El autor de la hazaña se atreve ahora con el modo Pesadilla en el juego de id Software.
Cuando todos juegan, todos ganamos. Con estas palabras promociona Microsoft el Xbox Adaptive Controller, un mando que busca solucionar cualquier posible problema de accesibilidad a los jugadores en situación de discapacidad. Y vaya si lo consigue, puesto que ha permitido a un usuario con problemas completar DOOM Eternal de principio a fin a pesar de las dificultades.
A través de Twitter, Dave Oshry, responsable del shooter retro Dusk, ha compartido la hazaña de un miembro de su grupo de Facebook, quien ha logrado superar DOOM Eternal gracias al Adaptive Controller de Microsoft. El dispositivo le ha permitido complementar la falta de una mano con el uso de los pies para parte de los controles del juego. Todo un logro en un título frenético que requiere de movimientos precisos y veloces, con buena habilidad, y que además se ha llevado a cabo en la dificultad "Hacedme daño", que no en la más sencilla.
Disabled gamer in the FB group just beat DOOM Eternal on HMP with an adaptive controller!
— Dave @ MORTIS (@DaveOshry) April 2, 2020
👑 Look at who the first comment is from 👑 pic.twitter.com/gk0S0Nb6iz
De hecho, el jugador, del que no se ha mostrado el nombre para respetar su intimidad, asegura que está jugando ahora en la dificultad "Pesadilla", una buena muestra de las posibilidades que abre este dispositivo para aquellos que poseen dificultades. Por su parte, el propio Hugo Martin, director creativo de DOOM Eternal, ha respondido al jugador para celebrar el acontecimiento, con el siguiente mensaje: "¡Tú eres todo un slayer! ¡Respeto!".
Con historias como esta, se entiende mejor que el Xbox Adaptive Controller fuera uno de los inventos del año 2018 para Time, y hay que celebrar que todos puedan jugar a aquellos títulos que les gustan, independientemente de su situación. En cualquier caso, os recordamos que DOOM Eternal ha supuesto el mejor estreno para un título de la saga, y si queréis saber por qué causa tanto furor, aquí tenéis nuestro análisis de DOOM Eternal.