Un viaje, un destino y una misión. Ezio se embarca en su última aventura dentro de la serie Assassin's Creed y su eterna lucha contra los templarios, al mismo tiempo que se permite a los fieles seguidores de la serie acercarse más que nunca a la verdad. Descubrimos en un evento pre-E3, y por primera vez, cómo es la aventura que descifrará todos los secretos de Altair, Desmond y, sobre todo, la nueva protagonista del videojuego: la ciudad de Constantinopla.
"Una aventura personal". El nuevo Assassin's Creed: Revelations se muestra por fin en escena y, seguramente, sus creadores no encontraron mejores palabras para calificar lo que supone esta nueva entrega dentro de la serie de Ubisoft Montreal. Un nuevo diseño de misiones, reinventadas cinemáticas y un mayor esfuerzo a la hora de trabajar con la cámara "in-game" del juego son algunas de las características más llamativas de AC: Revelations, pero si atendemos al argumento, es donde encontramos el gran punto de inflexión dentro de la saga, ya que este capítulo va a ser el último protagonizado por Ezio (y también por Altair).
Todo en una búsqueda que arranca con el deseo de nuestro protagonista por dejar Roma con un noble fin: encontrar un artefacto muy poderoso que se esconde en la biblioteca perdida de Altair. Tan importante es ese objeto, que puede suponer el arma que decante la victoria del lado de los templarios o de los asesinos, pero para llegar hasta él se necesitan cinco llaves, suponiendo una carrera contra el reloj lograrlas todas antes de que se produzca alguna tragedia indeseable.
Principalmente, así se resume el guión de la nueva apuesta de Ubisoft para el próximo 15 de noviembre, un videojuego donde (tal y como reflejaba el tráiler mostrado a la prensa en primicia), se ve a un Ezio ya avanzado en edad -unos 52 años-, con una barba que le llega más allá de la barbilla y un aspecto -al mismo tiempo- más contundente, marcado por años de experiencia como asesino.
"Toda la verdad será revelada"
La demostración que se enseñó a los medios como primera toma de contacto con el título ha tenido lugar en el nuevo enclave de Revelations: la ciudad de Constantinopla, concretamente en el año 1511. Ezio busca la última de las cinco llaves que proclamarían la victoria de los asesinos sobre los templarios, pero cuenta con el inconveniente de que ya ha enfadado mucho a los "Janissaries" (guardias personales del sultán). Su cabeza es muy cotizada, así que decide escapar de la ciudad en una demostración guiada, aunque no lo tiene nada fácil. La urbe ha cerrado su flujo marítimo -tanto de entrada como salida-, algo que llevará a Ezio a protagonizar una espectacular huida, remarcando el potenciado carácter cinematográfico que adquiere este nuevo título.
Todo apoyado por el hecho de que el motor se nota evolucionado con respecto a anteriores entregas, algo que posibilita apreciar uno de los rangos más distintivos de esta inédita localización en la saga: el contraste arquitectónico y de ambientes. El mosaico de culturas que veremos aquí será enorme, con vestigios romanos, griegos y otomanos reflejados no solamente en la cultura, sino en el simple hecho de que la ciudad posee cuatro distritos bien diferenciados, y muchos de ellos basados en la construcción sobre madera (lo cual da una ambientación visual renovada al producto, considerando el pasado de la franquicia).
Asimismo, la calle se llena de nuevos NPC: bailarines, guitarristas, escupidores de fuego... que por cierto suponen una nueva facción dentro del grupo de aliados que podremos usar para distraer a los enemigos, tal y como lo veníamos haciendo hasta ahora. Y, de igual forma, aparecen también nuevos rivales, contra los cuales va a ser posible utilizar otra de las novedades que encierra la obra: una gran variedad de bombas.
De hecho, la recolección de ingredientes a lo largo de la aventura resulta fundamental para combinar, experimentar y finalmente obtener un extenso repertorio de explosivos que van desde los que son capaces de acabar con el enemigo, hasta aquellos que solamente los incapacitan. A este último respecto, en la "demo" tuvimos la ocasión de apreciar los efectos de una bomba de humo que (con el nuevo ojo de águila activado) nos permitía acabar con todas las hostilidades sin apenas esfuerzo.
Y es que tal vez uno de los datos más cotizados de toda la presentación fue que Ezio ha aprendido una nueva técnica: el "eagle sense", que no sólo sirve para ver en mitad del humo provocado por un explosivo. En efecto, otra gran utilidad de esta habilidad es permitirnos predecir la conducta (o patrón de movimiento) de cada enemigo para estudiarlo y actuar en consecuencia, abriendo nuevos caminos jugables. Además, al mismo tiempo, también permite detectar traidores dentro de un círculo de personas, y sólo en función al latido de sus corazones, los cuales enseguida detectaremos que van más rápido de lo normal.
Avanzando en la demo, y una vez alertada la guardia local, Alexandre Amancio (Creative Director) nos mostró el nuevo juguete de Ezio, el "hookblade", que le permitió moverse desde un tejado hasta otro con sólo usar un cable tendido a modo de teleférico. En declaraciones de los responsables de Ubisoft Montreal, "esto aumenta la velocidad de maniobra en torno a un 25-30% en la aventura, además de que nos permite realizar un ataque aéreo con facilidad, puesto que podemos desprendernos del cable en cualquier momento".
Tampoco podemos olvidar que todo lo aprendido en AC: La Hermandad no se pierde sin más, sino que la capacidad para pedir auxilio a otros asesinos regresa, eso sí, con novedades. Por ejemplo, ahora existirán más opciones para personalizarlos (escoger arma o clase), a la vez que se añaden nuevas misiones para ellos -dependiendo de su nivel- e incluso inéditas tareas de reclutamiento para completar.
Todo esto sirvió de mucho para llegar al final de la demostración, realmente épica al mostrar a un Ezio muy poderoso, capaz de desatar el caos en una ciudad tan importante como Constantinopla. Y es que el asesino, se hizo -en medio de su huida por el puerto- con una especie de lanzallamas (se dice que realmente existió) con la fuerza de acabar con todos los navíos que estaban a su alrededor, pasando la ciudad automáticamente de un tono plácido a otro mucho más rojizo, con fuego por doquier, partículas de ceniza en suspensión y un clima que se asemejaba mucho a lo que se conoce como infierno.
La estampa y, sobre todo, la transformación del decorado en pocos segundos, entusiasmó a los presentes, justo antes de que Ezio pusiera en práctica su carácter puramente acrobático, navegando entre el caos de barcos, pasando por su mástiles y subiendo a plataformas mientras experimentaba una mezcla de viejas ejecuciones (doble asesinato desde el aire) con otras nuevas que Ubisoft irá desvelando poco a poco.
Y la demostración ya no dio para más. Un error de sincronización en el Animus 2.03 nos alejó de la acción, pero no sin que los responsables del estudio canadiense nos arrojaran nuevos datos sobre el papel de Desmond en Revelations: "Será un papel mucho más importante. No os podemos aclarar mucho más, pero realizaremos una profunda introspección en su pasado para intentar dar nuevas respuestas a los fans. Y lo haremos, seguramente, con un enfoque más orientado hacia los puzles, dentro de lo que llamamos la Black Room". Pero para conocer más detalles al respecto, y sobre la marcada relación Ezio-Altair en este nuevo producto, aparte de su nuevo multijugador, aún tendremos que esperar a que avance un poco más el E3.