El erizo azul más famoso del mundo, Sonic, regresa a los dispositivos móviles. Y lo hace con la continuación de una de sus aventuras más conocidas para iOS y Android, Sonic Dash, un endless runner al que ahora se le suman nuevos personajes de SEGA.
No es la primera vez (ni será la última, eso lo podemos asegurar) que Sonic se pasa a los móviles con una de sus aventuras. Sonic Dash 2: Sonic Boom es la segunda parte del simplemente entretenido Sonic Dash que ya apareció en estos mismos formatos hace ya dos años. Y fiel a su aventura precedente, en esta obra los saltos y la velocidad se fusionan dentro de un concepto endless runner 3D llamativo visualmente y sencillo de comprender y jugar. Un género que cada vez cuenta con más seguidores, sobre todo en el sector de los títulos para sistemas móviles.
Una de sus mayores bazas es la presencia de otros personajes de Sega casi tan conocidos como Sonic. Tails, Amy y Knuckles se unen a la aventura de velocidad y plataformas que es Sonic Boom. Y a esta gama de protagonistas se añade la divertida Sticks, personaje que ya ha aparecido en otras ediciones de esta sub saga.
Como siempre ocurre en estos títulos cada uno de los protagonistas goza de ciertos atributos y habilidades exclusivas, las cuales es necesario exprimir a lo largo del juego para tratar de alcanzar la mayor puntuación posible. Pero no sólo eso…
Acción por Triplicado
Una de las características más curiosas que presenta el juego es la posibilidad de cambiar de protagonistas en ciertas bifurcaciones que aparecen en los niveles. Al comienzo sólo podemos jugar con Sonic, pero a medida que progresamos y obtenemos dinero suficiente es posible ir desbloqueando al resto. Y cuando esto sucede, tenemos la posibilidad de cambiar de uno a otro en ciertas zonas de los niveles… algo que no nos ha terminado de convencer por dos motivos diferentes.
Para empezar cuando pasamos de un personaje a otro es necesario visualizar una pantalla de menú que interrumpe el ritmo del juego, algo que a estos juegos de plataformas y velocidad no les sienta especialmente bien. Pero lo peor de todo es que apenas se nota el cambio de un personaje a otro, ya que unos y otros se comportan de una forma demasiado similar a pesar de poseer alguna que otra acción especial, lo que les quita personalidad.
En cuanto al desarrollo del juego en sí, estamos ante un endless runner sin chispa y realmente similar al vivido decenas de veces antes en otros títulos. Bajo una perspectiva en 3D debemos avanzar por escenarios infinitos repletos de trampas, enemigos y anillos que recoger, así como de unos orbes azules que nos permiten entrar en un modo "sónico" en el que avanzamos de manera más rápida mientras gozamos de invulnerabilidad. Nuestros movimientos se limitan a desplazarnos de un carril a otro (de tres posibles), saltar, rodar… y poco más. Un bagaje demasiado escaso para un título del que esperábamos más en materia jugable.
En nuestra sesión de juego, podemos aseguraros que nos ha costado mucho superar la media hora de juego seguida por su desesperante invariabilidad. La falta de profundidad es manifiesta, la jugabilidad se repite hasta límites extremos y los objetivos que nos piden alcanzar (recoger un número de anillos concreto, avanzar una cantidad de metros determinada, etc.) apenas suponen ningún aliciente especial.
Y a estos problemas jugables se añaden otros más como la escasa variedad de enemigos, ciertos “tirones" en el paso de imágenes que llegan a molestar, imprecisiones en el manejo y un diseño de niveles demasiado simple.
¿Tiene algo bueno el título? Pues más allá de la presencia de Sonic y del resto de protagonistas de Sega, se trata de un juego visualmente llamativo durante los primeros compases. Y también es cierto que los elementos de pago no resultan demasiado intrusivos para lo que suelen depararnos este tipo de producciones F2P.
La nueva aventura endless runner de Sonic nos ha dejado un gusto bastante amargo. Y es que siendo sinceros, tampoco esperábamos un juego sobresaliente ni muy conseguido, pero lo que nos hemos encontrado es un endless runner que entretiene durante los primeros minutos de juego pero que a medio plazo se torna invariable y predecible. No hay nada que destacar de este título en relación a otros juegos similares más allá de la presencia del erizo azul de Sega.
- Poder jugar con Sonic y sus amigos
- Los primeros minutos se hacen entretenidos
- Invariabilidad en el desarrollo y falta de chispa general
- El cambio de personajes entorpece el ritmo de juego
- Falta de ambición y profundidad en su mecánica de juego
- La música background no hay quien la soporte a partir de la media hora
