La historia empezó de la forma más absurda posible. Decenas de usuarios mencionaba en redes sociales de forma equivocada a una profesora llamada Emily Perkins. Su nick "Perkz" coincidía con el de uno de los jugadores profesionales de League of Legends con mejor trayectoria en las ya once temporadas de historia competitiva del título de Riot Games. Cansada de no entender nada, respondió a otro usuario: "Por favor, deja de mencionarme. No tengo ni idea de quién eres o de qué estás hablando". Los videojuegos no le eran completamente ajenos, pero nunca se había interesado por este en particular. Algo más de dos años después, sin embargo, tanto su vida como la de los que le rodean cambió para siempre por culpa de LoL.
Una coincidencia con League of Legends de protagonista
Pese a sus primeras aclaraciones, los errores de la comunidad se sucedían y la situación era cada vez más surrealista para Emily Perkins. "Por favor, tened en cuenta de que yo no soy el Perkz de Cloud 9 solamente una mujer de Leicester". Las causalidades fueron un paso más allá. Mirando su Twitter por curiosidad, muchos usuarios descubrieron que tenía una cobaya como mascota a la que llamaba Fudge. Aunque el nombre no le dirá nada a los usuarios menos conectados con la escena competitiva de League of Legends, "Fudge" era precisamente el nick de uno de los compañeros de equipo de Luka Perkovic (nombre del Perkz jugador) en la época.
Las casualidades eran ya demasiadas y Emily Perkins, al saber que no había nada que hacer, cambió su biografía en las redes sociales para reírse de la situación. "Mujer de Leicester. Campeona de Europa ocho veces (EU LEC/LEC). Campeona del MSI. Dos semifinales de Worlds, una final de Worlds. Poseedora de una cobaya". Mezcló el palmarés del jugador profesional del jugador de G2 Esports, Cloud 9 o Team Vitality con un par de hechos de su vida y la comunidad no tardó en reaccionar. Su historia era demasiado divertida como para dejarla pasar. Se hizo viral en redes sociales y hasta comenzó a aparecer en tertulias de esports.
Las redes sociales se llenaron de memes sobre Perkz o Fudge por las coincidencias en los nombres (Vía Twitter, @IWDominate).
Lo más curioso de la historia, sin embargo, es que lo curioso no acaba aquí. De no saber quién era Luka Perkovic pasó a ser su mayor fan, de tener un desconocimiento absoluto de League of Legends a protagonizar Pentakills tanto en el juego principal como en Wild Rift y de no conocer los esports a convertirlos en una parte central de su vida. Apenas un año después de que tuviera lugar la confusión inicial, publicaba lo siguiente en sus redes sociales: "Hace más de un año me confundieron con el mejor jugador de todos los tiempos. Hoy he recibido la aprobación para seguir adelante y construir un fenomenal estadio de esports en mi escuela".
Por culpa de este error en Twitter, la profesora incluso ficho por Cloud 9 (equipo en el que jugaba Perkz en la época) en calidad de embajadora de marca, creando contenido para el club y participando en algunas iniciativas sociales. Acabó mezclando dos de sus pasiones. Vio en las competiciones de videojuegos una fuerza positiva para la educación. "Estoy segura de que muchas personas que me leen sintieron esa sensación de no terminar de encajar en la escuela. ¡Espero que lo que estamos creando ofrezca un espacio para los niños que se sienten así!", decía con respecto al estadio de esports en su escuela. Lo cierto es que el videojuego competitivo, sobre todo cuando se basa en partidas por equipos, puede ser un factor positivo para la educación similar al deporte tradicional. Por supuesto que no tienen ese efecto positivo en la salud física general, pero sí comparten valores como el compañerismo o la gestión de la frustración.
Esta es la 'arena' de Esports construida en una escuela de Leicester gracias a la insistencia de Emily Perkins.
Recapitulando, la cadena de hechos fue simple. En enero de 2021 fue la primera vez que respondió a la confusión de los jugadores, un poco después cuando comenzó a trabajar con Cloud 9, en mayo de 2022 cuando recibió la aprobación para la construcción y hace apenas unos días (septiembre de 2023) cuando se terminó de montar esta 'arena' de esports en la escuela. Un lugar con un aspecto espectacular para que niños del colegio de entre 11 y 18 años lo tengan como una "extraescolar" más. Quizá choca, pero los centros educativos siempre han sido mucho más que el lugar donde aprender un poco de matemáticas. Añadir los videojuegos como una herramienta para la formación, teniendo en cuenta los tiempos que corren, parece una opción ganadora.
La propia Riot Games ha felicitado a Emily Perkins por su dedicación y, la verdad, es que casi toda la comunidad está impresionada con la historia. Si no fuera porque compartían nick con uno de los mejores jugadores profesionales de la historia, quizá nunca hubiera descubierto League of Legends. Estamos hablando de una mujer ya madura, con una familia y vocación por la enseñanza que probablemente solo habría escuchado aquello de los esports en conversaciones de sus alumnos. Sin embargo, su historia cambió de forma espectacular por una de tantas coincidencias que se nos presentan en la vida.
Atendiendo a cómo se han desarrollado los hechos, es muy probable que sigamos sabiendo más de Emily Perkins a lo largo de los próximos años. Desde luego, se ha convertido en una habitual del entorno competitivo. También en una fuerza positiva para la imagen de League of Legends en particular y las competiciones de videojuegos en general.