Son muchas las marcas que compiten por el jugoso mercado de la gama media de smartphones, pero pocas son tan reconocibles este 2022 como lo es Honor con su nueva serie de terminales. De entre ellos, hoy traemos a su buque insignia en la gama media para ponerlo a prueba. Vamos a analizar el Honor 70, un terminal que quiere destacar en diseño, cámara y prestaciones difíciles de encontrar en su gama.
Para lograr este cometido, la marca asiática ha puesto toda la carne en el asador. SoC propio, dos módulos para su cámara, pantalla curva de alto refresco, un diseño heredado del fantástico Huawei P50 y, a diferencia de este último, Android con soporte completo por parte de Google. Esas son sólo algunas de sus características. ¿Es suficiente para hacer frente a uno de los mercados más competitivos del sector? Os lo contamos.
Diseño del Honor 70: fenomenal con unas raíces muy marcadas
Como hemos dicho más arriba, el diseño del Honor 70 es uno de sus puntos diferenciadores dentro de su gama. Buena parte de los esfuerzos de Honor con sus nuevos terminales buscan transmitir una sensación premium en una gama donde la mayoría de las marcas están demasiado ocupadas en sus modelos estrella como para preocuparse.
El cómo consiguen esto es adoptando un curioso conservacionismo. Y es que la nueve serie de Honor toma muchos de los elementos que definían a los terminales de gama alta hace unos años, como las pantallas curvas muy marcadas, los marcos finos, o los acabados cromados. Claro que esto tiene el importante inconveniente de que el modelo se sienta "desfasado" en cuanto a lenguaje de diseño se refiere.
Dicho esto, con el acabado del modelo cedido por Honor, el modelo Crystal Silver, estos pensamientos se disipan ligeramente gracias a su llamativa parte trasera, marcada por un curioso patrón en diamantes que recuerdan rápidamente a la clásica bola de discoteca. Sin embargo, no es el caso de todos los modelos; lo habitual es encontrar el Honor 70 en verde esmeralda o negro brillante, acabados con los que la trasera destaca menos.
Aún con todo, creo que es importante señalar que, en mi caso, en cuanto agarré el terminal estos pensamientos desaparecieron. El Honor 70 se siente firme en mano aún a pesar de su tamaño alargado, y sus materiales transmiten buenas sensaciones desde que comenzamos a usar el dispositivo. Y consigue esto marcando, a su vez, un elemento distintivo en su parte trasera, en forma de su pareja de módulos para la cámara, separados de forma clara en dos pequeñas islas.
Cámara del Honor 70: las protagonistas indiscretas del smartphone
Uno de los elementos más interesantes del Honor 70 es su sistema de cámaras, protagonizado por la pareja de la parte trasera. Estéticamente, esta propuesta llama la atención. Ahora estamos acostumbrados a encontrar aglomerados todos los sensores en una única isleta, pero no es lo más llamativo de la cámara del terminal.
Las fotografías con el Honor 70 pueden ser excelentes con la iluminación adecuada
Lo más interesante de la cámara del Honor 70 es su composición. En la parte trasera, el módulo superior contiene el sensor principal, un Sony IMX800 de 54MP con una apertura f/1.9, la primera vez que vemos esta combinación en el sensor de Sony, al que acompaña un sensor secundario de 50MP con lente de gran angular con una apertura f/2.2, y con 122° de FOV. Junto a ellos, encontramos un sensor de profundidad de 2MP, que sirve como aderezo para el sistema de cámaras trasero.
Gracias a esta combinación, junto al resto de componentes imprescindibles para nuestras cámaras, el Honor 70 presume de tomar fotografías diurnas muy solventes; incluso excelentes en un terminal de esta gama, si las tomamos con la iluminación adecuada. La ausencia de ruido, un color correcto, y un buen balance de blancos son sus puntos fuertes; no lo es tanto el rango dinámico o la nitidez de las imágenes, especialmente en escenarios con poca luz, aunque este es un pecado común para casi cualquier terminal de esta gama.
