Análisis de Bayonetta

El creador de Devil May Cry descubre su lado más femenino, sensual, celestial y visceral en PlayStation 3 con Bayonetta, videojuego con el que Platinum Games aporta su visión sobre el género de los "hack 'n slash". Un embrujo jugable frenético, una coreografía perfecta de golpes y un exquisito cóctel de sensaciones con cuatro pistolas disparando a la vez, se juntan en una matanza de ángeles con el objetivo de abrir "los Ojos del Mundo".

"Platino, apreciado por su alta calidad, es un metal que conserva siempre su brillo". Esta es la simple definición que hace de sí misma la compañía japonesa Platinum Games, nacida desde las cenizas de Clover Studio (autores de Okami) en 2007 para demostrar al mundo del videojuego cómo crear productos de alta calidad. Y la verdad es que, hasta ahora, no han defraudado en absoluto.

La empresa fundada por Hideki Kamiya, Atsushi Inaba y Shinji Mikami ha servido, además, para dar el toque Triple-A que le faltaban a los estudios asociados de SEGA, la cual tiene aquí su pasaporte hacia ese "próximo nivel" que tanto anunciaba por televisión en los años 90.

Con MadWorld ya descubrimos de lo que era capaz este conjunto de auténticos obsesos por sorprender a los usuarios con originalidad, talento y jugabilidad en estado puro. Ahora, unos meses después, vuelven con su propuesta más ambiciosa, Bayonetta, un juego de acción "hack 'n slash" expuesto a los abismos del peligroso hype tanto por Famitsu (gracias a una puntuación perfecta) como por otros medios especializados. El título se nos ha presentado como "la verdadera evolución de Devil May Cry", pero en nuestra opinión es mucho más que eso. Olvidaros del pasado, será mejor. Bayonetta es un paso más allá del género, una auténtica explosión de diversión donde el creador de Dante descubre su lado más femenino, el de una bruja matando ángeles al ritmo del "Fly Me to the Moon" de Frank Sinatra.

Fly Me to the Moon

Con casi tres años de desarrollo, el proyecto Bayonetta ha sido uno de los más ambiciosos del creador de Devil May Cry. Una continua construcción y deconstrucción de ideas han ido forjando lo que es hoy un videojuego de acción sólido, con una jugabilidad impecable, un ritmo demoledor y una protagonista de gran personalidad.

Mari Shimazaki (diseñadora de personajes) tardó un año en dar con el diseño definitivo de Bayonetta, pero la espera mereció la pena. La femenina y sexy bruja de Umbra que utiliza su propio pelo como traje, responde a uno de los mejores diseños que ha recibido la industria, un auténtico ejemplo de cómo ofrecer una alternativa seria a la exagerada masculinidad de Kratos, Dante y compañía con una perfecta coreografía de puños y patadas que acaban con un provocador beso al aire. Acabaréis enamorándoos de Bayonetta y no por su edad precisamente (tiene más de 500 años), sino por la emocionante historia que la rodea.

Hubo un tiempo en que las brujas (seres de la oscuridad) y los sabios (seres de la luz) vivían en armonía. El infierno, el paraíso y el mundo de los hombres estaban en orden, todo hasta que se desató la furia entre estos clanes, provocando una guerra que terminó con la cruenta caza de brujas que azotó Europa durante la Edad Media. Todos murieron, excepto Bayonetta, que despierta después de 500 años con vagos recuerdos sobre su pasado. No sabe por qué está allí, pero las voces en su cabeza le guiarán hasta completar la profecía y abrir "los Ojos del Mundo" mientras que acaba con todos los ángeles que se interpongan en su camino.

And let me play among the stars

El resultado es una obra jugable barroca no sólo a nivel de temática, sino también en términos jugables, gracias a un estilo directo, basado en la simple premisa de recorrer linealmente escenarios desde un punto A hasta otro B sin que se nos agote la barra de vida por el camino.

Para conseguirlo, Bayonetta dispone de la fuerza de sus brazos, de sus puños y de cuatro pistolas, que sujeta tanto en sus manos como en sus tacones. Un exquisito control, intuitivo y sumamente preciso (con dos botones para golpear, uno para saltar y otro para disparar) se abre ante nuestros ojos, a los cuales les costará seguir el sincronizado baile de movimientos del videojuego. Caminar, correr, saltar, propulsarnos sobre las paredes o esquivar ataques son acciones básicas de nuestra bruja, a las cuales se suman más de un centenar de movimientos especiales y combos. Y para no perder nunca la forma y seguir aprendiendo nuevas técnicas, nada mejor que entrar en el menú de pausa o aprovechar las pantallas de carga, dispuestas para que sigamos machacando botones sin parar. Estáis advertidos: esta obra perjudica seriamente la integridad de vuestro controlador.

Let me see what spring is like on Jupiter and Mars

No obstante, la auténtica clave jugable del título tiene relación con la última genialidad del director Hideki Kamiya: el tiempo brujo. En su intento por no engendrar un mero "machaca botones", el japonés ha creado un sistema que probablemente creará tendencia, y que consiste en la simple mecánica de esquivar los ataques enemigos en el último momento para activar una dimensión temporal en la que el tiempo se ralentiza, algo ideal para que aplastemos a nuestros rivales fácilmente.

