabar con todo esto nuestro señor prefiere actuar de forma silenciosa: localizando a los impulsores y sin que todo acabe en un baño de sangre. Nuestra primera misión, que nos sirve de tutorial, nos lleva a manejar al ninja Rikimaru con el objetivo de localizar y acabar con un mercader que se está excediendo tanto en beneficios como en el tipo de mercancía que compra y vende: jóvenes esclavas en este caso. Pasado este trámite contemplaremos asombrados como una supuesta vidente que iba a aconsejar al señor, acaba secuestrando a su hija. Mientras Ayame, el otro personaje que podemos controlar va tras ellas, Rikimaru tendrá que seguir investigando los extraños sucesos que ocurren en nuestras tierras.
Si bien el argumento parece que va a desembocar en un frenético juego de acción, no os engañéis, en esta ocasión regresamos al verdadero estilo Ninja, siendo el sigilo y discreción nuestras máximas al más puro estilo Splinter Cell o Metal Gear en ciertas ocasiones, procurando evitar siempre el enfrentamiento cara a cara. Cada misión, cada punto de control mejor dicho, se convierte en una especie de puzzle en el que estudiar el escenario y sus objetos, los movimientos de los enemigos y, especialmente, las sombras, que resultarán vitales para actuar en el instante preciso y asegurarnos la máxima eficacia.
El ojo de la mente- la visión de un ninja
Para ello tendremos una herramienta imprescindible: el ojo de la mente. Al pulsar el botón triangulo y gracias a los poderes extrasensoriales de los ninjas, podremos ver las miradas de nuestros enemigos, las zonas con mayor o menor visión, y también los objetos repartidos por el escenario, utilizando todos estos datos para elaborar nuestra estrategia.
Aun así hay que reconocer que el principio del juego es bastante lento, ya que únicamente dispondremos de nuestras manos, que tampoco son poco, para eliminar a unos enfurecidos enemigos. Poco a poco aprenderemos a manejar shurikens, dagas y katanas que, eso sí, siempre tendrán que ser utilizadas lo menos posible. El nivel de agudeza de nuestros enemigos dependerá del nivel de dificultad escogido -fácil, normal o difícil-, obligándonos a un grado de perfección casi milimétrico si escogemos el modo difícil, y a constantes repeticiones.
Rikimaru y Ayame – dos formas de sentir
Nuestros ninjas Rikimaru y Ayame pueden ocultarse en las sombras del escenario, pegarse a las paredes, asomarse por las esquinas, subirse a vigas, escalar muros, nadar bajo el agua, sumergirse hasta que llegue justo el momento de emerger, moverse entre arbustos, esconderse dentro de vasijas, columpiarse en ramas de árboles, recoger cuerpos muertos para ocultarlos o usarlos de reclamo, apagar antorchas para crear un ambiente de penumbra o acabar con los enemigos de múltiples maneras; todo ello pulsando siempre la combinación correcta -bastante sencillas por cierto-, de teclas que se nos van indicando en pantalla.
Los objetos que encontremos por el escenario son variados, originales e imprescindibles, y de nuestro ingenio y capacidad de observación dependerá el buen uso que demos de ellos, siendo indispensables en muchos momentos.
Las ejecuciones por sorpresa son simplemente sensacionales y ponen los pelos de punta, pudiendo escoger la forma de acabar con el enemigo. En algunas ocasiones, cuando seamos descubiertos algunos enemigos desenvainarán su espada para atacarnos brindamos pequeños momentos de acción ante los que deberemos intuir primero la dirección de sus golpes para defendernos y lanzar después nuestro ataque con un sencillo minijuego. Estos momentos de acción, bastante gratificantes por cierto, son más bien escasos a lo largo del juego, primando por lo general una vertiente más táctica.
Tras finalizar cada misión tanto el tiempo empleado, las muertes conseguidas como los reintentos necesitados, serán los tres factores que se usarán para calificar nuestra actuación con unos rangos que van desde un ninja principiante hasta uno maestro.
Aparte del modo Historia compuestro por diez fases bastante largas, Thenchu Shadow Assassins incluye el modo Misiones. Estas misiones son bastante cortas en su duración y de distinta dificultad, y se irán desbloqueando según progresemos en la historia hasta llegar a un total de 50. Su objetivo es incidir en algunas de las técnicas ninjutsu de nuestros protagonistas. La utilización de las sombras, las ejecuciones "hissatsu" o el acertado equilibrio entre inteligencia y acción se convierten en los elementos recurrentes de esta opción de juego.
Oscuridad y encanto ninja
La recreación del entorno es simplemente fantástica, contando con unos exteriores que nos trasladan a un Japón feudal de edificaciones características, pasando por unos interiores perfectamente caracterizados con sus patios y jardines, todos impregnados por la oscuridad en que se desarrolla la trama e influenciados por las pocas antorchas que establecen la separación entre lo que nos puede delatar y lo que nos puede ayudar a pasar desapercibidos, y que siempre podremos apagar con el instrumento adecuado en cada caso.
El detalle de los adversarios es igualmente bueno, con impresionantes animaciones y constantes secuencias creadas con el mismo motor del juego que nos mostrarán tanto ejecuciones como posibles pistas.
Al mismo excelente nivel y como en el primer título de la saga ya destacábamos se encuentra su banda sonora; sobrecogedora en la presentación, y adornando con múltiples acordes de violín toda la acción y que, junto a las voces de personajes (en inglés aunque con subtítulos en castellano), crean unos momentos de excelente tensión.
Sigilo y estudio definen por encima de la acción pura a esta nueva entrega de la saga Tenchu. Una oportunidad fantástica para experimentar la vida de un clan ninja en una situación de peligro. Aunque el juego puede pecar de cierta linealidad y repetición, su fantástico entorno y un argumento interesante visto desde dos personajes muy distintos lo hacen muy recomendable. Puro arte ninjutsu que disfrutar en cualquier lugar y momento gracias a nuestra PSP.
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