Mención especial a las fotografías marco que podemos tomar con el dispositivo usando su gran angular, donde los 50MP del sensor secundario pueden brillar con un poco de más soltura, aunque siguiendo la línea definida por su sensor principal en todo momento, tanto para los puntos fuertes, como para los débiles.
Pasando a la cámara frontal, las capturas en plano subjetivo son las más débiles del dispositivo. Con una buena iluminación podemos disfrutar de unos selfis muy bien resueltos, pero no cabe duda de que la nitidez y el rango bajan en comparación a las capturas con los módulos principales. En una nota menos negativa, sí que hemos encontrado útil la cámara frontal para material en vídeo. La tecnología de autoenfoque de Honor funciona bien en el dispositivo, y los extras dedicados a las capturas con ella dan para vlogs improvisados majos.
Un repaso global al Honor 70: pantalla, sonido, batería y experiencia de uso
Dejando atrás los componentes externos del Honor 70 podemos comenzar a hablar de aquellas piezas del dispositivo que más influyen en el uso general del terminal, comenzando por la pantalla del Honor 70, uno de los factores clave de todo smartphone que se precie.
#Da gusto usar la pantalla del Honor 70 aunque no aporte nada nuevo con respecto al resto de la serie
En el caso del dispositivo chino, esta pantalla es un panel OLED de 6.67 pulgadas con una resolución de 2400x1080 píxeles, y 120 hercios de tasa de refresco. Los más rápidos se habrán percatado de que estas especificaciones son sospechosamente similares a las del Honor 50 de la compañía, sólo varía el tamaño del panel del dispositivo. Sin embargo, no nos atrevemos a señalarlo como un problema para el dispositivo.
El panel del Honor 70 cuenta con una correcta representación del color, brillo considerable, y buena tecnología de PMW para el refresco adaptativo en escenarios con poca luz; mientras que sus 120 hercios se nos antojan más que suficientes para disfrutar de cualquier cosa que emitamos en ella con fluidez. Una buena batería de características para consumir toda clase de contenidos en el terminal asiático.
Y ahora que hablamos de baterías, en el caso de este dispositivo contamos con un módulo de 4.800 mAh, una mejora con respecto a la del Honor 50 (4.300 mAh) y similar a la que vemos en el resto de los smartphones de la gama. Esta capacidad se traduce en una autonomía de unas 27 horas para uso normal (llamadas, consultas espontáneas al dispositivo y mensajería), y a unas 16 horas de autonomía haciendo uso intensivo del navegador, reproduciendo contenidos, y haciendo uso de la cámara con asiduidad. Nada especialmente destacable, aunque mejor desempeño que los modelos de gama media de las grandes compañías.
Si pasamos a hablar de sonido, el Honor 70 nos arroja luces y sombras. Por un lado, el dispositivo cuenta con un micrófono excelente a la hora de capturar nuestra voz y repeler el sonido ambiente, tanto pegado a nuestra mejilla, como a cierta distancia usando el altavoz; este último, sin embargo, no es gran cosa fuera de este uso.
Honor ha optado por una solución mono para su altavoz, que además tiende a distorsionarse a niveles altos de volumen, haciendo de su uso algo admisible sólo en salas con poco ruido, donde no tenemos que darle más de dos tercios del volumen. Además, el dispositivo no cuenta con la conexión Jack con la que modelos de gama media como el POCO X4 GT nos ofrecen, dejándonos con su USB o unos auriculares inalámbricos como una opción para disfrutar de su, esta vez sí, interesante software de ecualización. Como decíamos, una colección de luces y sombras.
