Es indudable que el RPG de Larian Studios basado en la quinta edición de Dragones y Mazmorras es uno de los grandes éxitos del año en el mundo del videojuego. Con más de 810.000 jugadores simultáneos durante este pasado domingo en Steam, Baldur's Gate 3 está conquistando a la comunidad de amantes de los juegos de rol... Y aún falta que salga en consolas. Pero lo más curioso de todo esto es que desde hace 3 años hemos podido jugar a un extenso acceso anticipado que abarca todo el primer acto del título.
Nuestro compañero Alberto ha escrito sus impresiones tras 20 horas de juego con la versión final de Baldur's Gate 3, y yo mismo he jugado en torno a 22. Es un tiempo más que suficiente como para que ambos tengamos claro que es un videojuego repleto de buenas decisiones, tanto jugables como narrativas. Más allá del meme del oso, hay muchas historias y misiones realmente destacables.
Pero lo que no me puedo quitar de la cabeza desde que empecé a jugar, es que una de las claves del título de Larian está precisamente al principio y a la vista de todo el mundo desde hace casi 3 años a causa de su acceso anticipado. Es cierto que se han hecho cambios a la zona del tutorial, concretamente se ha reducido la duración del mismo, y acelerado para que entremos antes en materia... Pero no hablo de eso.
Se trata de un detalle de la historia, o más bien una clave narrativa de cómo quiere contarla el estudio belga. Me refiero al principio del juego, lo que sucede justo después de crear a nuestro personaje (o elegir a alguno de los originales) y a nuestro guardián. Y es que es una decisión muy inteligente.
Un arranque genial para una historia de fantasía
Mi primera experiencia con un CRPG basado en Dragones y Mazmorras fue hace ya casi 20 años, con Neverwinter Nights 2. Como en tantos otros juegos de rol fantástico, el inicio nos presenta un idílico pueblo, un joven con muchas aspiraciones y una historia que le coloca como el elegido para resolver la papeleta. Y tras este, es fácil detectar otros juegos han parecido regodearse en su carácter fantástico para comenzar de forma tópica, típica y casi hasta tediosa. "Desde hace miles de años, elfos y enanos conviven en una frágil paz que bla bla bla..", ya sabéis.
Baldur's Gate 3 toma una decisión muy inteligente basada en dos pilares. El primero es plantear un arranque in media res, con la acción ya avanzada. No reinventan la rueda aquí, pero sí que optan por algo mucho más explícito y que consigue que el jugador se haga preguntas sobre qué carajo está sucediendo, así como deleitarse con una espectacular cinemática.
Pero nada de esto funcionaría igual si no se tratara de los Azotamentes y su guerra con los gith. Los monstruos de los tentáculos son temibles, y por eso es muy complicado encontrar historias de D&D que nos hagan vernos las caras contra ellos en el inicio. De esta forma, Baldur's Gate 3 nos pone al borde de la silla del PC en apenas 5 minutos.
No se queda aquí el asunto, ya que el principal motor de la historia, que no deja de ser la infección parasitaria del renacuajo azotamentes, funciona como un tiro. No necesitas comprender dónde está Puerta de Baldur, los problemas de los goblin en su día a día o qué pasa con los arpistas durante el desarrollo de esta historia; de hecho no hace falta ni conocer lo sucedido en los dos primeros juegos.
Simplemente se nos plantea un problema muy evidente como tener un alien en el cerebro, que varios personajes más están en esta situación y que hay que trabajar desde ya mismo en resolver el entuerto. Es directo, entendible sin tener en cuenta tu conocimiento de las Tierras Olvidadas y un vehículo para la historia potente.
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En 3DJuegos | Por qué en Baldur's Gate 3 solo puedes llegar a nivel 12 cuando en D&D el máximo es 20
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