La obra de Yoichi Takahashi regresa al mundo del videojuego con una entrega que ha querido hacer realidad el sueño de muchos aficionados: un auténtico juego de fútbol. ¿Ha cumplido con lo esperado o nos ha roto el corazón como Roberto dejando a Tsubasa en tierra? Te lo contamos en nuestro análisis de Captain Tsubasa: Rise of New Champions.
El rumbo de Captain Tsubasa en los videojuegos ha sido muy exitoso en Japón más allá de ser uno de los referentes del manga shonen deportivo (¡Aún en activo! ¿Sabíais que en el cómic, actualmente, están jugando Alemania y Japón en los cuartos de final de los Juegos Olímpicos de Madrid? Espera en semifinales al ganador España, de hecho. Larga historia). La época de Tecmo y su brillante Tecmo Theater se las ingeniaron para construir una colección estupenda de videojuegos para 8 y 16 bits, recordados aún a día de hoy y celebrados por la fanaticada de las aventuras futbolísticas de Tsubasa, Misaki, Wakabayashi y compañía. Sin embargo, todos teníamos la espinita de no tener un juego de fútbol tradicional protagonizado por los magos del balón, de ahí que la presentación de Captain Tsubasa: Rise of New Champions fuese tan celebrada por los seguidores. Tras la producción había ciertas garantías: Bandai Namco ejercía de editora de su primer juego de la saga, y tras trabajos destacables con sagas de prestigio como Naruto o Dragon Ball, todos quisimos ser optimistas con lo que se pudo ver en el primer tráiler y primeras muestras jugables del juego.
Es verdad, detrás estaba Tamsoft, creadores de, entre otros, Onechanbara Z2 Chaos, pero una entrevista con sus productores en 3DJuegos también me hizo creer en el producto: ¡Esta gente amaba con toda su alma el manga de Yoichi Takahashi! Para muestra, la decisión de reescribir el arco del mundial sub-16 de Francia para poder incluir, entre otros, nuevas selecciones o un nuevo origen para Carlos Santana (o Carlos Bara) lejos de Captain Tsubasa 2 de Famicom o el manga World Youth. ¿Ha valido con las buenas intenciones y con su amor por la serie? En muchas cosas sí, en otras no. ¿Qué nos ha parecido el nuevo videojuego de Óliver y Benji? ¿Ha estado a la altura de los tiempos de Sunsoft o ha sabido encontrar su lugar dentro del fútbol arcade? Tamsoft, manteniéndose en una poco habitual línea notable, ha mostrado luces y sombras en lo jugable en un auténtico homenaje a los personajes de Takahashi que podría haber dado más de sí, pero que ha sabido estar por encima de los adaptaciones de videojuegos anime habituales.
Moete Hero!
Es una realidad incómoda y más habitual de lo que nos gustaría, pero muchos juegos anime acaban irradiando un aura de mediocridad difícil de ocultar. No siempre se ve clara la línea que define el videojuego real del producto promocional de la serie o manga de turno, y debo reconocer que durante mis primeras horas en Captain Tsubasa: Rise of New Champions veía la producción de Tamsoft más en el territorio de aprovechar una licencia jugosa como Captain Tsubasa que la sana intención de hacer un buen videojuego de Captain Tsubasa. Cuando ya me veía invirtiendo y regresando a Captain Tsubasa: Dream Team, hubo un milagro: conecté con el juego y logré superar el modo Tsubasa para encontrarme con lo más interesante de la producción, su modo New Hero. Pero vayamos por partes... ¿Cuál fue el problema que atisbé en el inicio de mi aventura futbolística y qué me llevó a pensar en lo peor con lo nuevo de Óliver y Benji?
Jugablemente hablando arrastra algunos problemas difíciles de eludir. El peor de todos, sin duda, está en la inteligencia artificial de tus compañeros y su capacidad de aprovechar los espacios en el terreno de juego. No voy a entrar a comparar un juego anime con la saga FIFA o Pro Evolution Soccer, pero debe haber un término medio que ayude a los jugadores de uno y otro equipo a no parecer pollos sin cabeza sobre el césped. Tampoco me agrada lo torpe que son los jugadores y lo aleatorio del pase al hueco, una opción a eludir y obviar porque no siempre actúa con la solvencia que podrías esperar. El pase al hueco en ocasiones se ejecuta como un autopase y en otras como unos punterazos larguísimos inalcanzables para el jugador desmarcado. Es algo que, en el caso de darse futuras iteraciones, deben corregir.
