Acción explosiva al estilo de Quake, Doom y tantos otros shooter clásicos; frenéticos tiroteos propios de la vieja escuela aderezados con una pizca de roguelike… ¡y mucha creatividad! Porque en este brutal videojuego de disparos puedes diseñar con libertad tus propias armas de fuego. En el análisis de Mothergunship comprobarás que es una experiencia de lo más divertida.
Imagina convertir una escopeta de toda la vida en un arma capaz de disparar munición explosiva junto a minas de lava incandescente, o bien que un lanzacohetes con unos retoques aquí y allá no solo aumente el daño, sino también añada algo de electricidad y colorido, mucho colorido, gracias a un sinfín de fuegos artificiales que vomitará de forma constante con cada ráfaga que descarguemos sobre las decenas de enemigos que nos saldrán al paso. ¿Te gusta la idea? Pues esto es básicamente lo que ofrece Mothergunship, un alocado videojuego de acción en primera persona que por el frenetismo de sus tiroteos, por la intensidad de sus combates y delirante ritmo de la acción recuerda ineludiblemente a los grandes shooters del pasado; a Doom, Quake y tantos otros clásicos de la vieja escuela. La buena noticia es que esta obra de Terrible Posture Games no se conforma solo con eso; no le vale con repetir la fórmula de otros y ya está.
El gran atractivo de este videojuego que plantea su acción como si de una aventura roguelike se tratase es que da libertad para que diseñes tus propias armas. ¡Hay de todo! Rayos láser, bolas de energía, ametralladoras, sierras mecánicas, descargas eléctricas, chorros de lava, fusiles de asalto… y a todo esto puedes añadir efectos adicionales como el rebote de las balas, cargas explosivas, o un mayor índice de golpes críticos, más velocidad de disparo y un largo etcétera. La idea es genial porque partida tras partida te verás experimentando con nuevos tipos de armas, con alocadas herramientas de muerte y destrucción que te obligarán a adoptar distintas estrategias de combate en un videojuego que no da ni un segundo de respiro; que no deja de avasallar con decenas de enemigos que atacarán desde todos los frentes con rápidos movimientos cuerpo a cuerpo, pero también con disparos, misiles ¡y todo lo que tengan en su mano!
Masacre robótica
La excusa para desatar este frenesí es la más típica de todas. Unos alienígenas con apariencia robótica han invadido la Tierra. ¡Ya está! No necesitas saber mucho más para entender que tu único objetivo en Mothergunship es entrar en todas y cada una de sus naves espaciales... ¡y hacerlas estallar en mil pedazos! Una tras otra, misión tras misión, te verás combatiendo contra decenas de robots hasta alcanzar el núcleo de sus vehículos espaciales, un gran botón rojo, que los hará saltar por los aires. Así de simple, sí, pero también efectivo. Con el estilo propio de los juegos de mazmorras, en este frenético shooter cada escenario se genera de forma aleatoria modificando la distribución de las salas en las que combatiremos y, claro, también el tipo de enemigos que encontraremos en ellas. Esto ayuda a crear cierta sensación de sorpresa cada vez que te adentras en el territorio enemigo, ¡nunca sabes qué esperar!, pero en líneas generales al videojuego le falta algo más de variedad y calidad en el diseño de sus escenarios.
Al final todos son muy parecidos. Algunos destacarán por la verticalidad, o por contar con trampas en forma de cañones y peligrosas cuchillas, o bien por presentar múltiples salidas o incluso espacios con escaso margen para moverse; pero en general su diseño es bastante cuadriculado así que, transcurridos los compases iniciales de la partida, sentirás que Mothergunship tiene poco más que ofrecer en este sentido. Es una pena. Los combates son fantásticos; gracias al trepidante ritmo de la acción de este título de disparos disfrutarás de lo lindo machacando a decenas de enemigos mientras saltas de aquí para allá; mientras disparas, esquivas y corres de un lado para otro con esas sensaciones tan propias de los clásicos de la vieja escuela. Es lo mejor de un título que además te permite hacer locuras con el variopinto arsenal de armas de fuego que pone a tu disposición. Hay ciertos límites.
Uno de sus grandes atractivos es poder diseñar tus propias armas
Dado el espacio reducido del cohete que te transporta a las naves alienígenas, al inicio de cada misión debes escoger entre unas pocas armas y mejoras, ¡las que quieras de tu inventario!, para seguidamente ampliar el arsenal en las tiendas que encontrarás repartidas en las naves espaciales enemigas. Para ello tendrás que conseguir monedas, lo que en cierto modo aporta algo de estrategia a la frenética acción de Mothergunship, ya que es importante saber escoger para estar preparados ante los peligros que aguardan. Sois libres de diseñar las armas como os plazca; de usar un módulo para colocar una escopeta, lanzallamas y rayos láser en un mismo brazo, ¡así nadie escapará!, pero lo hará a costa de consumir demasiada energía, lo que limitará la cadencia de disparo. Me encanta que sea así; me gusta que el juego apueste por ese enfoque táctico dentro del frenetismo que impera en sus combates. Tanto que podemos enmarcarlo en el género de los bullet hell, esos juegos que te obligan a escapar de una tormenta de disparos que parecen ocupar toda la pantalla. En especial cuando mides tus fuerzas contra los jefazos.
Lástima que estas batallas, aún siendo espectaculares, tampoco presentan grandes diferencias con respecto a los combates básicos de Mothergunship. Sin duda es el mayor problema del título; la falta de variedad. Se echa en falta un mejor diseño de niveles y retos más dispares. Sí, hay desafíos adicionales como no recibir daño durante un tiempo determinado, o salas con trampas aleatorias que obligan a modificar levemente la forma de proceder, pero en general este loco juego de disparos muestra todas sus armas al poco de comenzar la partida, y es una pena. Además, con una historia divertida pero para nada original que ha sido traducida al español, el desenlace llega de forma abrupta, casi dejándote con la sensación de que se ha acabado de forma apresurada, sin que haya mucho más que hacer por el momento. Sus autores prometen ampliar la acción de Mothergunship con nuevos contenidos y, ya en agosto, se espera una actualización gratuita que integre un multijugador cooperativo que de seguro le sentará genial.
En lo estético Mothergunship presenta un buen acabado general aunque, artísticamente hablando, es un videojuego algo genérico. Está bien el diseño de los enemigos y el colorido de las naves en las que combatimos, pero también en este punto se echa en falta algo más de variedad y personalidad. La intensidad de los combates y los efectos especiales de las armas contribuyen a crear un espectáculo visual que consigue atrapar, y que sorprende por la fluidez con la que muestra todos estos tiroteos.
Con ese espíritu cañero de los grandes clásicos de la acción en primera persona, Mothergunship es un frenético videojuego de disparos con el que es difícil no pasar un buen rato. La intensidad de sus combates siempre anima a querer echar una partida más, y la posibilidad de diseñar tus armas contribuye a que la experiencia sea aún más divertida. Su gran problema es que, a corto plazo, se vuelve algo repetitivo; le falta variedad en el diseño de sus escenarios e igualmente, una mayor variedad de enemigos a los que enfrentarse.
- Acción de la vieja escuela. Sus combates son divertidos y espectaculares
- Combina con acierto los tiroteos con mecánicas propias de los roguelike y bullet hell
- La posibilidad de diseñar tus propias armas. ¡Puedes crear de todo!
- Se echa en falta una mayor variedad en su acción. Se vuelve repetitivo
- Le falta personalidad al diseño de sus niveles generados de forma aleatoria
- Hay que esperar unas semanas para poder disfrutar de su multijugador cooperativo
