Análisis de Quantum Theory

Análisis de Quantum Theory
Facebook Twitter Flipboard E-mail

Siempre es duro suspender un videojuego, pero mucho más duro es pagar dinero por un título como Quantum Theory. El primer shooter de Tecmo es un farragoso ejercicio de masoquismo que saquea sin el más mínimo sonrojo a grandes referencias del género como Gears of War, aunque lamentablemente sin el más mínimo rastro de ingenio o talento a la hora de reproducir sus cotas de calidad.

Olía a chamuscado. El que comenzó naciendo como "el Gears of War de PlayStation 3" pasó más tarde a ser un título multiplataforma por razones que nunca llegaron a concretarse, pero lo que se mantuvo inalterable es su aspecto artístico y la referencia constante al título de Epic Games que había triunfado años atrás en la consola de Microsoft.

Lamentablemente si Tecmo acostumbra a brillar con títulos de acción en tercera persona, su primera incursión en el género shooter es un absoluto fracaso. Quantum Theory es un deprimente desastre: aburridísimo, incontrolable y con una constante obsesión por Gears of War que sólo puede calificarse de desfachatez. El estudio de Tecmo, Tecmo Koei, demuestra no estar a la altura de las circunstancias, y tras el moderadamente interesante Undead Knights para PSP, evidencia que Xbox 360 y PlayStation 3 son plataformas que le quedan muy grandes.

Teoría del Caos
Sin mayores explicaciones sobre las circunstancias que nos rodean comenzamos Quantum Theory prácticamente corriendo cuesta abajo alrededor de una torre. La estructura del edificio se vendrá abajo a nuestro alrededor, de modo que alternaremos los primeros combates con algunas carreras para evitar morir aplastados por los grandes bloques que caen de la construcción.

Poco a poco descubriremos que somos Syd, el clásico machote de músculos y torso fornido que, armado con un arsenal muy similar al de Gears of War, acaba con una suerte de enemigos que, en realidad, también tienen unos diseños muy similares a los del juego de Epic Games.

Anabolizado hasta los ojos... Así es Syd, el héroe de Quantum Theory, el clásico cuento postapocalíptico protagonizado por musculosos supersoldados futuristas.
Anabolizado hasta los ojos... Así es Syd, el héroe de Quantum Theory, el clásico cuento postapocalíptico protagonizado por musculosos supersoldados futuristas.

Introducido esto lo cierto es que el videojuego no tiene mucho más que decir sobre su argumento. Si bien el concepto de las torres vivas que nuestros dos protagonistas deben destruir -Syd y su acompañante femenino, Filena-, en un futuro postapocalíptico podría parecer al menos curioso en sus primeros compases, lo cierto es que la narrativa es tan torpe y repleta de tópicos que el posible interés que pudiéramos sentir por ésta se desvanece a enorme velocidad. Hay secuencias cinemáticas al comienzo de cada nivel y algunas intermedias, pero los diálogos son tan torpes y las situaciones tan reiterativas que hay poco destacable en este campo.

Por otra parte la relación entre nuestro protagonista y su compañera a efectos jugables queda reducida a la condición de arma arrojadiza que tiene ella para Syd. Así de sencillo y así de cómico. La utilidad de nuestra misteriosa aliada en el campo de batalla es muy básica dada la torpeza de su IA, de modo que lo mejor que podemos hacer con ella es arrojarla por los aires para que se ocupe de los enemigos desde las alturas o, por ejemplo, con sanguinarios ataques cuerpo a cuerpo que acabarán con los oponentes en un santiamén.

Los jefes finales tienen un aspecto imponente en cuanto a tamaño, pero a efectos de dificultad el reto es muy reducido. Bastará con utilizar la ayuda de nuestra compañera para superarlos con facilidad.
Los jefes finales tienen un aspecto imponente en cuanto a tamaño, pero a efectos de dificultad el reto es muy reducido. Bastará con utilizar la ayuda de nuestra compañera para superarlos con facilidad.

