La famosa saga de shooters de Microsoft, Halo, regresa nuevamente a los dispositivos iOS, Windows Phone y PC. Y lo hace con Spartan Strike, continuación directa del célebre twin shooter Spartan Assault. Más de lo mismo, sí, pero de notable calidad.
Mientras multitud de jugadores esperan con ansia la llegada de Halo 5: Guardians, título que aparecerá en Xbox One en exclusiva en octubre, la compañía americana pretende que esta espera sea algo más llevadera mediante la llegada de este juego diseñado tanto para sistemas iOS como también PC y Windows Phone. Hablamos de Halo: Spartan Strike, un desarrollo del experimentado equipo de Vanguard Games que, de hecho, ya nos brindaron la primera de las ediciones de esta sub-saga, Spartan Assault. Y al igual que sucedía con éste, se trata de un shooter mucho más liviano y claramente diferente del título genuino.
Antes de entrar en materia, conviene repasar ligeramente la trama. Y es que a pesar de que el argumento apenas tiene peso en esta aventura de acción, por lo menos nos permite ponernos en antecedentes.
Todo tiene lugar durante los eventos acontecidos en Halo 2. Por lo tanto somos transportados hasta el año 2552, concretamente a Nueva Mombasa, si bien durante el transcurso de las 30 misiones que incorpora el juego visitamos otra gran zona de juego que no vamos a desvelaros. Nosotros asumimos el papel de soldados Spartan mejorados, pero lejos de entrar en combate real, lo que nos propone esta obra es acudir una y otra vez a un simulador táctico de batalla en el que debemos eliminar a clones de Covenant y Prometheans continuamente. Como veis no se trata de la propuesta más atractiva de la saga, ni mucho menos, pero se hace entretenida.
Acción sin tregua
Como ya experimentamos en Spartan Assault, en esta producción volvemos a adentrarnos en un shooter que se desarrolla desde una vista isométrica, la cual nos permite divisar una vasta porción de los escenarios.
La mecánica de juego no puede ser más sencilla. Debemos avanzar por cada decorado, no demasiado extensos por cierto, acabando con todos los rivales que salen a nuestro paso. Y en muchos casos dichos rivales aparecen en oleadas a las que debemos parar a base de plomo. Por desgracia la variedad de objetivos no es el punto más destacado del título, sobre todo durante los primeros niveles, si bien más tarde la cosa mejora algo y podemos hallar algo más de diversidad general.
Para eliminar a tanto alienígena contamos con un buen arsenal que, de hecho, incluye algunas de las armas aparecidas en Halo 4, un buen aliciente. Además, tenemos la posibilidad de ir mejorando dicho arsenal a medida que ganamos experiencia… y no sólo eso, ya que también es posible subirnos a algunos vehículos y naves, como el clásico Warthog.
La duración de esta producción se extiende durante unas 3-4 horas, lo habitual dentro de este género, si bien el título ofrece otros alicientes que aumentan algo la rejugabilidad, como las calaveras que actúan como modificadores.
¿Qué echamos en falta en esta propuesta tan sencilla? Pues varios elementos. A la ya citada escasa variedad de situaciones y a la endeble trama argumental se suma la ausencia de modos de juego complementarios, en especial una opción cooperativa. Este tipo de modalidades se adaptan correctamente a estas propuestas shooter, por lo que se nos hace raro no haberla disfrutado. Y tampoco hubiera estado de más incorporar una mejor apariencia gráfica. No, no se trata de un título mediocre ni malo en este sentido, pero lo cierto es que apenas hemos notado mejora alguna en este aspecto en relación a lo mostrado en el anterior título de la franquicia. A pesar de eso, sí que es cierto que la ambientación de la saga Halo ha sido perfectamente recreada y que todo el apartado sonoro rinde a un buen nivel.
En resumen, estamos ante una secuela que ofrece exactamente lo mismo que ya mostró el juego original, Halo: Spartan Assault, si bien disfrutamos de nuevos enemigos, escenarios y armas. Disparos y pura acción en un título que no sorprende en absoluto pero que entretiene.
Acción isométrica tradicional y para un único jugador es lo que nos ofrece esta producción. Sin ser el mejor exponente de su género, queda lejos de serlo, por lo menos va mejorando a medida que avanzamos y sirve como aperitivo para lo que supondrá la esperadísima llegada de Halo 5: Guardians.
- Buena gama de armas, algunas extraídas de Halo 4
- La aventura mejora a medida que progresamos, añadiendo más variedad de situaciones
- La ambientación típica de la saga ha sido representada de manera acertada
- Es casi un calco de lo mostrado en el anterior Halo Spartan Assault
- No presenta modo cooperativo, un fallo considerable
- Técnicamente cumple, sin demasiadas pretensiones