Luego, hay una circunstancia que en tutoriales no dejan de repetir y que no parece verse representado en los partidos: el juego en solitario parece ser más óptimo que el juego en equipo, al menos en los primeras horas a los mandos del software. Aprender a regatear adecuadamente y aprovechar las mejoras obtenidas tras cada esquiva te ayudarán a superar los distintos objetivos a los que se enfrentan Tsubasa, Hyuga y compañía. Otro elemento polémico radica en los disparos a puerta y la práctica y total dependencia de acabar con la barra de resistencia del portero para acabar perforando la portería. Entiendo que era algo habitual en los RPG de Captain Tsubasa en su día, en el reciente Dream Team o juegos contemporáneos como la saga Inazuma Eleven... ¿pero no resulta desalentador pensar en lo poco gratificante que resulta jugar bien si nunca habrá recompensa hasta que acabes con la barra del rival?
Supongo que se podría haber buscado una alternativa mejor y menos simple, pero una vez aceptada la circunstancia te acostumbras y entras de lleno a los tiros especiales, los pases con capacidades únicas o los juegos de pareja. ¿Resulta divertido a pesar de no ser perfecto? Sí: aprender a ejecutar las fintas para engañar al rival y regatear a los defensas, el saber cuándo potenciar el equipo para agotar al portero o aprovechar las sinergias entre los distintos jugadores para mejorar tu equipo y llevarlo al territorio on-line ha terminado siendo mucho más satisfactorio de lo que podía atisbar en las primeras horas de juego y nada me hace más feliz. ¿Qué te encontrarás a sus mandos una vez te decidas a sumarte a las filas de la selección nipona y ganar el campeonato sub-16 de Estados Unidos?
Tsubasa yo hashire!
Los dos modos principales son el Modo Tsubasa y el Modo New Hero. El primero te pone en la saga del V3 del Nankatsu, con Tsubasa encarando su último año en secundaria antes de viajar a Brasil para ponerse a las órdenes de Roberto Hongo. Es la historia menos gratificante, pero también la más conocida y nostálgica: servirá para conocer y refrescar la historia de los distintos héroes de la selección japonesa y revivir el feudo entre Tsubasa y Hyuga en su legendaria batalla en la final del campeonato de institutos japoneses. Cuando pensaba que ya nada me sorprendería, al saltar al modo New Hero me llevé una gratísima sorpresa: sus desarrolladores se las han ingeniado para reescribir una saga mítica y mantener el interés de aficionados nuevos y veteranos de la obra de Takahashi. ¿Cómo? Cambiando con cierta lógica y buen ojo los acontecimientos originales.
Pero antes de comenzar la historia toca crear tu avatar. No, no es el mejor editor de personajes del universo, pero crear un personaje para un manga en el que los parecido entre los héroes es tan evidente (¿Sabrías diferenciar a Matsuyama, Misugi y Misaki sin ver su uniforme? No mucha gente es capaz de hacerlo) hay herramientas de sobra para crear tu futbolista. Escoge posición, habilidades y equipo para comenzar tu historia. El mundial sub-16 de Francia se ha cancelado y han llevado la copa a Estados Unidos para celebrar un nuevo torneo en el que participarán selecciones como las ya citadas para la cita gala como Alemania, Argentina, Uruguay o los propios franceses y otras nuevas como Brasil, Holanda, Senegal o la propia Estados Unidos. Ante el nuevo desafío, la Federación Japonesa de Fútbol organiza un nuevo campeonato para ejecutar su plan maestro: construir una selección capaz de batir a los grandes reyes del balompié.
Ahí entras tú. Tendrás que jugar el torneo con el Furano de Matsuyama, el Musashi de Misugi o el Toho de Hyuga y campeonar para entrar en el mundial estadounidense. ¿Qué tiene de excepcional si lo comparamos con lo visto en el manga original o las OVA de Shin Captain Tsubasa? Primero, la inclusión de nuevas selecciones y jugadores que no tuvieron participación en el arco de 1985. Segundo, la realización de nuevos cortes animados de David Production para la ocasión, mostrando el mundial sub-16 con la estética de la más reciente serie anime de Óliver y Benji. No, no esperes la invención de la rueda o cambios drásticos, pero sí nuevos elementos como para mantenerte con la sensación de estar viendo algo fresco y nuevo con tus personajes favoritos. Entretenido, funcional y con tres caminos posibles para aumentar la rejugabilidad de un modo, de hecho, sorprendentemente largo.