Acordes y Desafines
Lamentablemente la jugabilidad es uno de los apartados peor parados de Quantum Theory. Su saqueo de elementos de Gears of War ni siquiera resulta atractivo por imitación, y es que está salpicado de problemas graves de control a la hora de usar las coberturas, o de apuntado merced a unas armas con las que a menudo tendremos serios problemas para dar en el blanco.

Al igual que en Gears of War podremos cargar con tres armas: ametralladoras, escopetas, etcétera, y las simultanearemos con un ataque cuerpo a cuerpo que resultará especialmente útil. Y es que los enemigos tienen, al igual que los aliados, serios problemas con su inteligencia artificial en cualquiera de los tres niveles de dificultad por los que optemos, y a ello hay que sumar unas deficiencias de vista tremendas, puesto que podemos pasar a su lado sin que se inmuten en repetidas ocasiones. Es por ello que el combate cuerpo a cuerpo es tremendamente útil, un buen culatazo a tiempo resuelve muchos problemas.

¿En qué se traduce todo esto? En rutina y aburrimiento absolutos. De una forma tremendamente mecánica podemos pasar de una cobertura a otra e ir arrasando con nuestros torpes enemigos nivel tras nivel. Si superamos los frustrantes problemas de control que exhibe Syd, no nos será difícil dar por finiquitada la campaña individual en poco más de 6-7 horas.

De lo poco positivo que puede extraerse de Quantum Theory es lo cambiante de sus escenarios. La Torre Viviente que recorremos muta su aspecto y nos regala unos niveles muy variados.
De lo poco positivo que puede extraerse de Quantum Theory es lo cambiante de sus escenarios. La Torre Viviente que recorremos muta su aspecto y nos regala unos niveles muy variados.

Por otra parte, y a ampliar la tediosa y breve experiencia para un solo jugador que ofrece el videojuego, Quantum Theory trae consigo un modo multijugador competitivo para hasta ocho usuarios. Éste se limita a desarrollarse en seis mapas diferentes y con cuatro modos de juego bastante rutinarios. Bajo el inexistente sustantivo Ejecutador se encuentra un combate a muerte clásico, con Dead or Alive tenemos combate a muerte por equipos, con Guardián algo idéntico pero con un líder por bando que es el responsable del respawning del resto, y con Caos Controlado una serie de partidas en las que nosotros mismos impondremos las normas. Se trata, en definitiva, de una muy rutinaria experiencia multijugador que hace gala de los mismos graves problemas de control de la experiencia individual.

En cuanto a los apartados más puramente técnicos estamos hablando de los únicos que logran el aprobado en el juego. La dirección artística, a pesar de estar fuertemente reciclada de Gears of War, logra que los gráficos alcancen el grado de ser aptos; tecnológicamente es un juego que obtiene por las justas el aprobado raspado y en lo que se refiere al sonido no pasa de lo meramente competente. El título llega a nuestro país con la única traducción de sus textos, estando las voces en inglés con un nivel dramático muy discreto.

Pésimo

No recomendado

Quantum Theory

Por: El equipo de 3DJuegos
No recomendado

Demoledor. Quantum Theory recoge los peores tics y manierismos del shooter de acción en tercera persona con coberturas, y multiplica el tedio gracias a unos desafortunados controles, a un apuntado infernal y a una IA enemiga francamente mala. Un triste videojuego a evitar.

Comprar Quantum Theory
Jugadores: 1-8
Idioma: Manual en español, textos en español y voces en inglés
Duración:
Comentarios cerrados
VÍDEO ESPECIAL

12.876 visualizaciones

100 DETALLES OCULTOS de RED DEAD REDEMPTION 2

¿Qué detalles ocultos guarda Red Dead Redemption 2? En el video de hoy os presentamos más de 100 curiosidades distintas acerca de la aventura de Arthur Morgan y de John Marston que nos presentó Rockstar Games en 2018.