Rendimiento del Honor 70: exprimiendo las limitaciones de la gama media
Pasamos del exterior al interior del Honor 70, empezando por el software. Honor vuelve a la carga con su Magic UI, una distribución basada en Android 12 con la que la marca lleva trabajando un tiempo. En esta ocasión es la versión 6.1 de este "sabor" del SO del androide, una versión que sigue recordándonos con intensidad a la colaboración de Honor con Huawei, algo no necesariamente malo, si no te importa alejarte de Android estándar, pero tampoco quieres rechazar una interfaz limpia; además, el teléfono viene con pocas apps de terceros preinstaladas, todo un acierto.
Enfocándonos en las entrañas del dispositivo; tanto la memoria interna, como la memoria RAM del dispositivo ronda los valores habituales de la gama, con hasta 128GB de almacenamiento y 8GB de capacidad, respectivamente. Los mismos que modelos como el Xiaomi 12 Lite o el Samsung Galaxy A52S, smartphones que compiten por el mismo segmento.
Donde sí destaca más el terminal asiático es en su SoC, para el que Honor ha escogido un Snapdragon 778G+ 5G, la revisión del popular Snapdragon 778G. Este chip coloca al dispositivo chino en una posición muy cómoda dentro de la gama; tanto para labores del día a día, como para tareas más intensas, como lo es el juego móvil. De hecho, en los test sintéticos se muestra cómodo ante sus competidores directos.
Si saltamos desde los test sintéticos a las pruebas reales, nos encontraremos con un smartphone que rinde sobradamente ante algunos de los sospechosos más habituales dentro del mercado móvil. Títulos como Genshin Impact o Fortnite disfrutan de buena fluidez en el dispositivo tanto en momentos calmados, como en zonas más candentes de acción; mientras que otros títulos más livianos a nivel de procesador, pero no a nivel gráfico, como Asphalt 9 Legends. Todos ellos se ejecutan con soltura en el dispositivo y mantienen su rendimiento en sesiones medias (45-60 min) de juego.
Sin embargo, no hemos podido evitar reparar en pequeños peros, como que el dispositivo no hace uso de los 120 hercios de su pantalla a la hora de jugar, o que, debido a su chasis, las temperaturas no son nada del otro mundo en sesiones especialmente largas de juego; la mayoría de estos peros no son especialmente graves, pero nos sirven para recordar que el Honor 70 no es un terminal pensado para jugar, aunque sí es capaz de hacerlo con mucha solvencia.
Unas palabras finales: nuestras conclusiones del Honor 70
No caben dudas de que el Honor 70 es un buen smartphone de gama media. Cuenta con un set de características envidiable, capitaneado por una combinación de buena pantalla y buen sistema de cámaras que cubren con solvencia dos de las piezas más usadas en cualquier terminal.
Tampoco desfallece en campos de gran importancia como el rendimiento, con mucha soltura para uso diario, e incluso algo de potencia extra para dejar que el dispositivo se defienda en escenarios poco habituales en un smartphone de sus características, como lo es el juego en móvil.
Curiosamente, el mayor problema del Honor 70 no está en el terminal en sí, sino en su propuesta de valor. El smartphone de la marca asiática ronda los 550 euros de precio de venta recomendado en nuestro país, con rebajas de hasta 150 euros más o menos habituales.
En esa franja de precios, compite de tú a tú con todos los smartphones de su gama y año, pero queda vulnerable ante los vaivenes del mercado en modelos que compiten directamente por su segmento, como el Xiaomi 12 Lite o el Realme GT2; sí, la propuesta de Honor tiene extras que le permiten destacar incluso ante esos modelos, pero no justifican las diferencias que solemos ver en esta gama cuando se encuentra rebajada, menos aún con modelos que también destacan en algún factor clave, como el chipset en los dos ejemplos dados.
Al final, este puede parecer un final amargo para un terminal al que tanto hemos alabado a lo largo del texto, pero es la naturaleza del mercado en el que compite, y, a favor del Honor 70, en su conjunto, la propuesta del modelo de Honor se nos antoja algo más redonda que la del resto de su gama este 2022.
Ver 2 comentarios