Tu relación con los capitanes del Musashi, Furano o Toho tendrá impacto sobre la historia del juego, pero también en los jugadores que posteriormente podrás seleccionar para tu dream team en el online, otra grata sorpresa de Captain Tsubasa: Rise of New Champions a pesar de su, en ocasiones, mejorable calidad jugable. Tendrás que acomodar tu equipo a las distintas estadísticas de cada división para hacer una selección de estrellas juveniles. Utiliza a tus jugadores favoritos y disfruta de jugadas de ensueño entre las distintas selecciones del planeta fútbol. La calidad de conexión de los primeros días, al menos en la versión analizada de PlayStation 4, ha sido más que competente, restará ver cómo avanza en los próximos días y ver la trascendencia del juego en el competitivo.
Fighting!
En lo técnico es bastante estático a la hora de narrar la historia del nuevo mundial Sub-16, sin grandes alardes visuales que salga más allá del plano y contraplano clásico que tan acostumbrados nos tienen los juegos anime. Si el software hubiese equilibrado la animación exhibida en las técnicas especiales de porteros y jugadores de campo en el resto del software estaríamos hablando de un apartado muy competente, pero es más bien humilde en lo que se ve y se juega. Eso sí, cada uno de los disparos especiales y paradas es más espectacular que la anterior: ¿Se podría mejorar el resto del producto y equlibrarlo para disfrutar de un mejor apartado técnico en una hipotética futura iteración jugable? Ojalá sea así.
Una banda sonora competente que no ha usado demasiados temas clásicos de la saga, desgraciadamente. Entiendo que la entradilla varía mucho entre los distintos países en los que se ha emitido la serie, claro, pero creo que los temas interiores son internacionales y habrían sido recibidos con alegría por parte de los aficionados. No ha sido el caso, pero la música suena a Captain Tsubasa y es lo que se le debía pedir. Lo mismo se puede decir de la interpreatación de los actores del software, compartiendo los seiyuus vistos en el anime de David Production y cumpliendo con nota en todos los frentes. Puede que la entrada en el software sea algo brusca y reluzcan más sus deficiencias que sus virtudes, pero te bastará jugar un rato hasta entrar de lleno en el videojuego y adentrarte en el mundo de los locos tiros combinados, disparos del tigre y Drive Shoots.
Insisto mucho en la posible continuación del juego porque me da la sensación que Captain Tsubasa: Rise of New Champions tiene rango de mejora, pero Tamsoft hace muchas cosas bien en su primer intento y logra crear el que es, seguramente, uno de los mejores videojuegos de Óliver y Benji nunca realizados. Cualquiera habría firmado algo así, ¿verdad? La saga da para mucho, y un hipotético Rise of New Champions 2 que narrase los acontecimientos del Mundial Juvenil y la aparición de jugadores como Aoi Shingo o Tomei Akeya daría para una campaña más que interesante. ¡Y ya está bien! Hay dos injusticias en el mundo: una es que Tsubasa fichase por el Barça y la otra que la trama de World Youth no se haya adaptado dignamente al anime nunca, ¿no sería genial que se explicase en un videojuego y no en anime?
Captain Tsubasa: Rise of New Champions se apoya en uno de los arcos más famosos del manga para mezclar nostalgia y nuevos acontecimientos en un modo historia muy satisfactorio. Logra plantar un competente modo on-line en el que crear tu propio equipo de ensueño y cuenta con escenas animadas exclusivas. ¿Sus problemas? Una jugabilidad un tanto tosca y algunas decisiones en el control no muy óptimas que podrían agotar a los jugadores menos pacientes. Espectaculares recreaciones de los tiros más icónicos del manga de Yoichi Takahashi, el juego de Tamsoft se convierte en uno de los mejores videojuegos de la dilatada saga de Óliver y Benji.
Comprar Captain Tsubasa: Rise of New Champions- Un auténtico videojuego de fútbol de Óliver y Benji
- La animación de las paradas y tiros especiales son espectaculares
- Competente y divertido modo on-line: crea tu Dream Team y gana a los contrarios
- El modo New Hero ha sabido contar una nueva historia para viejos y nuevos aficionados
- Toma algunas decisiones jugables discutibles
- El control puede ser algo torpe en ocasiones. Los pases al hueco están mal equilibrados
- Su apartado visual no brilla como en las animaciones de disparos y atajadas
