Hablamos con los desarrolladores de Boomfire Games, responsables de un interesante plataformas indie.
A pesar de que cada vez vemos más producciones de videojuegos españoles, lo cierto es que la situación dista mucho de ser la más deseable. No hay un tejido consolidado, y las ayudas estatales son insuficientes, a pesar de que hay movimientos por facilitar inversiones y de que se espera que en 2020 el número de empleos se duplique en este sector.
Hemos contactado con Boomfire Games, autores del nuevo Furwind, un plataformas old-school que ha tardado en gestarse dos años. La falta de apoyos del Estado, y los problemas de financiación son dos de los problemas que se encontró el estudio cordobés: "Llegamos a la conclusión de que era tan difícil que decidimos apostar por Furwind usando tiempo y no endeudándonos, aunque eso ha significado no recibir nada mientras desarrollábamos el juego".
El videojuego está diseñado en Gamemaker, un motor 2D que, según se puede leer en la web oficial, "no tiene barreras de acceso y posee poderosas funcionalidades". El estudio diseñó el juego con ganas, pero incluso ellos mismos afirman que necesitan un empujón y reconocimiento que ahora mismo es "muy tímido", especialmente en su región: "Somos de los que pensamos que la industria del videojuego en España debería contar con un apoyo como mínimo como el del cine, teniendo en cuenta que la industria del videojuego ya factura más que éste".
Somos de los que pensamos que la industria del videojuego en España debería contar con un apoyo como mínimo como el del cine
Como comentamos en nuestro análisis de Furwind, estamos ante un título que pertenece a esa época en que los videojuegos "se hacían de otra forma". Bajo presupuesto, pocas personas… pero mucha pasión. Los desarrolladores se inspiraron en los plataformas de los 8 y 16 bits: "Hemos crecido en ese mundo y siempre nos gustó ese sabor. No es que hayamos querido imitar con exactitud ese tipo de juegos, porque la mezcla a veces es más rica que la pureza, pero sí, nos sentimos cómodos en este escenario y creemos que hay mucha gente que comparte nuestros gustos".
Esa ha sido la motivación principal para crear un plataformas de dificultad bastante elevada, y que recrea ciertas sensaciones jugables que parecían olvidadas: "El juego es mejor conforme avanzas porque te haces a él. Es como desoxidarte, y te das cuenta que lo dominas cuando tienes la increíble sensación de victoria contigo mismo, porque estas superándote, y a nuestro parecer es la recompensa más satisfactoria que produce tu cerebro".
El estudio Boomfire Games defiende que es una dificultad que no es injusta con el usuario, y que nunca consideraron temas como un selector de dificultad. Son conscientes de que es un juego difícil, pero todo está ajustado para que exista una gran satisfacción tras cada reto superado.
Si queréis conocer más detalles sobre Furwind, podéis consultar nuestro análisis. Actualmente el videojuego está a la venta en Steam a un precio de 7,37 euros.