Esquivar y contraatacar, esa es la simple pero efectiva filosofía "hack 'n slash" en que descansa Bayonetta, y la verdad es que los resultados son fulgurantes, con enfrentamientos fluidos, ágiles y frenéticos que hasta a la cámara le costará seguir (no siempre nos acompañará con acierto). Pero ahí tendremos el stick derecho, para rotarla o colocarla justo detrás de nosotros, reposicionando nuestro punto de vista para continuar con una acción desbordante que podría fácilmente asustar a los primerizos del género. Pero que no se preocupen. Platinum Games nos da cinco niveles de dificultad, proponiendo a los principiantes un modo de control automático (basado en centralizar toda la carga jugable sobre un solo botón). Además, los "checkpoints" son muy frecuentes, tenemos 30 ranuras de guardado y podemos cambiar la dificultad antes de comenzar un nuevo capítulo.

In other words, hold my hand

La Inquisición practicó durante la famosa Caza de Brujas un número incontable de torturas y sacrificios, así que seguramente Platinum Games pensó que ya era hora de que nuestra heroína se tomara su particular venganza. De esta manera, y antes de acabar con los ángeles enemigos (siempre que tengamos los suficientes puntos de magia), podremos desencadenar una ejecución final, activando un evento "quick time" en el que culminar con arte nuestra faena a través de una guillotina, una dama de hierro, un potro o un aplastador de cuerpos. Todo mientras que machacamos un botón para obtener los mejores resultados.

No os vamos a engañar, Bayonetta es un videojuego muy sangriento, pero lo irreal de su planteamiento, construido sobre un mundo ilusorio, sobre una fantasía celestial, le otorga un carácter en algunos momentos hasta cómico gracias al cuidado tratamiento desempeñado por Yoji Shimomura, responsable de las cinemáticas del título. Unas secuencias de introducción muy frecuentes, bastante largas y que aprovechan el motor del juego, se presentan ante nosotros de manera sobresaliente para contarnos lo que está pasando, metiéndonos mejor en la acción. Y lo más curioso y hasta cierto punto atrevido del asunto es que no siempre acudirá a la pantalla una espectacular "intro" dotada del talento condensado de la empresa U'DEN Frame Works, sino también escenas estáticas mostradas a modo de película de 35 milímetros.

In other words, darling, kiss me

Por ejemplo, en los escenarios, que son altamente destructibles, podremos romper bancos de madera, coches, barriles, estatuas y pequeñas tumbas para obtener vida e ingredientes (hasta tres) con los que cocinar -siguiendo las instrucciones- variados objetos que nos ayudarán a recobrar vida o aumentar nuestros poderes mágicos, entre otros. Recordad, Bayonetta es una bruja, y eso tiene muchas ventajas.

De esta forma, estaremos preparados para los enfrentamientos contra los enemigos de final de nivel, los cuales tienden a ocupar toda la pantalla para hacer un alarde desmesurado de sus descomunales proporciones. No obstante, no habrá que preocuparse demasiado. Con sólo estudiar sus movimientos y tener grandes reflejos podremos reducir su nivel de salud al mínimo para acto seguido atestarles un movimiento final, el más explosivo de nuestra sexy bruja: la invocación de un demonio infernal. Llamadas por Bayonetta, estas extraordinarias criaturas suponen el clímax y perfecto desenlace a una batalla épica donde nosotros sólo tendremos que pulsar repetidamente los botones mientras que vemos cómo una tremenda araña descuartiza a nuestro rival o un enorme cuervo se traga al enemigo sin compasión alguna.

Fill my life with song

A esto se une el minijuego Angel Attack, que después de un duro nivel nos propone la oportunidad de jugar en una máquina arcade con ángeles volando por la pantalla. Nuestro cometido, incrustarles balas en la cabeza, matándolos de dos en dos si es posible para obtener puntos que cambiar por determinados objetos o, en su defecto, halos dorados.

Precisamente, estos halos, que también encontraremos durante la aventura principal, suponen un importante elemento de rejugabilidad. Reuniéndolos, podremos comprar en las Puertas del infierno, un lugar donde encontrar armas, accesorios y objetos como chupachups que recuperan vida y magia, que crean barreras de defensa temporales, que incrementan nuestra barra de vida, que potencian temporalmente nuestro poder o que amplían nuestro potencial mágico. Eso sin contar las técnicas, como la habilidad de esquivar ataques en el aire o de hacer un "breakdance" cargado de disparos en medio de una batalla. Verdaderamente, hay muchas razones por las que completar Bayonetta una y otra vez para obtener más y más halos.

And let me sing for ever more

En los escenarios, si investigamos lo suficiente, también podremos dar con una serie de himnos angelicales que, una vez recuperados, desbloquearán armas en forma de escopetas, garras especiales, katanas... Será esta una ocasión ideal para asignar nuevas armas a los dos arsenales disponibles durante el juego. Hideki Kamiya calificó de "crucial" este aspecto del título, problemático en términos de programación y que permite cambiar "in game" entre dos estilos de combate con sólo pulsar el gatillo izquierdo de nuestro controlador.

