Una de las entregas más exitosas de la venerada saga de aventuras de Capcom, Monster Hunter World, recibirá nuevo contenido a principios de septiembre. Nos adentramos en la nueva expansión que llevará por nombre Iceborne.
Ha sido uno de los videojuegos más populares de la historia de Capcom… y el más vendido (más de 12 millones y subiendo), lo cual no es moco de pavo teniendo en cuenta el historial de esta gran compañía nipona. Monster Hunter: World supo cómo cautivar a un gran número de nuevos usuarios aportando nuevas características y cambios de enjundia pero, a su vez, manteniendo los cimientos de lo que siempre nos había ofrecido dicha franquicia a lo largo de los años. Estaba cantado que Capcom iba a seguir respaldando a su producción más preciada con nuevo contenido durante mucho tiempo, si bien el lanzamiento de su gran expansión se ha hecho esperar durante más de un año y medio.
Afortunadamente y por lo que he podido comprobar recientemente en una toma de contacto de unas cuatro horas con Monster Hunter World: Iceborne, que así es como va a denominarse dicha expansión, la espera va a merecer la pena. Lejos de ofrecer un DLC repleto de elementos de relleno y no demasiadas novedades destacadas, en la expansión Iceborne los jugadores van a encontrarse con un buen número de nuevas posibilidades con las que van a poder disfrutar durante una ingente cantidad de horas.
MHW Iceborne, de caza en una isla nevada
Arroyo de Escarcha. Quedaos con este nombre porque así es como va a denominarse la nueva localización a la que podremos viajar en esta ampliación de Monster Hunter: World, un lugar que según parece sólo será accesible para quienes hayan superado el juego principal y hayan alcanzado el rango 16 como cazadores. Dejando atrás el Nuevo Mundo, el escenario principal que acogió a la aventura original, en esta ocasión podremos viajar hasta una nueva isla que estará situada fuera de los confines de dicho entorno.
Ya podéis iros olvidando de los escenarios paradisíacos y exóticos que formaban parte de las distintas áreas del Nuevo Mundo a las que podíamos ir viajando antaño. El contraste que supondrá Arroyo de Escarcha será muy marcado dado que las nuevas tierras estarán, al menos por lo que he podido comprobar en la sesión de juego, totalmente cubiertas por la nieve y el hielo. Hasta tal punto es así que los cazadores tendrán que cambiarse de ropa nada más poner un pie en dicho territorio para no morir congelados, y ya podéis iros preparando para recoger una buena cantidad de guindillas y demás materiales similares para poder preparar brebajes que permitan a los protagonistas entrar en calor rápidamente para combatir con mayores garantías tan adversas condiciones climatológicas.
El contraste nevado de la nueva localización es tremendo
Todavía es pronto para calcular de manera correcta las dimensiones que albergará este nuevo mapeado pero, por lo que pude comprobar, desde luego no va a ser un decorado reducido… más bien lo contrario. De hecho los desarrolladores ya se han pronunciado al respecto y aseguran que va a ser el entorno más amplio de todo el juego, así que ya podéis haceros una idea de su extensión.
Un nuevo mapeado de características y climatología distintos trae siempre consigo un ecosistema diferente. Y ya sabéis lo que eso significa: nuevos monstruos a los que dar caza. El primero que nos dará la bienvenida será el Beotodus, una criatura a la que tardé más de media hora en doblegar… después de que acabara conmigo previamente, todo hay que decirlo. Esta bestia se encontraba como pez (o, mejor dicho, tiburón) en el agua bajo la espesa nieve y varios de sus ataques los realizaba partiendo desde dicha posición. Su velocidad de movimientos era bastante elevada y, como ya os he comentado, su resistencia también era tremenda.
Un duro rival al que se unirá una colección de nuevas bestias muy interesante, la cual estará liderada por un dragón anciano Velkhana que me quedé con las ganas de conocer. Seguro que los cazadores más expertos están deseando enfrentarse a los Odogaron Ébano, Banbaro, Glavenus o Anjanatah Fulgúreo de turno así como a otros adversarios inéditos que también formarán parte del bestiario de este juego. Pero no sólo eso puesto que algunas de las bestias ya conocidas serán capaces de efectuar nuevos ataques y movimientos.
Como es lógico, el Gremio de Cazadores tendrá que adaptarse a estas nuevas condiciones del terreno, clima y demás cambios que vendrán dados por el nuevo mapeado. Y por eso mismo serán capaces de utilizar nuevas herramientas, como por ejemplo la Garra Retráctil. Dicho gadget será adherido a sus Eslingas (las cuales esta vez podremos usar con cualquier arma que hayamos desenfundado) y nos permitirá subirnos a los monstruos de turno desde una distancia relativamente cercana a ellos. Y lo más importante de todo es que podremos hacerlo a cualquiera de ellas, incluyendo a aquellas que sean capaces de volar, dando como resultado una nueva mecánica que puede dar muchísimo juego. Junto a esto también será posible usar el Tiro Proyector, una descarga de la munición de Eslinga que será capaz de causar bastante daño a los monstruos e incluso aturdirlos.
Por el contrario y, por lo que parece, no podremos empuñar armas nuevas, así que seguiremos contando con las 14 ya conocidas. Pero sí que es verdad que todas ellas gozarán de mejoras y ajustes, por lo que será posible efectuar una nueva remesa de combos y ataques, algunos de ellos bastante más eficientes. En cambio, sí que podremos crear nuevo equipo y usar nuevos objetos para el crafteo, si bien durante mi toma de contacto no pude acceder a dicha característica.
Seguro que os estáis preguntando qué pasará con la nueva historia en Monster Hunter World: Iceborne. Bien, pues sin querer desvelar nada para no realizar spoilers innecesarios, sí que os puedo comentar que ésta tendrá lugar justamente después de lo ocurrido al final de la aventura original y que en ella adquirirá cierto protagonismo las Legianas, las cuales emigrarán hacia el citado nuevo mapeado de Arroyo de Escarcha. Una nueva trama que, al menos por lo que pude comprobar, tenía buena pinta y lógicamente volverá a estar completamente respaldada por multitud de diálogos doblados a nuestro idioma.
No son pocas, como veis, las novedades que van a ser integradas en esta esperada expansión del gran Monster Hunter: World, muchas de ellas bastante significativas. Un mundo nuevo enorme y totalmente diferente (que además gozará de unos gráficos sensacionales), bestias inéditas a las que enfrentarnos, nuevas herramientas para la caza, un nuevo modo Visión que nos permitirá tomar capturas del juego más bonitas, funciones de nuevo cuño para las brigadas y demás características totalmente inéditas aportarán nuevos aires a esta gran obra de Capcom.
Muchas horas de juego os aguardan en Iceborne, que estará disponible en PS4 y Xbox One a partir del próximo 6 de septiembre (en PC lo hará unos meses más tarde) tanto de manera independiente como, también, en su versión Master Edition que incluirá tanto el juego original como dicha expansión. Como muchos de vosotros, estoy deseando profundizar más en todo lo que nos ofrecerá esta nueva localización gélida.