José A. Mateo Albuerne
Jefe de ActualidadLa Burkholderia pseudomallei es una bacteria que no se transmite entre personas y que además suele vivir en el Sudeste Asiático y el norte de Australia. Pues en un lugar tan lejano de ahí como es el estado norteamericano de Georgia se han producido cuatro casos, y además con un lapso de tiempo muy grande entre ellos. Dos de ellos tuvieron lugar en los años ochenta, y otros dos hace un año. Y todos ellos sucedieron en el mismo condado.
Eso es lo que han estudiado en un reciente estudio publicado en el Emerging Infectious Diseases. El Departamento de Salud Pública de Georgia repasa estos casos de melioidosis, que es como se llama la enfermedad derivada de esta infección, y aporta datos que explican cómo pudo suceder. Algo especialmente interesante dado que en los cuatro casos se descartan desde el principio enfermedades contraídas tras viajes a zonas donde existe esta bacteria.
Se trata de una enfermedad bastante seria, ya que tiene tasas de mortalidad de más del 40% sin tratamiento, y un 10% con detección temprana y cuidados hospitalarios. Eso sí, la enfermedad no siempre se desarrolla a partir del contacto con la bacteria en todos los humanos, aunque hablan de que factores de riesgo como diabetes (que reconocen habitual en el sureste de Estados Unidos), ayudan a este hecho.
Las dos muertes registradas tuvieron lugar en 1983, 1989, mientras que estos dos casos recientes sucedieron en septiembre de 2024. Y la clave, en al menos estos dos y otro del pasado está en la meteorología. Así lo explican: "El 26 de septiembre de 2024, el huracán Helene, de categoría 4, tocó tierra en Georgia, Estados Unidos, provocando fuertes lluvias, inundaciones y vientos que alcanzaron los 160 km/h. El 9 de octubre, los hemocultivos de dos pacientes de Georgia dieron positivo presuntivo para B. pseudomallei. El Departamento de Salud Pública de Georgia descubrió que los pacientes compartían un lugar de trabajo común en el que estaban expuestos al barro, el polvo, el viento y 25 centímetros de lluvia".
En el caso de 1983 no encontraron indicios de huracán, pero sí para el de 1989. En septiembre de ese año, el huracán Hugo azotó esta zona concreta de Georgia donde vivía el paciente, llegando a más de 10 centímetros de lluvia. En ambos casos se trataba de veteranos que estuvieron destinados en zonas donde la bacteria podría existir, pero eso sucedió décadas antes de las muertes.
Han tenido más casos en Estados Unidos, destacando la oleada de cuatro sucedidos en Georgia, Kansas, Minnesota y Texas en 2021. Eso sí, ahí no había huracán, y fue a causa de un spray de aromaterapia que se vendió en el conocido centro comercial Walmart.
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