Una vez estemos equipados veremos cómo nuestros ataques cambian completamente si usamos las pistolas, el látigo o las garras, entre otros. El surtido de movimientos aumenta, los combos se renuevan y, en general, la experiencia de juego se enriquece con más oportunidades jugables, dándonos fuertes motivos para completar la campaña una vez más. Puede que incluso ésta sea una excusa ideal para obtener las lágrimas de sangre de Umbra que nos quedan (las conseguiremos superando capítulos, activando el tiempo brujo un número de veces, realizando ataques tortura, etc.).

You are all I long for

En efecto, en Bayonetta contamos incluso con niveles de interludio, esos que desde antaño se colocaban para dar un respiro al jugador. En el caso especial de Platinum Games, va a servir también para despertar en el usuario sus anhelos más profundos.

Una fase de conducción con la música de After Burner de fondo, continuos guiños a Out Run, otros tantos dedicados a Sonic the Hedgehog, otro nivel a bordo de un misil que emula al mítico Space Harrier y hasta una referencia al buhonero de Resident Evil 4 nutren algunas de las situaciones familiares con las que se encontrará el usuario veterano de videojuegos. Platinum Games se ha esforzado para tocarnos la fibra sensible y, a la vez, hacer notar que es este un videojuego realizado con el apoyo de SEGA, que ha cedido parte de su propiedad intelectual (principalmente, melodías del mítico compositor Hiroshi Miyauchi, más conocido como "Hiro"). Un gran apoyo, sin duda, pero que es poco comparado con los más de 100 temas que escucharemos dentro del videojuego.

All I worship and adore

Eso, por supuesto, sin contar la participación de otros brillantes músicos como Hiroshi Yamaguchi, Norihiko Hibino y Takahiro Izutani. Pocas veces veremos en un mismo videojuego a tanto genio musical junto, los cuales están encargados tanto de proponer un fondo sonoro a nuestras peleas como de otorgar vitalidad a las escenas de introducción, perfectamente fusionadas con la acción para hacer intensa la narración, proporcionándole riqueza, contenido y profundidad.

El doblaje en inglés, es en este caso sobresaliente y está dotado de gran expresividad. En especial, destacar la voz de Bayonetta, que consigue caracterizar perfectamente a ese personaje sensual, inteligente pero chulesco y un tanto engreído que se diseñó originalmente. Es una lástima, sin embargo, que durante el proceso de localización no se considerara el hecho de traérnoslo doblado al español, puesto que los subtítulos no captan la esencia de la aventura y, si no conocemos el inglés, nos perderemos muchas de las expresiones humorísticas utilizadas. Una auténtica pena, puesto que la obra cuenta con un continuo, contenido pero muy agradable y apropiado sentido del humor.

In other words, please be true

Tal vez lo más interesante de todo el proceso sea contemplar los diseños conceptuales y luego contrastarlos con el videojuego para darse cuenta del delicado trabajo de modelado realizado. Pocos videojuegos existen que sean capaces de trasladar la esencia del artista desde el papel al lienzo interactivo, dándonos la ambientación mística y celestial que en un principio pretendía el proyecto Bayonetta.

Los enemigos finales, unos de los elementos de animación más ambiciosos que se hayan visto en el género, también entran dentro de este particular saco visual. Y tal vez más loable aún que la complejidad de los mismos sea el hecho de que el "frame rate" nunca se resiente, siendo bastante firme en PlayStation 3 –versión algo menos definida en imagen que la de Xbox 360, y lastrada también por unos tiempos de carga algo más largos-. De igual modo una auténtica delicia visual apoyada por un más que aceptable detalle de texturas y un sistema de iluminación y efectos que, como anécdota, os diremos que fue configurado con un motor "in game". Cuando se trata de desarrollar videojuegos, los japoneses demuestran un carácter metódico inigualable y eso se deja ver en los resultados, tan destacados como personales.

In other words, we love you, Bayonetta

El encanto brujo de Bayonetta es una explosión de sensaciones, un volcán jugable en plena erupción, una montaña rusa repleta de emoción, una perfecta coreografía de golpes y puñetazos, un baile a la luz de la luna con los ángeles, una sensual pasarela con una modelo muy bruja y, al mismo tiempo, atractiva. En definitiva, un "hack 'n slash" femenino, pero muy violento, fantástico y dotado de infinita ilusión.

Una dicotomía visual y de diseño que ya está siendo tan repudiada como admirada. Nadie se pone de acuerdo. A no todos les gusta el personaje, a no todos les convence su jugabilidad, pero nadie puede negar que Platinum Games ha creado un videojuego con ganas de innovar en un género explotado, carente de ideas y al que le faltaban las artes oscuras de una bruja para reformarse, el toque femenino de un Hideki Kamiya que se reencuentra a sí mismo, tanto visceral como espiritualmente, en uno de esos videojuegos que marcan y no pueden ser olvidados. El género de los "hack 'n slash" goza a partir del 8 de enero de un nuevo y mágico exponente, y tiene nombre de mujer: Bayonetta.