Se ha convertido en una de las series sobre videojuegos mejor valoradas y también en uno de los pilares sobre los que se sustenta el futuro de League of Legends. Sin embargo, el estreno de Arcane es uno de los más improbables de la historia. La serie pasó por todo tipo de penurias y estuvo al borde de la cancelación en al menos un par de ocasiones a lo largo de los seis años que tardaron en sacar adelante su primera temporada. Ya antes de eso, parecía imposible que Riot Games estuviera siquiera dispuesta a darle luz verde al proyecto. Desde la empresa lo han confesado. Su plan no era comenzar con la producción, si no convencer a sus empleados de que hacer una serie no era buena idea.
Arcane comenzó con un presupuesto de 2.000 dólares
Arcane salió adelante gracias a la insistencia de Christian Linke, también conocido como Riot Praeco. Fue el principal impulsor de la serie, pero quizá ese ni siquiera su mayor mérito. Lo verdaderamente interesante es que consiguió hacer que la compañía pasara del no más rotundo a aprobar la iniciativa. Para ello, llevó a cabo una estrategia de lo más básica: el pie en la puerta. Este truco psicológico dice que cuando alguien acepta llevar a cabo un pequeño compromiso con una idea o producto, luego será más propenso a realizar acciones –o en este caso inversiones– de mayor importancia. Es por eso que, en realidad, la historia de la serie de League of Legends comenzó con 2.000 dólares.
Primer concepto de Jinx para la serie Arcane.
Esa es exactamente la cantidad que Christian pidió a los responsables de Riot Games después de que inicialmente descartaran su proyecto. Una cantidad prácticamente simbólica para una compañía que ya estaba ganando mucho dinero gracias a League of Legends. Con este presupuesto se crearon los primeros artes conceptuales que convertían a los campeones del videojuego en personajes apropiados para la serie. Aquí, la empresa ya había caído en la trampa. No solo estaban algo más comprometidos con el proyecto debido a esa pequeña apuesta inicial, si no que habían recibido una prueba de que las cosas pueden salir muy bien.
Tras los primeros concepts arts, el siguiente paso del cocreador de Arcane fue seguir pidiendo. "Vale, dadnos algo más ahora, así podemos explorar algunos modelos 3D y esas cosas. ¿Quizá 5 de los grandes?" Riot Games aceptó a regañadientes, pero a partir de ahí no había vuelta atrás. Ver a los personajes tomar vida en una animación no solo era el sueño de los jugadores de League of Legends, también el de sus propios creadores. Es cierto que por entonces el proceso de expansión de la compañía apenas estaba empezando y todo se estaba destinando a crear videojuegos como Valorant o Legends of Runeterra, pero esta era una oportunidad que no podían dejar pasar.
La inversión más rentable de la historia
La última petición de Christian Linke fue de 65.000 dólares y Riot Games ya estaba demasiado subida al barco de Arcane como para decir que no. A fin de cuentas era una cantidad insignificante para una empresa que ya por entonces facturaba más de mil millones al año. Además, era la inversión definitiva. El plan con este dinero era crear la primera escena animada de la serie. Un corte vertical que mostrase hasta donde podía llegar el proyecto si recibía luz verde. Desde el punto de vista de la compañía, era perfecto: o se descubría que tenían entre manos algo verdaderamente bueno o cancelaban la idea y ya no tendrían que aguantar al 'pesado' de Riot Praeco.
Marc Merrill, presidente y cofundador de Riot Games, explicaba la situación en un documental: “La prueba de animación con Vi y Jayce en el tejado era una locura en términos de cómo estos personajes se expresaban y habían tomado vida. Después de todas estas pruebas cada vez más grandes… Todos pensábamos que necesitábamos más”. La escena que tenéis justo encima de estas líneas fue la que hizo a la empresa tomar la decisión de amortizar los que probablemente han sido los 65.000 dólares más rentables de su historia. La historia que siguió fue tortuosa y empleados de la compañía aseguran que, de saber dónde se estaban metiendo, habrían dicho que no. Sin embargo, los desarrolladores de League of Legends no son de los que dejan a medias sus proyectos.
La primera temporada de Arcane era tan mala que tuvieron que hacerla dos veces, pero todo mereció la pena. En su estreno, se convirtió en la serie más vista de Netflix. Riot Games partía con ventaja. La compañía no necesitaba que el proyecto fuera rentable en sí mismo. Lo que no consiguieran a base de vender los derechos lo obtendrían gracias a la publicidad indirecta. Cada capítulo de la serie se ha convertido en una herramienta de marketing para atraer nuevos jugadores a League of Legends, hacer volver a los que lo abandonaron y retener durante más tiempo a quienes todavía lo jugaban. Es un movimiento perfecto para mantener girando la maquinaria de un videojuego como servicio.
El éxito de la serie incluso sorprendió a los máximos responsables de League of Legends. Es por eso que la Temporada 2 de Arcane no llegará hasta 2024. De haber sabido que tendría una acogida tan positiva, los jefes de Riot Games hubieran empezado antes. Sin embargo, la espera promete merecer la pena. Según señalan desde la compañía, los primeros capítulos ya están listos y mantienen el estándar de calidad que ha caracterizado el proyecto.