Para los jóvenes que terminan ahora la selectividad y se encaran hacia la universidad, o incluso a quienes salen de ella y buscan introducirse en el mercado laboral, la incertidumbre sobre qué ocurrirá con todos esos trabajos que penden de un hilo por culpa de la inteligencia artificial es máxima. Para Reid Hoffman, cofundador de LinkedIn, cualquier colección de buenas palabras que se haga sobre ese inevitable futuro "es como ponerle una tirita a una herida de bala".
Las postura de Hoffman pasa por ser lo más claro y tajante posible, pero no necesariamente virando hacia la postura apocalíptica que llevamos arrastrando desde que empezamos a verle las orejas al lobo: "Sí, la gente subestima el impacto de la IA, pero inducir pánico sólo sirve a los titulares, no a la planificación inteligente de carreras". Para el fundador de LinkedIn, la clave está en entender cómo los jóvenes de la Generación Z pueden subirse a la ola en vez de simplemente esperar a que se les eche encima.
El salvavidas digital de la Generación Z
En un artículo de opinión recogido en The San Francisco Standard, Hoffman apunta que los jóvenes de la Generación Z deberían acordarse de toda la gente que se sumó de forma creativa a YouTube, Instagram o Twitter cuando se democratizaron plataformas con perfiles profesionales que antes parecían limitados a unos pocos. Según comenta, las dos opciones que presenta la IA pasan por intentar blindar tu carrera y todo lo aprendido de forma inútil o, con una perspectiva completamente distinta, aprovecharla en tu beneficio.
Para Hoffman, el futuro pasa por entender que la unidad de producción básica del mañana será la colaboración entre persona y agente de la IA, que incluso estando en pañales ya nos permite detectar nichos que nacen a la misma velocidad que se van cerrando otros, y que la necesidad de aprender a convivir con la inteligencia artificial será vital porque, por mucho que las máquinas escriban o recojan datos, la necesidad creativa de dar sentido a esos datos o aportar alma a esas ideas siempre va a recaer en nuestro lado.
Cree que realmente hay que meterle miedo a los jóvenes de la Generación Z, pero no para cerrarles caminos, sino para hacerles conscientes de la sangría laboral que se nos viene encima y cómo deben estar preparados para evitarla: "Define tu carrera no por lo que la IA hace obsoleto, sino por lo que eliges construir con ella".
Imagen | MIT Media Lab
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